🌷 Diecinueve 🌷

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Desperté de golpe, mi cuello dolía y mis piernas que estaban dobladas en el piso también, miré a mi alrededor, me dí cuenta en la posición en la que estaba.

Estaba sentada en el suelo, mi cabeza estaba recargada en la orilla de mi cama, a la altura de mis almohadas.

Todo fue un sueño, mi supuesto embarazo, el golpe que me dió JungKook y mi gran valor al pedirle el divorcio a él, pero eso solo quedaría ahí...en mis sueños. Coloque una mano en mi cuello, gracias a la posición en la que estaba me dolía y sin contar lo adormecidas que estaban mis piernas.

Mis párpados se sentían pesados gracias a el llanto que había tenido, y que sin querer, me quedé sumamente dormida.
La puerta de mi habitación fue abierta, me sorprendí por verlo aquí, su camisa blanca de manga larga, estaba desabrochada de los cuatro botones de arriba, dejando ver parte de su pecho.

— ¿S-Sucede algo? — Agaché la cabeza, incapaz de mirarlo, me lo había dejado lo suficientemente claro. Nunca me dejara libre.

— Lisa... — Me sorprendí al escuchar como su voz salía en un jadeo. — Te necesito. — Término.

Lo miré y parpadee algunas veces antes de que él me levantará y me sentará en la cama, él se sentó a mi lado y me besó sin muchos rodeos, mi mente aún estaba de viaje; jamás lo había visto así de necesitado. Para ser honesta, también extrañaba su tacto, y el roce de mi piel con la suya, sus caricias que me hacían llegar a las nubes y al universo entero.

Le correspondí el beso, levanté mis brazos y los pase por su cuello, mis manos se dirigieron hacia su cabello para meterlo entre sus hebras.
En cambio él, posó sus dos manos en mi cadera, la apretó hacia él. Poco a poco fue dejándome en la cama recostada completamente, sus besos bajaron hasta mi cuello, cerré mis ojos y disfrute de aquella increíble sensación.

Levantó mi camisa y la tiró al suelo de la habitación, bajo de mi cuello hasta mis pechos en dónde los masajeo, acarició e hizo chupones, haciéndome arquear mi espalda de placer.
Beso mi abdomen y sus manos fueron a la orilla de mi short y bragas, bajandolas lentamente por mis piernas.

— No sabes cuánto te deseo. — Su voz ronca me hizo jadear.

— Te extrañe mucho, JungKook. — Él sonrió y se dirigió a mi, para volverme a besar con mucha desesperación.

Se separó de mi y termino por de desabrochar los últimos botones que tenía la camiseta, se la quitó sin dejar de mirar mi cuerpo, quitó su cinturón y bajo sus pantalones, quedándose en boxers negros.

— Mi turno. — Mi espalda se alejó de la cómoda cama para levantarme, y sentar a JungKook en la cama, con mis manos lo empujé para que quedara completamente acostado. Mis manos acariciaron desde su pecho, hasta su estómago, mis dedos se deslizaron lentamente hasta la orilla de su bóxer.

Al bajarlo, una gran erección se hizo presente, tomé su miembro con mi mano, y empecé a bombear lentamente de arriba hacia abajo, escuché como soltaba una maldición por lo bajo, lo que hizo que sonriera.

Me incliné un poco y besé la cabeza de su miembro, él mordió su labio inferior con fuerza, estaba peor que yo. Así que sin dudarlo más, pase mi lengua por toda su longitud, él soltó un suspiro pesado. Metí su miembro a mi boca y con mi mano empecé a bombearla, su miembro se puso duro y él soltó un gemido.

Se levantó y me separó de su miembro, al momento que me levantaba y él también.

— Lisa...¿En verdad no me amas? — Su pregunta me dislocó un poco. Su semblante parecía triste.

— JungKook...la verdad, es que me gustas, y si dije aquello fue porque estaba cabreada, muy cabreada. — Él me sonrió y yo también.

— Te amo Lisa. — Posó sus manos en mi cintura.

— También yo, Jeon. — Le sonreí.






— ¡Lisa despierta! — Abrí mis ojos.

Oh, mierda... sólo fue un sueño.

—LaOmmaChida❤️

The President's Son.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora