🌷 Treinta y seis 🌷

1.9K 174 56
                                    

Si me dieran a escoger entre, golpearlo con un sartén o golpearlo con un bate de béisbol hasta cansarme. Escogería ambas.

—No entiendo — hablé, rompí aquel silencio incómodo.

—¿Qué no entiendes, linda? — pregunto sonriente, en ese momento quise tirarle todos sus perfectos dientes y mandarlo al demonio.

—Como un hombre con tanta belleza, puede hacer idioteces en menos de un minuto — señalé.

—Yah, Lisa no te enojes, además quiero que mis hijos me conozcan como un hombre valiente que se dejó hacer todo esto — señaló sus brazos y cuello.

—Lo primero que dirán será, "que padre tan idiota tengo" — dije.

—Eish — me miró ofendido y se levantó del sofá. — Ya me voy — dió dos pasos hacia la puerta, hasta que hable.

—Pero antes...quiero que me muestres como se mueven esos tatuajes al tomarme — mordí mi labio inferior.

Él se giró y mostró una cara de confusión. —¿Qué? — se acercó a mí. —¿Primero me ofendes y después quieres una seción de sexo? — río con ironía. —Eres bipolar... — se giró y prendió marcha hacia las escaleras, y grito. —Olvidate del sexo — dijo sin girar a mirarme.

Yo simplemente sonreí, tan solo con unas palabras mágicas, haría que el regresara tan rápido como se fue, y me diera lo que pido.

—De acuerdo... iré a ver si alguien de por ahí quiere satisfacer las necesidades de una mujer embarazada — hablé fuerte y claro. Sus pasos se detuvieron, y pareció pensarlo.

Sonreí, y sin muchos rodeos me levanté del sofá y a pasos lentos pero apresurados, caminé hacia la puerta.

—Llegare más tarde — avisé.

Pero de un momento a otro, mis piernas ya no estaban sosteniendo mi cuerpo, y una cabeza estaba a mi costado mientras era cargada al estilo nupcial.

—Eres una chantajista — habló y yo sonreí.

—Aprendí del mejor — él sin poder ocultar su sonrisa, la dejo esparcirse en sus labios.

Subió conmigo las escaleras, hasta llegar a nuestra habitación. Me acostó con delicadeza en la cama y se quedó arriba de mí, algo mal acomodado gracias a mi panza.

—¿Sabés? Sigues siendo muy hermosa, como la primera vez que te ví — quitó un mechón de cabello de mi rostro, mientras que yo sonreía como adolescente a punto de hacerlo con mi novio.

—Y tú sigues siendo muy lento, igual que la primera vez — él río y se acercó hasta juntar sus labios con los míos.

El beso poco a poco, fue subiendo de intensidad, hasta el punto en dónde él comenzó a quitar mi pantalón y mis bragas, junto con mi camisa y sostén, dejándome totalmente desnuda y con una gran panza al aire.

Él bajo sus besos de mis labios, a mi cuello, beso y mordisqueo, bajo hasta mi panza en dónde dejo algunos besos, haciéndome soltar una risita.

—Bien pequeños...mami y Papi tendrán acción, no molesten — reí con intensidad, y él igual.

Él beso una última vez mis labios y se levantó para poder quitarse la ropa, claro...todo bajo a mi vista.

Al terminar de quitarse la camiseta, pude ver todo su torso lleno de tatuajes, lo único que hice fue darme un poco de aire con mi mano, él sonrió por eso y yo le devolví la sonrisa.

—Son tan excitantes, ¿No crees? — comento él, yo con cuidado me levanté y lo jale hacia mí para atrapar sus labios con los míos.

Acaricié su torso desnudo, baje mi mano hasta llegar a la orilla del inicio de su bóxer. Mordí mi labio inferior.

—No entiendo cómo estás tan malditamente caliente, estando embarazada — rió y yo no le preste atención.

Metí una mano adentro de su bóxer y sentí su duro miembro, el cual no dude en agarrarlo y bombearlo despacio de arriba hacia abajo. Él solto un suspiro y echo la cabeza hacia atrás.

—Joder — me miró mientras mordía su labio inferior con fuerza. —B-Bien, suficiente, ven aquí — me hizo soltar su miembro y me guío hasta sentarme en la orilla de la cama, hizo que levantará mis piernas, mis pies tocaban la orilla de la cama, me sostenia por mis codos.

Él sonrió y se hincó, me dió una última vista, antes de tocar mi clítoris con su dedo, lo acarició y solté un suspiro.

Él empezó a masajearlos en círculos, hasta que empezaba a querer que parara, estaba demasiado excitada, eche mi cabeza hacia atrás y deje salir varios gemidos agudos, e incluso malas palabras.

Y justo cuando pensé que no podría sentir más excitación, su lengua entro en acción en mi parte íntima.

—¡Mierda! — grité. —¡Maldita sea, JungKook! — acaricié mis pechos, los cuales empezaban a tener un pequeño cosquilleo, debido a la gran excitación que estaba sintiendo. —¡Ahh~ ahh~ JungKook~! — grité, mi espalda se arqueó sin problema alguno.

JungKook excluyó su lengua, y su dedo dejo mi clítoris, para empezar a dilatarme con el. Un dedo, y después otro, hasta que tres dedos fueron puestos dentro de mí.

—J-JungKook~ te~ necesito adentro~ ahh~ — solté un gemido ahogado, mordí mi labio inferior.

—Yo igual, ¿Estás lista? — sacó sus dedos y se levantó. Asentí con mucha desesperación.

Él sonrió y tomó su miembro y lo dirigió a mi entrada, hasta que pude sentir como se deslizaba adentro de mí.

—¡Ahh~! — grité al sentirlo dar una estocada bruscamente.

—¿Te lastimé? — pregunto preocupado.

—No, s-sólo me pillaste con la guardia baja... continúa — él asintió y continuó con lo que hacía.

Sus estocadas empezaron a ser lentas, pero después, las aumento.

—Demonios~ demonios Jeon~ — gemí con mi mandíbula apretada.

—Vamos Linda, córrete sobre mi polla~ — ordenó entre gemidos.

Sus manos, ahora con tatuajes, se aferraban a mi cintura, jalandola para hacer más y más profundas las estocadas. Sentía que estaba en el cielo, no, en el cielo no...en el paraíso.

—¡Mierda~! ¡Más rápido, Jeon! — grité cegada por la excitación.

Él aumento la velocidad, y entonces el gran nudo que sentía en mi vientre, fue desecho al mismo tiempo que una fuerte corriente excitación me recorrió por toda mi espalda, y para finalizar, me corrí sobre la polla de JungKook, como había pedido.

Él siguió dando las estacadas rápidas, hasta que se vino dentro de mí, se dejó caer rendido a mi lado, claro, antes de haberse salido de mi con mucho cuidado.

—Jeon...tus tatuajes son lo más excitante en medio de un buen sexo — sonreí con cansancio.

—Y tus gemidos son los mejores — finalizó.

—Te amo Jeon

—Yo te amo más, Monoban.


—LaOmmaChida❤️

The President's Son.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora