El último ocaso {CAMREN} {COMPLETA}

Capítulo 32

Desperté un poco desorientada, me froté un poco los ojos y cuando tuve la vista clara pude ver que Ally todavía seguía durmiendo y Dinah estaba sentada en una silla vigilando la puerta y al zombie que ahora tenía la boca tapada con un trapo.

-Dios que cansada me siento.- Dije levantándome de la camilla.

-Normal, he calculado que has perdido alrededor de un litro y medio. Te encuentras mejor.- Dice Camila mirándome con una sonrisa para después mirar de nuevo al microscopio.

-Bien solo estoy algo cansada.- Digo acercándome a ella.- Como lo llevas, cuanto tiempo he estado durmiendo.

-Cerca de una hora y media. Iba a despertarte enseguida ya que casi he acabado.

-Y que es lo que has acabado, háblame un poco de ese líquido milagroso amarillo.

-Bueno en realidad ahora es azul. Cuando un zombie te muerde te conviertes en uno de ellos, pero durante el tiempo en donde te está infectado el virus todavía se puede hacer algo y eso es lo que hemos hecho con Ally, le inyecte un tipo de suero que hice con tu sangre, el cual con alguna mejora que le he hecho conseguirá salvar a esa persona durante esos once segundos, después de que su corazón se pare, no servirá para nada.

- Camila eso es... ¡Asombroso! ¡Dios mío tú sabes a la de gente que vamos a poder salvar con esto! - Dije tomándola y girando con ella.

-Si bueno, el problema es que es limitada, solo se puede hacer con tu sangre y con el suero que crearon los científicos, ese de donde han salido estas cosas.

-Oh vaya, al parecer no todo es tan bueno.

-No todo pero la mayoría sí, he estado mirando tu sangre y creo que podría llegar a sintetizarla para conseguir una especie de vacuna que haga que la gente se vuelva inmune como tú, el problema es que tu sangre es inmune desde que naciste, y me temo que conforme se les suministre esa vacuna su propia sangre se hará inmune a la tuya, es decir que con el tiempo es posible que esa vacuna deje de hacerles efecto.

-Oh vaya, pero es un avance. Es lo que el mundo necesita, lo que estaban esperando, ese rayito de luz que necesitan para salir todos juntos a luchar contra estas cosas. Y creo que nos ayudara mucho esa vacuna y sin duda también el suero. - Dije sonriendo y alentándola a continuar con su microscopio, ella me asintió sonriéndome y se giró.

-Solo una cosa más, esa vacuna no la puedo hacer aquí, la máquina que necesito se ha debido de romper con la explosión que hubo.

-¿Pero te puedes llevar los líquidos esos?- Ella se ríe por mi forma de hablar y me asiente.

-Si, pero el problema es que necesitan estar en constante movimiento por eso los tengo girando es esta máquina.

-Bueno, entonces creo que es hora de volver a ver a Taylor. -Me mira extraña y continuo. - Ella está en Groenlandia trabando con gente que intenta resolver este problema mundial, no dudo en que podrá conseguirte un buen laboratorio y todos los juguetitos que quieras. Así que, si has terminado, recoge todo lo que necesites que enseguida nos vamos, no pararemos hasta que lleguemos hasta San Francisco. Salgo un momento a llamar a Sofía y después a Taylor.- Su rostro se endureció levemente, pero se dio la vuelta a continuar con sus cosas después de darme una sonrisa, me cogí la pistola ahora con un cargador nuevo y me salí del laboratorio quedándome en la puerta.

Preferí llamar primero a Taylor y así luego contarle a Sofía lo que me dijera mi hermana. No sonaron más de tres tonos cuando me contestaron al otro lado de teléfono, no pude evitar la sonrisa que me cruzo el rostro y las lágrimas que caían desconsoladas por mi cara.

- ¿Taylor? ¿Eres tú? ¿Hermana? - Dije secándome las lágrimas haciendo poco efecto el gesto.

- ¡¿Lauren?! ¿Oh dios no puede ser, eres tú? Pensaba que te había ocurrido algo y por eso no llamabas.

-Estoy perfectamente Tay, como va todo por ahí.

-Un poco ajetreado, pero nada comparado a lo que tienes que estar viviendo tu. Intentamos encontrar algo, una cura, un medicamento o algo que nos sirva para acabar con esas cosas, pero siempre fallamos en algo.

-Entonces supongo que te encantara saber que nosotros si tenemos algo de eso.

-No te entiendo Lauren.

-Camila ha desarrollado una vacuna que permite curar a las personas a las que acaban de morder.

-¡¿Como?! ¿Eso es maravilloso, eres consciente de las vidas que se podrían salvar?

-Si lo soy Taylor, no sé cómo explicarte el como lo ha hecho solo sé que esa vacuna lleva un compuesto con el que se crearon estas cosas, sangre de un zombie y mi sangre.

- ¿Espera un momento, tu sangre? ¿Por qué tu sangre está en una vacuna?

-Es una historia muy larga que ya te contare, pero el resumen es que soy algo así como inmune, si me muerden no me convierto. Es decir, puedo enfermar y morir si la herida se infecta, pero no me convierto en una cosa de esas.

-No me lo puedo creer, Lauren te aseguro que hoy es el día más feliz de mi vida.

-El mío lo será en cuanto me digas que me mandas un helicóptero a recogerme y a sacarme de este infierno.

-Por supuesto eso no es necesario ni pedirlo, en cuanto te cuelgue mando la orden y en 36 horas hay un helicóptero ahí recogiéndoos, el punto de encuentro será en el aeropuerto de Houston, he mirado un mapa y me contaste que la base militar está muy cerca de ahí, así que no será un problema. ¿Cuántos sois?

- Somos 7 y Kira.

-¿A sobrevivido Kira?, sin duda este día no hace más que mejorar.

-Me alegro, nos vemos en dos días hermana. Te quiero.

-Y yo también Lauren, y ten mucho cuidado.

Colgué y entre de nuevo al laboratorio, Dinah ahora se había dormido y Camila seguía detrás del microscopio.

-He hablado con mi hermana, dice que en 36 horas llega un helicóptero para sacarnos de aquí. Deberías ir recogiendo todo y rápido o sino, no llegaremos a la base antes de las 36 horas.

-De acuerdo no hay problema, empiezo ya, en quince minutos he terminado. ¿Has llamado a Sofía? – Me pregunta mirándome.

-Mierda se me ha olvidado.

-Deberías llamarla y que empiecen a recoger todas las cosas.

-Está bien voy, pero antes voy a despertar a Ally

-No te preocupes por eso, deja que se encargue Dinah, ve a llamar cuanto antes.- Le asentí y salí de nuevo. Sonaron de nuevo los toques, pero nadie contestaba y no fue hasta la tercera llamada que fue cuando alguien contesto.

-¿Hola? ¿Sofi? ¿Eres tú?

-No, soy Chris.

-Ah, pásame a Sofía por favor.

- Lauren...

- Chris no empieces, pásame a Sofía es algo importante lo que tengo que decirle.- Escuche un bufido del otro lado y segundos después hablo Sofía.

-¿Lauren?

-¿Sof, como va todo?

-Bien, esto está tranquilo, no hemos tenido muchos problemas.

-Me alegro, escúchame bien, Camila ha creado algo que nos ayudara a acabar con todos los zombies, en quince minutos saldremos hacia allí, he llamado a Taylor y nos ha mandado un helicóptero que llegará en 36 horas, seguramente no paremos a descansar ya que, sino, no nos dará tiempo a llegar. Y creo que tendremos que vernos directamente en el aeropuerto de Houston, Thomas sabe dónde está.

-WOW, cuanta información de repente, ve un poco más despacio.

-No puedo Sofía, ya te contare todo más tranquilamente, de momento lo que te pido es que empecéis entre todos a recoger todo, no recojáis lo que sea innecesario, solo cosas esenciales.

-Está bien, de acuerdo, pues entonces en unas horas nos vemos.

-Si...- Dije cogiendo aire de nuevo, esta situación me alegraba completamente, pero me tenía estresada no poder llegar a tiempo.