🌷 Trece 🌷

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—¡Baja esa arma! —Agradecí que JungKook llegará antes de que la loca hiciera algo.

—Bien... —Se agachó lentamente y dejo el arma en el suelo, y la pateó lejos de ella.

—Así que te manda Kunpimook, ¿Eh? —Ella sólo me miraba a mí.

—Sí...tienes algo que le pertenece, y lo quiere recuperar. —Él frunció el ceño.

—Yo no tengo nada que le pertenezca, que yo recuerde.

—Ella, él la quiere a ella...anda linda, cuéntale tu aventura con Kunpimook. —JungKook me miró a mí.

—Yo nunca tuve nada que ver con él... él sólo iba a la cafetería en donde yo trabajaba, él cada vez que iba me llevaba flores y varios regalos, los cuales siempre me encargaba de regresarselos o tirarlos a la basura; un día empezó a comportarse extraño, él quería que yo fuera su novia...a lo cual no dude ni un minuto en rechazarlo, y así siempre era, hasta que un día quiso besarme a la fuerza, entre Rosé y yo lo sacamos de la cafetería y le advertimos que jamás volviera a pisar ese lugar, o llamaría a la policía. —Terminé de relatar.

—Él está encaprichado con Lisa, tiene fotos de ella por toda su habitación... créeme, está totalmente loco por ti. —JungKook se acercó a ella, aún apuntandola con su pistola.

Con la parte trasera de la pistola, le golpeó la nuca, dejándola desmayada en el piso. La tomó de los pies y empezó a arrastrarla hacia adentro de la cabaña.

—Vas a entrar, ¿O qué? —El tono brusco y frío que utilizó hizo que un escalofrío recorriera mi espalda.

Asentí y caminé hasta la cabaña y volví a entrar. Él ni siquiera me miró, camino hasta el sótano y trajo consigo unas cuerdas y cinta adhesiva. Se agachó y le amarro los pies y las muñecas, y al final, le colocó cinta adhesiva en la boca.

Se levantó y volvió a guardar la cinta adhesiva. Camino hasta a mí y me miró, una mirada muy frívola.

—¿Porqué nunca me dijiste que tenías una aventura con Kunpimook? —Abrí los ojos de sorpresa, ¿Acaso no escucho lo que dije?

—Yo no... —Él tomó mi mandíbula con una mano, haciéndome callar.

—Pensé que ya estaba todo mejor entre nosotros...pero, ¿Tendré que volverte a chantajear con Rosé? —Mi respiración se cortó.

Lo empuje y le solté una bofetada. Rápidamente me di cuenta de mi error, y cubrí mi boca con mis manos.

—Oh, dios... JungKook yo...—Él tomó mi cabello con su mano, lastimandome.

—¡Pensé que me habías aceptado! —Abrio la puerta de nuestra habitación, me arrojo a la cama, quise levantarme pero me empujó volviéndome a acostar.

—JungKook por favor...te juro que nunca tuve nada que ver con él...lo juro. —Solloce

—No creo que tus piernas digan lo mismo. —Se subió arriba de mí, empezó a tocar mis muslos, pero no lo hacía con cuidado... él me estaba lastimado.

—Por favor JungKook, detente...me estás lastimado. —Él hacía caso omiso a mis súplicas. —¡Detente JungKook! —Flexione una de mis piernas y lo empujé, su espalda se estrelló contra la pared e hizo una mueca de dolor, me hice hacia atrás y me hice ovillo en el respaldar de la cama.

—Pensé que estábamos bien... pensé que por fin alguien me amaría...—Susurro y su espalda se deslizó por la pared hasta llegar al piso, en dónde se quedó sentado, mirando a la nada.

—Y así era...no entiendo porque le creíste a ella, no puedo creerlo. —Sollocé.

Esto no está funcionando.

No lo está.

—LaOmmaChida❤️

The President's Son.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora