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– Noonas, no lloren– Jeongin se puso triste al ver como sus dos únicas y mejores amigas, Jihyo y Momo, lloraban por su partida.

La mayor le entregó una bolsa con comida y bebida para que no sienta hambre ni sed en el viaje, mientras le repetía lo mucho que lo extrañarían.

El menor le agradeció mientras la otra lloraba desconsoladamente.

– ¿Con quién tendremos noche de chicas?– Preguntó Jihyo, se apoyó en la puerta de su auto y se secó las lágrimas con un pañuelo.

– Podrán visitarme allá, por favor no me dejen de hablar– Hizo un puchero y las mujeres gritaron, asustando a Jeongin.

Una vez que su madre lo llamó y se despidió de sus amigas, subieron al vehículo para empezar con el viaje.

Estaba feliz, comenzaría una nueva vida. Sabía que Momo y Jihyo estarían para él a toda hora, tenía a su madre brindándole su apoyo, los sueños acabarían.

– Deja tus maletas en la habitación que quieras, hay de sobra– Dijo la señora Yang una vez que entraron a la enorme casa

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– Deja tus maletas en la habitación que quieras, hay de sobra– Dijo la señora Yang una vez que entraron a la enorme casa.

Era hermosa, las paredes tenían un tono celeste, las escaleras eran de madera y habían cuadros pintados con formas raras o de animales, a los costados habían umbrales que llevaban hasta la cocina o la sala de estar.

Al subir al segundo piso, había un pasillo con varias puertas que llevan a baños, escritorios, cuartos, biblioteca, de todo.

Entró a la primera habitación, era espaciosa y las paredes estaban pintadas de color amarillo, como a Jeongin le gusta, había una mesa con una lámpara, una televisión, una cama grande para él solo. Todo era un muy bonito sueño.

– ¿Por qué una casa tan grande, mamá?– Preguntó una vez que bajó a donde estaba su madre, sentada en uno de los bonitos y delicados sofás.

– Porque era bastante espaciosa y está situada en un barrio seguro– Se levantó y acarició la mejilla de su hijo, recibiendo una sonrisa de parte de este– ¿Vamos a cenar a un restaurante? 

Cuando el menor asintió, salieron de su nuevo hogar y marcharon en auto.


No se notó el cansancio del viaje hasta cuando llegaron a la noche y cada uno se fue a su cuarto.

Estaba contento, mañana comenzaría las clases en su nueva escuela y esperaba a hacer nuevos amigos, ya que en Busán nadie la hablaba más que sus noonas.

Chat: Chicas exitosas

Jeongin: Estoy bien! Llegué de cenar, mi casa es hermosa, espero que puedan venir algún día.

Momo: Me alegro, cielo. Jihyo está preparando las valijas para ir contigo en cuanto pueda.

Jihyo: No te veo hace un par de horas, ¡pero te extrañamos mucho!

Jeongin: Yo a ustedes, cuídense por favor.

Lucid Dream [Hyunin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora