INFERNUM (TWD) [COMPLETA]

Capítulo 23

Mi estúpido cuerpo tembló cuando vi a Rick acercarse a paso acelerado a nuestro coche. Maggie y Eugene intentaban pararle mientras que el resto de la comunidad miraba. Me bajé del coche a la par que Daryl, no sin antes dedicarnos una mirada, y antes de que pudiera si quiera abrir la boca Rick me agarró del brazo y tironeó de mi a un camino que ya conocía.

—¡Rick!, ¡suéltame!—grité molesta intentado soltarme de mi brazo—. ¡Capullo, hablo en serio!, ¡me estás haciendo daño, joder!—

Abrió la puerta de la celda y me empujó al interior, tirándome al suelo.

—¡Deja de comportarte como una cría!, ¡deja de escaparte sin mi consentimiento!—

—¡No eres mi jodido mi padre!—

—¡Estás en MI comunidad, intentado superar una jodida prueba!—

—¡Deja de lado la jodida prueba!, ¿¡enserio todo se trata sobre eso?!—pregunté levantándome del frío suelo y acercándome a él molesta.

—¡Claro que sí!, ¡todo trata sobre la jodida prueba!, ¡Alejandría está con HillTop y con El Reino, pero por más que intento conseguir una alianza con tu comunidad, lo único que haces es demostrarme que no vale la pena!—

—¿¡Qué no vale la pena?!, ¡conseguí que conocieras a la comunidad más poderosa!, ¡conseguí hacer un trato con HillTop para que tu jodida gente se entrenara!, ¡mentí a Negan, arriesgando a mi gente, para no dañar a los tuyos!, ¡salgo a todas las expediciones que puedo!, ¡trabajo día y noche en las actividades de aquí!, ¡ayudé en la escuela!, ¡arreglé la jodida caldera para que esto no saliera volando por los aires!, ¡aguanté comer mierda!, ¡me rebajé hasta ese punto!, ¡cuidé de Judith y Carl cuando tú no estabas!, ¿¡y aun así no he hecho nada?!—

—¡Todo lo que haces causar problemas!, ¡jamás te pedí que cuidarás de mis hijos!, ¡jamás te pedí que confiaras en un extraño!, ¡jamás te pedí que entrenaras a los míos!, ¡jamás te pedí que ayudases en la escuela!, ¡jamás te pedí que arriesgaras tu vida!, ¡jamás te pedí nada!—

Nuestras respiraciones estaban desbocadas, mi corazón palpitaba con fuerza, las marcas de mis uñas se quedarían en mi piel, el nudo de mi garganta cada vez era mayor y las lágrimas cada vez se agolpaban más.

—Tienes razón—dije en un susurro—. Jamás me pediste nada, pero aún así lo hice, porque de verdad quería hacer un trato con vosotros. Al principio era por La Jefa, pero cuando conocí a tu gente, cuando Rosita y Eric se acercaron ami, cuando Carl y Judith me hacen sonreír, cuando Tara me dio un voto de confianza, cuando Daryl y yo nos contamos nuestras vidas, cuando tú y yo estuvimos juntos... En cada maldito momento deseé formar parte de esto, formar parte de vuestra comunidad, deseaba con todas mis fuerzas que Artemisa pudiera venir a ver a Carl, que La Jefa abriera los ojos y viera que hay personas buenas aún en este mundo de mierda—cogí aire mientras sentía mis lágrimas bajar a toda velocidad—. Tan solo quería paz, Rick, solo quería... encajar.—susurré en voz baja.

—Athenea—

—No—lo corté—. Se acabó. Estoy cansada de luchar por algo imposible, cansada de intentar llevarme bien contigo. No me iré, Grimes, no voy a huir, no soy una cobarde. Me quedaré, en otra casa, pero me quedaré. Terminaré mi jodido mes de prueba y ni tú ni nadie lo impedirá, así que deja de joderme para impedirme completar mi misión porque no lo vas a conseguir. Haz como si yo no existiera, yo haré lo mismo contigo, es sencillo, Grimes. Yo soy la fría Athenea, y tu el capullo vejestorio, ¿no?—

Sin darle tiempo a responder salí de la celda, me dirigí a su casa, subí a mi habitación y recogí todo. Cuando miré el reloj vi que habían pasado dos horas. Salí de la habitación tras darle un último vistazo y bajé las escaleras dispuesta a salir de esa jodida casa.