Cap (3/3)
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Luego del juego habían ido a comer, Aron, Scott y Lorell los invitaron para celebrar. Comieron tacos porque eso es lo que a los tres jugadores se les antojaba, fue un rato bastante agradable. Rieron, charlaron, incluso en algún momento bailaron haciendo de aquella una tarde maravillosa.
Sin embargo pronto Scott y Aron los dejaron diciendo que ya no estaban para las fiestas interminables. Lo que en realidad era solo una excusa para dejarlos divertirse a solas. Fue ese el momento en que Jasper había pedido permiso para quedarse en casa de Andy e ir desde ahí a la universidad al día siguiente.
—Eso no esta pasando, jovencito— había dicho Aron con ojos entrecerrados.
—Vamos pa, dale un respiro— Athenea se acercó abrazándose a la cintura de Aron, poniéndole ojos de cachorro— yo también me quedaré, veremos películas y comeremos golosinas. Nada fuera de lo común.
—No soy tonto y además apuesto a que Clearwater también se quedará ¿no es así?
Jasper se sonrojó, no es como que hubiera pensado en nada más que una noche con sus amigos, pero las insinuaciones de Aron solo sirvieron para que Jasper recordara lo que estar a solas con su novio significaba. Obviamente sus pensamientos se reflejaron en su rostro volviéndolo rojo. Lo gracioso es que no era el único, Sebastian también lucía de aquella manera.
—Muñequito— dijo Scott abrazándolo por la espalda— creo que Jasper esta bastante grande como para que le demos un poquito de libertad ¿no lo crees?
—Pero...
—Además no estaran solos.
Vio a su rubio padre dudar, pero al final asintió dándole permiso de dormir fuera aquella noche. Claro que no se quedó tranquilo antes de amenazar al corredor: "No te pases de listo con mi niño, lo sabré".
Scott por su parte se acercó a Jasper lo abrazó y le susurró al oido: "asegurense de usar protección". Fue jodidamente bochornoso, pero también le alviviaba saber que tenía la confianza y el apoyo de sus padres.
Pero trató de no pensar demasiado en ello, después de todo se suponía que era una noche de amigos y de cualquier forma, no es como que fuera a girarse hacia su novio y decirle "creo que estoy listo para tener sexo". Sabía que tartamudearía y haría un desastre de si mismo antes de decir la frase completa y peor aun, no quería mostrarle a Sebastian cuan ansioso estaba por experimentar ese lado de su relación. Claro que fue bastante difícil no dejar que se mente se fuera al deriva por completo, con las imagenes de aquella vez en la habitación de la residencia de Sebastian golpeándolo sin misericordía. Solo de recordar esas fuertes manos acariciándolo, los labios pegados a su barbilla y cuello...se estremeció y cerró un momento los ojos para mantenerse bajo control. No quería ir paseando por ahí con un problema entre sus piernas.
Su mente tuvo un poco de alivio cuando Lorell sugirió entrar a un Karaoke. Nunca había estado en uno de esos, pero si eso le daba la oportunidad de escuchar a Sebastian cantando de nuevo, pues estaba abordo. Fue realmente divertido, aun cuando todos (a excepción de su novio) eran pésimos cantando. Le dolía el estómago de tanto reirse mientras estaba tendido en un sofá con uno de los brazos de Sebastian sobre sus hombros y Athenea del otro lado, mientras escuchaban a Andy, Cody y Lorell, destrozar una canción de Maroon5.
En algún momento su morena amiga se puso de pie para acompañar a los otros tres, dejándolos a solas en el sofá. Eso lo puso nervioso y bastante ansioso, porque su cuerpo empezó a ser muy consciente de la cercanía de Sebastian, del calor de su cuerpo y lo bien que se sentía.
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Tú y yo (Suerte #7)
Roman pour AdolescentsSpin off de la saga suerte, específicamente de "¿Se nos acabo la suerte? (suerte #4)". Porque el amor es impredecible, el amor es complicado y el amor vale la pena. NO copias NO adaptaciones Todos los derechos reservados