Me desperté al sentir algo frío encima de mí. Miré aturdida a todos lados, pero no podía ver nada, note que tenía puesta una banda, intente quitármela, pero tenía las manos atadas. Estaba de rodillas y tenía las manos atadas una a cada lado en lo que supuse eran dos postes.
-Vaya, vaya, la princesita ha despertado por fin. No sabía que ese gas era tan potente. -Dijo burlándose, al reconocer quien era me dio un escalofrió en la espina dorsal.
-Coronel...-Dije entre dientes, él solo se rio.
-Bueno ya que todos nos conocemos te voy a quitar la banda para que puedas mirar, siempre has sido muy curiosa o no es así Jauregui. -Me quito la banda y la luz de un foco mirando directamente hacia mí me cegó momentáneamente, mire a mi alrededor, era un sitio oscuro, tenebroso, al cual sin duda le hacía falta una limpieza, unas mil capas de pintura entre otras ciento de cosas. Seguí mirando y vi a Chris en frente de mi en lo que parecía la misma posición que la mía, pero el aún seguía durmiendo.
-Hijo de la gran puta. Que le has hecho.
-Nada, lo mismo que a ti, lo que pasa es que el aún no se ha despertado, aun que leí por ahí que con grandes cantidades de cloroformo se podía matar a alguien. Bueno tal vez esté muerto.
- ¡Te juro que te voy a matar, eres un cabrón hijo de puta!
-No jures cosas que no vas a cumplir. -Dice sentándose en una silla que había a un par de metros de mí.
-Que hago aquí, que quieres de mí.
-En realidad nada, el problema es que eres demasiado curiosa y no me ha gustado nada que te pusieras a escarbar entre mis cosas. Así que pienso divertirme un buen tiempo hasta matarte. Obviamente voy a matarte eso no se negocia, lo digo por si se te ocurría... La cosa es que puedo matarte rápido de un tiro sin que tengas que sufrir mucho o también puedo torturarte a no ser que me digas lo que quiero escuchar.
-Vete a la mierda. No voy a decir nada.
-Estás muy negativa, como puedes decir que no, si ni siquiera sabes lo que es. Está bien como esto no es un acuerdo justo y no pierdo mucho te dejo preguntar. Pregunta y después respondes tu a mis preguntas.
-En el archivo pude ver tu nombre, pero no como el que lidero la operación para detener a R.I.V.E, sino el que estaba de líder de esa organización.
-Exactamente, era y soy el líder de R.I.V.E. si te preguntas como es posible que este ahora de coronel. Bueno... Uno sabe jugar sus cartas. Has escuchado alguna vez eso de, la información es poder, pues déjame decirte que es totalmente cierto. Supe buscar información donde debía y con chantaje a la gente adecuada estoy donde me ves hoy en día. -Dice sonriendo orgulloso.
-Has sido tu... tú has sido el que ha montado todo este desastre mundial.
-Si y aunque me cueste admitirlo debido a mi orgullo, no he sido yo solo claro está. Tú no eres consciente de lo que haría cualquier persona por obtener el poder absoluto.
-No cualquier persona, los enfermos mentales como tú. –Espete.
-Si, enfádate todo lo que quieras, pero no he sido yo el único que ha planeado todo esto. La envidia y la avaricia siempre ha sido lo que ha precedido al ser humano, ya lo decía la biblia en los siete pecados capitales. El caso es que cuando llegas y le dices a alguien que puede llegar a gobernar el mundo si él quisiera, lo dejan todo para escucharte. Al principio no había muchos que estuvieran de acuerdo, ya sabes... Por la tontería esa de que iba a morir mucha gente. Pero es que esos no entendían que el plan era ese. Reducir casi un noventa por ciento la población para poder empezar a gobernar de nuevo un mundo completamente diferente. -Dice orgulloso contando su plan.
-Y este maravilloso plan se te ocurrió a ti solo, porque no me creo que las tres neuronas que te quedan organizaran todo esto. -Se levantó enfadado de la silla y me dio un puñetazo en la boca partiéndome el labio.
-Pues para tu desagrado, sí Jauregui, se me ocurrió a mí solo. Y al parecer no ha ido tan mal. -Dice abriendo los brazos.
-No sabes lo que has creado, este nuevo mundo como tú lo llamas solo va a estar lleno de zombies vagando por todos lados. Y que, has conseguido cerrar un país para que no llegue la plaga, pero llegara, algún día llegara y si no llegara, es un país no es una tierra entera. Por tu puta codicia te has cargado el planeta en el que vivimos gilipollas. -El solo sonrió satisfecho a lo que decía y volvió a sentarse en la silla, escupí a un lado la sangre que tenía acumulada en la boca y le presté atención de nuevo a sus tonterías.
-Estaba esperando que dijeras eso. Sabes me vino muy bien que me dijeras eso del suero milagroso. Yo pretendía lanzar a esos países una cuantas de bombas para limpiar todo, pero con tu milagrosa cura podré revertir el proceso y crear un suero que mate a todos esos zombies. Mi proyecto de restauración iba a durar como unos diez o quince años y ahora con mucha mala suerte cinco.
-Hijo de puta. ¿Quién más está detrás de todo esto?
-Pues en realidad antes había mucha gente ahora ya casi no queda nadie. -Empezó a reírse. -La historia es que tiene gracia, mira te cuento. Hice trato con muchos grandes empresarios, también con el gobernador chino y el de estados unidos, con el trato de que cuando empezara todo esto les mandaría un helicóptero a recogerlos, es gracioso porque el helicóptero nunca les llego y lo único que espero es que los hayan devorado los zombies a ambos. -Dijo riéndose a carcajadas. -Ahora mismo solo colaboro con algunos ministros del país. No alcanzo el poder completo en este país, pero estoy trabajando en ello, no te preocupes.
-Eres repudiable, te juro que te voy a matar. -Escuchamos un par de ruidos al otro lado de la habitación y miramos los dos hacia allí.
-Vaya parece que el bello durmiente ya despertó, se ha perdido la ronda de preguntas, luego lo pones tu al corriente. -Dice mirando sonriente a Chris, se acercó a quitarle la banda. Pude ver la cara de asombro de Chris y la risa asquerosa del coronel. -Luego que te lo explique todo, ahora esta ella por responder a unas preguntas mías.
-No pienso responder a ninguna pregunta gilipollas.
- Lauren... Creí que habíamos llegado a un acuerdo, tú me preguntabas todo lo que querías saber y después invertíamos los puestos. -Le escupí en los zapatos y él sonrió negando con la cabeza- acabaras hablando, así que no me hagas perder el tiempo.
-Vete a la mierda. -Justo después de hablar me pego un puñetazo otra vez en la misma parte del labio ampliando la herida.
-Donde están los documentos, no me creo que se te cayeran, por favor Jauregui, ¿Me tomas por tonto? -Le escupí la sangre en los zapatos y él se río. -Te hare cosas peores que un labio partido hasta que hables, no te reconocerán la cara en tu funeral, inútil. - Dijo dándome una pata en el estómago.
-Aghhh. -Dije quejándome y escupiendo de nuevo la sangre que tenía en la boca. - Podría seguir así todo el día. Y seguiría sin decirte nada.
-Está bien...-Saco un cuchillo de su pantalón y me lo clavo en el hombro. No quería matarme, solo hacerme sufrir y lo estaba consiguiendo. –Donde están los documentos. -Grite de dolor y lo mire riéndome de él. Frunció el ceño cabreado y giro el cuchillo dentro de la herida provocándome un grito y que saliera más sangre. -No eres consciente de lo que es que no me digas lo que quiero, que tal esta Camila, cuando te fuiste enfadada de la casa se veía que estaba destrozada. -Dice acercándose a mí y riéndose de mi en mi cara.
-Como se te ocurra tocarle un pelo, juro que te matare de la manera más cruel posible.
-Vaya... Así que te importa... Y que hay de tu hermana Taylor o de esa tal Sofía... Se les ve muy felices de estar ya aquí a salvo, pobres... Se quedarán destrozadas cuando sepan que habéis muerto los dos y casualmente será en un accidente de tráfico donde quedareis totalmente calcinados. -Le di un cabezazo en la nariz haciendo que le sangrara inmediatamente.
-Vete a la puta mierda, hijo de puta, púdrete.
-Está bien, hoy no estás muy receptiva, luego vendré a ver a Chris, a ver si él quiere cooperar. -Dice poniéndose un pañuelo en la nariz. -No querría hacerles nada a ellas, está en tus manos Jauregui, tendré paciencia, esperare a que quieras cooperar mientras tanto me divertiré un poco, pero mi paciencia no durara para siempre y lo mismo mando a un sicario para que las asesine de la manera más cruel que sepa. Solo piénsalo, os dejo descansar.
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El último ocaso {CAMREN} {COMPLETA}
Romance{COMPLETA} Terror es lo único que te queda sentir cuando todo a tu alrededor se desmorona, cuando pasas de escuchar el tráfico matutino cada mañana a escuchar la nada, ni siquiera los pájaros se atreven a cantar, aunque tampoco estoy segura de sí si...