The President's Son.

🌷 Cuarenta y cinco 🌷 (Final)

—Listo, ven...es hora de irnos — tomé mi maleta, y a MinHwa, que había estado acostada en la cama, JungKook tenía a Hyuho, y SeokJin cargaba a TaeHyung (el bebé, no el real).

Había pasado una semana internada en el hospital, necesitaba recuperarme de la cesárea, y mis bebés necesitaban estar en observación por si algo salía mal de repente. Pero todo estaba en orden con ellos, yo logré recuperarme rápidamente, aunque aún duele para ir al baño.

—¿Ya tienes la maleta de MinHwa, Hyuho, y TaeHyung? — pregunté.

—Las subí al auto desde hace rato, vámonos ya — asentí, aferre bien el cuerpecito de MinHwa al mío y salimos de la habitación.

—Hasta luego — me despedí de la enfermera que estaba en recepción.

—Cuidate bien, y a los hermosos bebés — asentí con una sonrisa.

Salimos del hospital y la camioneta negra muy conocida para mí, estaba parada enfrente del hospital.

—Es un placer volver a verla, señorita — Jackson hizo una reverencia.

—Lo mismo digo — conteste amable. —Subire primero, aún no puedo estar tanto tiempo parada — JungKook asintió, y con una mano me ayudó a subirme.

SeokJin subió en la parte de enfrente, a lado de Jackson y JungKook a mi lado. La camioneta arranco con destino a casa...nuestra casa.

JungKook con la mano libre que tenía, tomó la mía y me sonrió.

—Ahora somos una familia...estoy muy feliz de que te hayas quedado conmigo y que me hayas dado unos hijos preciosos — sorbí mi nariz, sus palabras habían salido muy melancólicas.

—Estoy agradecida de que hayas sido tú el que me secuestrara — él rió.

La camioneta siguió su rumbo, hasta que finalmente, llegamos a casa. JungKook bajo y me ayudó a bajarme con mucho cuidado.

—JungKookie... — giré mi cabeza y reí ante como lo había llamado SeokJin, quien aún estaba en la camioneta, pero con la puerta abierta.

—¿Qué quieres? — contesto molesto.

—Ayudame a bajar, como lo hiciste con Lisa — extendió su mano, dramáticamente y sonrió.

—Estas idiota — contesto riéndose, SeokJin solía ser muy bromista.

—Recuerda que tengo a un hijo tuyo en brazos, podría caerme — volvió a dramatizar.

—Ni porque eres mayor que yo, maduras — se acercó a él, y con una mano lo ayudo a bajar, él actuó como toda una dama.

—Gracias JungKookie, ahora ve a limpiar mi baño — lo dijo aún en su papel de mujer elegante y fina.

Ya no pude más y solté una carcajada.

—Imbécil — respondió.

—Recuerda que tengo a uno de tus...

—¡Cuando no lo tengas te voy a golpear! — grito, ya que había caminado rápido, dejándonos atrás.

—Oye Lisa — lo miré.

—¿Qué sucede? — pregunté.

—¿Me prestarás a tu hijo por un lapso de tiempo? Digo, en lo que se le olvida que debe golpearme — reí y negué.

Caminamos por el jardín, hasta llegar a la puerta de la entrada, SeokJin abrió la puerta amablemente, le sonreí y entre.

"Bienvenida, Lisa"