The President's Son.

💐 Epílogo 💐

Coloque la tiara de flores en su cabeza, acaricié su cabello y le sonreí a través del espejo.

—Aún no entiendo, como pudieron terminar juntos — miré a YoonJi, que estaba sentada a un lado, comiendo helado que había en mi nevera.

—Yo tampoco, sigue siendo un misterio para mí y para todos — comenté.

—Él y yo ya teníamos algo desde hace mucho...solo que era muy idiota para aceptarlo — informó. Fruncí el ceño y deje de acariciar su cabello rizado.

—Entonces...¿Porque se insultaba cada vez que se veían? No tiene sentido — YoonJi asintió.

—Estabamos en una disputa...yo quería hacer publica nuestra relación, y él no quería...parecía un adolescente tratando de ocultar su relación de sus padres — ella se levantó, su vestido blanco fue levantado un poco, gracias a que lo arrastraba y no podía caminar adecuadamente.

—Es un idiota — dijo YoonJi.

Me acerqué a ella y le quite el bote de helado, el cual, era el mismo que había en mi nevera.

—¡Yah! Devuelvemelo, yo lo tenía — exclamó.

—Exacto, lo tenías...además este helado estaba en MI nevera — defendí.

—Eres una envidiosa — me señaló.

—Me vale — le mostré la lengua y deje el bote de helado en el buró que estaba a lado de mi cama.

—Pr cierto, ¿En dónde están tus hijos? — pregunto Jisoo.

—Oh, bueno pues, Hyuho está con su abuelo, TaeHyung está con su abuela y MinHwa está con JungKook — dije mirando por la ventana, los mencionados tenían en sus brazos a mis bebés de un mes.

—¿Cómo puedes soportarlos? — miré mal a YoonJi.

—Eish, tonta...ellos son unos angelitos cuando duermen, no dan nada de molestias, además son muy callados, solo cuando tienen hambre — señalé mis pechos.

—Oh.

Miré una última vez a Jisoo, quien hoy era su día...hoy iba a contraer matrimonio con SeokJin, sí, con el idiota que siempre peleaba e insultaba cuando yo necesitaba mis masajes y ejercicios.

—¿Esta lista? — me gire hacia la puerta, en dónde estaba JungKook, él vestía un smoking negro, la camisa abajo del saco era blanca y el moño de su cuello era negro, pero aquel Smoking no lograba cubrir en su totalidad los tatuajes que tenía en su cuello. Todo un galán.

—Sí...¿Te toco llevarla tú? — pregunté y JungKook hizo una pequeña mueca que solo logré ver yo.

—Sí, ya que él te entrego a ti cuando ibas a casarte conmigo — tomé en brazos a MinHwa, quien estaba chupando su dedo.

—Que tiempos aquellos — comenté y él sonrió.

—Sí...¿Sabés? Necesitamos unas vacaciones, tú y yo, nada más — lo miré con duda.

—¿Y los niños? No los podemos llevar — recordé.

—Se los dejaríamos a mis padres, ellos estaran muy felices de cuidarlos, con eso de que no salen de la casa todo el día, solo para estar con ellos...no creo que haya problema — se acercó y tomó mi cintura, se agachó un poco y me besó.

—Estém...¿Ya me vas a entregar? ¿O habrá otra sesión de besos y palabras diabéticas? — reímos ante las palabras de Jisoo.

—Cuando estés unida con SeokJin, te repetiré las mismas palabras — le dije a Jisoo. Quien solo rodó los ojos. —Pero bueno...nos vemos abajo, vámonos YoonJi, a ver si hoy encuentras a alguien que te quite lo amargada — comenté mientras la tomaba del brazo y la arrastraba hasta la parte de abajo.