El último ocaso {CAMREN} {COMPLETA}

Capítulo 14

Salimos de la habitación después de haberme lavado la cara. Nada más salir nos encontramos de cara con mi hermano y los otros que ya iban dirección a la furgoneta.

-¿Estas bien? – Me mira mi hermano con el ceño fruncido.

-Sí, es solo que esta situación me sobrepasa- Digo sonriéndole.

-¿Qué situación? – Me pregunta interesado. Noto como Sofía pasa por detrás de mí para seguir a los demás y me da un leve golpe en la espalda y me susurra sin que lo escuchará mi hermano un "No se lo digas".

-Esto de estar siempre alerta por si en cualquier momento hay alguna amenaza, esas cosas no descansan nunca y a mí tampoco me dejan descansar.- Le sonrió de lado y empiezo a andar detrás de todos.

-Está bien, dejémoslo así y hagamos como que me lo he creído- Dice llegando a mi lado.

-Me parece bien. – Digo asintiendo seria sin mirarle.

Bajamos por las escaleras los dos pisos que había, iba concentrada en todo mi alrededor, me había puesto en cabeza con Kira atada a mi lado, seguida por Sofía a su lado Camila y detrás de ellas, Normani, Dinah y Chris. Íbamos andando tranquilamente hasta la furgoneta, pero con los cinco sentidos activos.

-¿Habéis escuchado eso? - dice Dinah mirando hacia una de las puertas traseras que había en el motel. Agudice el oído a ver si yo también escuchaba lo mismo. No escuchaba gemidos de zombies, pero si golpes en una puerta, me acerqué más a la puerta y puse la mano en ella intentando parar los golpes sutilmente, los cuales de repente pararon, puse la mano en la pistola del cinturón.

-Lauren aléjate de ahí ya, ¡Son zombies! ¡Te han olido! - Dice Chris al ver que los golpes se habían intensificado notablemente, me eche hacia atrás viendo que la puerta estaba a punto de ceder.

-¡Todo el mundo atrás ya! - Dije gritando- En ese momento las bisagras cedieron y la puerta cayó abajo, conté rápidamente, había como unos quince zombies hambrientos que venían hacia nosotros corriendo. - ¡Correr! ¡Ya! ¡Vamos rápido!

Echamos a correr todos a la vez, mi hermano y yo nos quedamos atrás intentando contener a la horda mientras los otros corrían sin parar a la furgoneta. De repente escuché disparos que venían detrás de mí me giré mientras recargaba la pistola y vi que era Dinah el que estaba disparando sin silenciador, seguramente cubriéndonos para que avanzaremos hasta donde estaban ellos. Fruncí el ceño totalmente enfadada y giré a ver a mi hermano.

- Chris hay que salir ya de aquí, Dinah no está usando silenciador, van a empezar a venir muchas cosas de esas por el ruido- Dije mientras seguíamos disparando y andando hacia atrás. – Joder, no puede ser. – Del boque que había a los alrededores del motel empezaron a salir zombies- ¿¡Cuantos hay!?

-No lo sé, pero más de cincuenta seguro que hay. Lauren por la derecha vienen más, nos están rodeando, hay que correr ya. – Le asentí a mi hermano y empezamos a correr.

-¡CORRER! ¡VAMOS VENGA RÁPIDO! – Les grite viendo que Dinah seguía disparando- PARA YA DE DISPARAR JODER! ¡LOS ESTAS ATRAYENDO! ¡Y TU PUTO SILENCIADOR! -Le grite totalmente enfadada. Todos a la vez nos pusimos a correr, adelante al grupo con mi velocidad llegando pocos segundos junto Chris y Kira a la furgoneta, me puse en el asiento del conductor y Chris a mi lado, segundos después llegaron los demás. Me puse a buscar la llave, pero no la encontraba por ningún sitio y los zombies estaban a escasos 20 metros. - ¡Donde cojones están las llaves! – grite alterada. Aquí, dijo Chris sacándolas de la guantera. Arranque rápido y antes de que tocaran la furgoneta nos alejamos de ellos a toda velocidad. Llevábamos diez minutos de carretera y la tensión y los nervios estaban a flor de piel.

-Para- Mire a Sofía con cara interrogante por su pedido, ella me miro y sin expresión volvió a hablar- Para donde puedas por favor – Dijo urgente. Pare a un lado de la carretera y antes incluso de frenar en seco la furgoneta, Sofía se bajó y se puso a vomitar en un lateral de la furgoneta. Me baje pasándome las manos por el pelo, muy estresada y muy enfadada. Busque a la causante de mi enfado con la mirada y sin pensármelo dos veces y totalmente encendida llegue a ella y le di un empujón.

- ¡SE PUEDE SABER EN QUE COJONES ESTABAS PENSANDO, DONDE ESTÁ EL PUTO SILENCIADOR QUE TE DI, EH! - Dije gritándole a Dinah, ella me miro enfadada. – ¡Has visto lo que has provocado, si disparas sin silenciador haces más ruido inútil y vienen más zombies a por nosotros, hemos escapado por los pelos!

- ¡Que yo sepa gracias a dispararles os he conseguido más tiempo para llegar a la camioneta, así que antes de echarme la bronca deberías de pensártelo dos veces y agradecérmelo por salvaros la vida! - Dice furiosa cruzándose de brazos. En ese momento explote de rabia y le lance un puñetazo con todas mis fuerzas haciendo que le empezara a sangrar la nariz, seguramente no le haya roto la nariz, pero si le iba a doler un buen tiempo.

-No pienso agradecerte nada y menos que nos hayas "salvado", Chris y yo perfectamente hubiéramos acabado con los quince y nos hubiéramos ido tranquilamente hacia la furgoneta, pero no, ¡Tenías que hacerte la heroína y por eso casi nos matas!-Le grité mientras ella, algo desorientado se tocaba la nariz que le sangraba, me miro muy furiosa, me lanzo un puñetazo que esquive poniendo su brazo detrás de su espalda en una llave que con un solo movimiento podría partirle el brazo, ella se quejaba sin parar del dolor que sentía. – Piénsate tu dos veces las cosas antes de hacerlas y de decirlas. -Le dije en el oído.

-¡Para ya! ¡Suéltala Lauren! – Me dijo ahora una enfadada Normani. Hice lo que me dijo y me fui a ver a Sofía que seguía aún vomitando. Pase al lado de Chris que me hizo un gesto asintiéndome con la cabeza.

-¿Ey, como estas? - le pregunte agachándome a su altura, poniéndome al lado de ella. Ella se levantó al escucharme y me abrazo. - Ya está. ¿Qué es lo que te pasa? – Le pregunte cogiendo su cara de ambos lados viendo como lloraba.

-No puedo dejar de pensar que toda esa gente que habéis matado son personas. ¿En que nos convierte eso, en asesinos?

-No, no, no, Sofía... eso de allá no eran personas, esas cosas ya no tienen familia, ni sentimientos, ni pensamientos, ni nada, esas cosas lo único que quieren es matarte a ti para comer y que te conviertas en uno de ellos. Y no pienso permitir eso mientras este aquí, ¿De acuerdo? – Le dije abrazándola de nuevo escuchando como lloraba.