Lucid Dream [Hyunin]

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No pudo dormir nada por los ruidosos sollozos del menor, se suponía que debía estar allí para ayudarlo, ¿no? Bueno, lo intentó.

Le gritó diciendo que deje de llorar, pero eso intensificó los gritos desgarradores que daba. Se disculpó y se tomó el tiempo de abrazarlo y acariciarlo para que se calme. No estaba cómodo en el sillón donde se encontraban, pero no podían moverse a la habitación.

Realmente no durmió, cuando Jeongin cerró sus ojos para descansar un rato, el timbre resonó en toda la casa, una y otra vez. Eran las ocho de la mañana, ¿quién estaría a esta hora en la calle? Los trabajadores solamente.

– ¡Jeongin!– Abrió la puerta, dejando ver a dos chicas con maletas y bolsos en la entrada, no saludaron a Hyunjin y lo pasaron por al lado, corriendo a ver dónde se encontraba el menor.

– ¡Mi pequeño, lo sentimos tanto!– Se acercaron a abrazarlo mientras derramaban lágrimas entre los tres, menos Hwang quien seguía viendo todo desde la entrada principal, con la boca semi abierta.

– Noonas, ¿qué hacen aquí?– Trató de hablar, pero su voz se quebró por centésima vez.

Sus amigas le explicaron rápido cómo se enteraron, su madre les mandó una nota de voz donde les contaba lo que le pasó a Jeongin y cuál era su dirección por si querían verlo, pero cuando llegaron a la gran ciudad todo el mundo hablaba de la muerte de la señora Yang, ya que era muy conocida por sus trabajos en el hospital o porque era muy amigable y conocía a media Corea.

– ¿Qué harán con esos bolsos?– El mayor habló por primera vez desde que las chicas llegaron y señaló con su dedo los equipajes que estaban en el mismo lugar donde los dejaron.

– ¿Tienes un mayordomo?– Preguntó Jihyo sin dejar responder a los chicos– ¡Genial! Entralos, por favor.

Jeongin trató de explicarle a sus noonas que Hyunjin es el hijo de la amiga de su madre y se quedó con él esa noche, no iba a contarle que era él quien aparecía en sus sueños.

El joven se despidió del menor y se fue, no iba a soportar malos tratos viniendo de las mujeres ni tampoco quería estar en la casa de Yang. Hubiese preferido no dormir por estar en una fiesta en vez de tener que soportar los llantos de un niño. Si bien era entendible, Hyunjin quería y debía alejarse del menor para no soñar más con él.