Tú y yo (Suerte #7)

17| Una fiesta problemática

Cap( 2/3)
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Eran las ocho treinta cuando puso un pie en la acera frente a la casa de Raúl Danields. Esta se encontraba en uno de los suburbios más exclusivos de la ciudad. Autos estaba parqueados a ambos lados de la calle. Gente yendo y viniendo por todos lados. Aquella no era una fiesta pequeña, para nada.

Avanzó por el camino de entrada que era amplio y serpenteaba hasta llegar a una enorme casa que bien podía ser considerada un mini mansión. Tres escalones lo separaban del porche delantero conformado por gruesas columnas cilíndricas de concreto. La puerta estaba abierta de par en par y el sonido atronador del Future house escapaba del interior.

Había personas recostados en las columnas charlando. También habían personas a mitad de la puerta y en todos lados a decir verdad. Echó un vistazo sobre su hombro considerando la posibilidad de dar medía vuelta y volver a la residencia, pero no quería parecer un cobarde, así que cuadró los hombros y entró a la casa, siendo absorvido fácilmente por el mar de gente que había dentro. La verdad es que hubiera preferido mil veces qudarse haciendo tarea y luego irse a dormir. Pero ya estaba ahí y no tenía sentido seguir pensando en lo que hubiera querido hacer.

Avanzó esquivando a un par de chicas ebrias que le sonrieron con demasiados diente e intentaron prenderse de sus brazos y seguramente arrasastrarlo a la improvisada pista de baile. Si, no estaba de animos para enrollarse con ninguna chica. Con Sadie le había bastado para para el resto de año. Y de cualquier manera si buscara ligar con alguien, no sería en un fiesta como aquella.

Siguió caminando hasta que logró llegar a un espacio más abierto  en donde no estaba tan concurrido. Parecía ser una sala de juegos enorme. Esta contaba con una enorme ventana que daba a parte del patio trasero y la enorme piscina en donde chicas y chicos reían, charlaban y bebían dentro del agua. Negó con la cabeza y siguió localizando a alguno de sus compañeros de equipo que estaban al otro lado de la habitación en un mesa de billar. Raúl estaba riéndose de algo con una botella de cerveza en la mano y un taco de billar en la otra.

Un poco renuente se acercó porque después de todo había prometido que iría, así que diría hola, aceptaría una cerveza y luego se iría.

—¡Clearwater!— dijo Raúl en cuanto lo vio y eso bastó para que el resto de jugadores giraran en su dirección. —Creí que no vendrías.

—Dije que lo haría ¿no?— chocó puños con él y saludo al los demás.

—¿Una cerveza? — ofreció Vic Liberman. Era una botella sellada y solo por eso aceptó.

Le ofrecieron un taco de billar, pero lo rechazó porque la verdad nunca había sido bueno en ello y tampoco le gustaba. Encambio se recostó contra la pared e hizo lo que no se había permitido hacer con el resto de sus compañeros, charlar. Se dió cuenta de que ellos no eran tan malos como había creído. Algunos de ellos fueron realmente amables, como Axel Hernández, uno de los Safetys. Él También era becado y le confesó que nunca había buscado acercarse porque Sebastian era demasiado cerrado. Bueno, mierda eso lo hizo sentirse un poco idiota, pero le resultaba difícil confiar en los demás porque si las personas más importantes en su vida (sus padres y su hermano) le habían dado la espalda...¿cómo podía confiar en los demás?

Pero las cosas parecían estar mejor ahora, así que bien podía hacer un pequeño esfuerzo y tratar de mejorar la relación que tenía con ellos. No es que fueran a volverse los mejores amigos, para eso ya tenía a Jasper, "Desconocido", Cormack, Athenea y Cody. Pero si podía lograr que las cosas con su equipo dejaran de ser tan tensas. Así que se permitió relajarse aun cuando la música no le gustaba, aun cuando parte de él le pedía a gritos que se mantuviera alerta.