Lo despertó una piedrita punzándole en el costado; podía notar como ya estaba amaneciendo por la claridad que se introducía en la cueva, se sentó y estrujándose los ojos pudo ver a las dos hermanas durmiendo en dos lados totalmente opuestos del lugar. Entrecerró los ojos, extrañado, pero decidió que no las conocía lo suficiente como para saber si eso era algo normal entre ellas o no.
Tomó la pequeña cantimplora que tenía guardada en su mochila y bebió agua hasta dejarla totalmente vacía, tomó uno de los cuchillos que guardaba y se lo escondió dentro de la bota, ocultándolo con el pantalón para levantarse y limpiarse el polvo que se había adherido a su cuerpo durante la noche.
Se dispuso a ir hacia el bosque con apenas unos rayos alumbrando su camino.
Fue directamente al río para llenar la cantimplora vacía, deteniéndose a admirar al otro lado por un momento, pensativo.
Se volvió para caminar de regreso a la cueva cuando sintió que algo lo seguía, se desvió un poco entre los árboles tratando de evadir a quien fuera su perseguidor, pero cada vez lo sentía más cerca, apresuró un poco más el paso cuando chocó contra una rama provocando que rodara hasta el árbol más cercano, sacó rápidamente el cuchillo de la bota, armándose para lo que viniera.
El silencio lo rodeó y de repente entre los arbustos salió un conejo brincando, provocando un leve respingo en el chico.
Se río de sí mismo, levantándose decidido a volver a la cueva y ver si las hermanas por fin estaban despiertas. Lo que no notó es que, por detrás de él, alguien le tapó la boca, alguien con ojos plateados.
— ¿Asustado? —Dijo una voz suave, como si estuviera susurrando.
En ese momento, soltó el agarre que le tenía a Thomas y se empezó a reír a carcajadas delante de él.
—Maldita sea James, casi me matas del susto.
—Esa era la idea, yo no recuerdo haberte enseñado a correr, rodar por el piso, y ser una presa tan fácil.
—Pensé que era alguien más, estaba tratando de desviarlos de la cueva.
— ¿Las encontraste?
—Si; pero no confían en mi todavía, por lo menos no la mayor. Y menos van a confiar en mí si descubren que tengo tratos contigo.
—Deberías haber anunciado tu posición hace cuatro días, no es mi culpa que no sepas hacer tu trabajo y tenga que venir yo a chequear que estás haciendo todo correctamente.
—Desde hace cuatro días estoy con ellas, no había podido encontrar un momento a solas, al menos una siempre está a mi lado, acabo de enviar el mensaje de reporte en el río.
—Muy tarde— Dijo el chico de ojos plateados negando con la cabeza en forma burlona.
—Basta ya, deja tus bromas, vuelve a la base que yo tengo que volver con ellas.
—Sabes cuál es tu misión Thomas, no te desvíes.
El chico puso los ojos en blanco y se dispuso a darle la espalda a su acompañante, se volvió para decirle una última cosa, un par de insultos quizás, pero en ese momento ya el ojos plateado no estaba.
Miro a su alrededor buscando alguna señal de este, pero era como si se lo hubiese tragado la tierra, se extrañó un poco, pero siguió su camino a la cueva.
Las hermanas aun seguían dormidas cuando este regresó de su pequeño paseo, inmediatamente se puso a pelar una ardilla esperando a que despertaran.
--
Ultima edición: 09 de Agosto del 2021
![](https://img.wattpad.com/cover/205938502-288-k573273.jpg)
ESTÁS LEYENDO
EL ALMA - Saga: Impura Trinidad - Libro 1 (Completa ✔)
Fantasi-Esta historia esta siendo editada- La tierra ha sido controlado por seres nobles y amables. Seres que quieren mejorar la vida con tecnología mejorada y cultura superior, pero para ello lo primero que tienen que hacer es eliminar a la raza humana...