CAPITULO 68:

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NOTA INICIAL: PERDÓN QUE PONGA UNA CANCIÓN ASÍ EN MULTIMEDIA PARA ESTA HISTORIA, PERO ES QUE QUIERO QUE VEAN LA LETRA. ES PRECIOSA.


--¿Qué pasa?—hice que me mirara.

— ¿Recuerdas lo que me contaste sobre Julieta? ¿Lo que pasó hace unos años?—

Imposible de olvidar.

—Claro que lo recuerdo. Vivo con eso grabado a fuego en mi cabeza. Si no hubiese sido por Magdalena...—puso su mano en mis labios.

—No Charles. Tengo una teoría y estoy casi segura de que ella no iba a salvarla—

¿Qué? ¿Cómo?

Me crucé de brazos.

Recordé que hace mucho tambien ella había pensado un poco lo mismo y tuvimos problemas con el ama de llaves. ¿Por qué seguía empeñada en ello?

— ¿Por qué no lo haría? Es familia, Marian—ella negó.

—Dos veces ha pasado y dos veces ha hecho de la vista gorda. Julieta va a cruzar la calle, viene una motocicleta o un auto y Magdalena no hace nada por evitar que la atropellen—

Ahora si había captado mi atención.

— ¿Hace cuánto está pasando esto?—

¿Y porque Julieta no me había dicho nada?

Evalué las señales, recordando el día en que Marian no pudo llevarla al colegio porque estaba incapacitada.


FLASHBACK:

— ¡Papi! ¿De verdad ella me tiene que llevar?—se pegó a mis piernas—no me gusta Magdalena. ¿Por qué no me llevas tú?—

—Estaré ocupado. El ama de llaves te llevará de forma diligente, y cuando Marian se recupere te lleva ella—negó.

—Pero es que ella no me gusta. Anda muuuuy lentoooooo. Protesta por todo, no me deja quedarme mirando los peces en la tienda de animales. Marian sí. Y tu tambien. Llevameeeee. Por fis—unió las manos.

—No Julieta. Otro día será. Hoy no—besé su frente—y termina de prepararte. Llegarás tarde—cabizbaja, se fue a continuar preparando para el colegio.

FIN DEL FLASHBACK


¿Sería posible que el motivo no hubiese sido porque andaba lento el ama de llaves? Parecía verdaderamente desesperada, y en ese momento lo obvié.

—Hoy fue la última vez. Julieta lo hizo adrede para ver si era cierto lo que yo pensaba. Magdalena casi hasta se molestó porque el conductor se detuvo—no podía ser verdad.

¿Traición de la propia familia?

—Esa es una acusación muy grave. Me estás diciendo que podría pasar que la tía de mi esposa, quiera hacerle daño a Julieta. Alguien de la misma familia—puso una mano en mi brazo, acariciándome con el pulgar.

—Julieta tiene un secreto y no me lo quiere decir. Cada que le hablo de lo ocurrido ese día, se molesta enormemente. Y más si meto a Magdalena en ello—

Pasaba de ser una acusación a tener mucho sentido. Pero seguía teniendo muchas lagunas y dudas.

— ¿Y si solo es un malentendido?—sus hombros decayeron.

PERFECT L1 DE LA BILOGÍA: SIN ESPERARTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora