Cap (3/3)
================
Para cuando el lunes llegó, Sebastian estaba más allá de emocionado con la sola idea de volver a ver a Jasper. Era como si fuera un puberto de nuevo, uno que acababa de descubrir lo que significaba tener a alguien especial. Se vistió a toda prisa, tomo sus cosas y corrió fuera de la habitación bajo la divertida mirada de su compañero de cuarto.
Estaba en un estado de emoción que estaba tentado a dar saltitos por el pasillo como una colegiala. Y ni siquiera el hecho de toparse con Cody en las escaleras y recibir un par de burlas evitó que sonriera como bobo al pensar en su gatito y en lo poco que faltaba para verlo de nuevo. Solo tenía que soportar la práctica matutina y sería libre de buscarlo.
—Oye, oye— Cody lo agarró del brazo y lo hizo frenar el paso. — No porque llegues antes al campo terminarás más rápido
—Ya lo sé— hizo una mueca graciosa— pero es que no puedo quedarme quieto.
—Entonces vamos al estacionamiento frontal, Athenea me envió un mensaje para decirme que ella y Jasper acaban de llegar...— no esperó más, salió corriendo directo hacia el estacionamiento —¡Jodido Sebastian, espérame!
Por supuesto que no lo hizo, en cambio corrió más rápido con la anticipación y la espectativa burbujeando en su interior. Escuchaba a Cody corriendo tras y él, gruñendo algo sobre que no todos eran unos jodidos rayos como él. Llegó al estacionamiento en tiempo record y no tardó demasiado en localizar esa cabellera negra. Jasper estaba sentando en el capó del pequeño auto de Athenea. Joder, era simplemente hermoso, vistiendo unos jeans claros, desgastados en los lugares correctos. Una camiseta blanca y una camisa a cuadros azules y rojos por encima. No se detuvó hasta estar frente a él llamando su atención.
—Hola— Jasper le regaló una hermosa sonrisa haciendo que el hoyuelo en su barbilla saltara a la vista.
Fue más de lo que podía soportar, lo tomó por la cintura y lo abrazó como si llevara un largo, largo tiempo sin verlo. Embriagándose con su dulce aroma y la manera en la que encajaba perfectamente entre sus brazos.
—Hola— le susurró de manera tardía frotando su mejilla contra la cabeza de Jas. Si, de eso estaba hablando, ahora se sentía como si estuviera completo. Un sentimiento extraño que no quiso sobreanalizar, se sentía bien y nada más importaba. —Te extrañé.
—Y yo a ti— Jasper se separó ligeramente viéndolo através de sus pestañas, mordisqueándose el labio inferior. Ese chico era pura tentación y ni siquiera parecía ser consciente de ello.
No pudó resistirse más a ese deseo que había tenido secretamente desde que descubrió aquel detalle del chico entre sus brazos. Se inclinó y le depositó un suave beso justo sobre el hoyuelo en su barbilla. Jasper ronroneó en aprobación y Sebastian prácticamente se derritió. Una prueba de que no tendría suficiente del esbelto pelinegro, probablemente nunca.
—Okey, ellos definitivamente se pierden en su mundo— dijo Cody con un borde burlón en su tono.
—Lo sé, son tan lindos juntos que no puedo dejar de preguntarme porque tardaron tanto en empezar a salir.
Sebastian se enderezó un por apenado por haberse olvidado que sus amigos estaban ahí, pero no hizo ni el más mínimo intento por alejarse de Jasper. Es más, lo atrajó un poco más cerca disfrutando del calor de su cuerpo y el cosquilleo que le provocaba cada vez que Jasper lo tocaba.
—No pueden culparme, llevó un día entero sin verlo— se quejó el castaño provocando que su chico soltara una risita.
—Aww, míralo. Quien iba a decir que Sebastian podía llegar a ser todo acaramelado— Athenea parecía genuinamente enternecida— Y sé que están en modo feliz y todo, pero necesito hacer está advetencia para ambos ¿De acuerdo?
ESTÁS LEYENDO
Tú y yo (Suerte #7)
Teen FictionSpin off de la saga suerte, específicamente de "¿Se nos acabo la suerte? (suerte #4)". Porque el amor es impredecible, el amor es complicado y el amor vale la pena. NO copias NO adaptaciones Todos los derechos reservados