𝔸𝕃 ℂℝ𝕌ℤ𝔸ℝ 𝕃𝔸 ℙ𝕌𝔼ℝ𝕋𝔸 ❦ 𝕂𝕆𝕆𝕂𝕄𝕀ℕ

ℂℍ𝔸ℙ𝕋𝔼ℝ 𝔽𝕆ℝ𝕋𝕐 𝔼𝕀𝔾ℍ𝕋: 𝕊ℙ𝔼ℂ𝕀𝔸𝕃 ℕ𝕀ℕ𝔼

Trece años antes.

—¿Por qué no tienes tele? —le pregunto.

Ya llevo con ella muchos días. Es muy agradable y me gusta estar aquí, pero echo de menos ver la tele. Aunque no tanto como a Jungkookie y a Hoseok.

—No tengo tele porque la gente depende cada vez más de la tecnología y eso ha hecho que se vuelva vaga —responde EunJi.

No la entiendo, pero finjo hacerlo. Me encanta estar en su casa, y no quiero decir nada que le haga cambiar de idea y me lleve con papá. Todavía no estoy listo para volver.

—MinHee, ¿recuerdas que hace unos días te dije que tenía que hablar contigo sobre una cosa muy importante?

La verdad es que no lo recuerdo, pero asiento. EunJi mueve su silla y se pone junto a mí en la mesa.

—Quiero que me prestes mucha atención, ¿de acuerdo? Esto es muy importante.

Asiento otra vez. Espero que no me diga que va a llevarme a casa. No estoy listo para ir a casa. Echo de menos a Jungkookie y a Hoseok, pero no tengo ganas de volver a casa con papá.

—¿Sabes qué es la adopción? —me pregunta.

Niego con la cabeza porque es la primera vez que oigo esa palabra.

—La adopción es cuando alguien quiere tanto a un niño que desea que sea su hijo. Así que lo adopta para convertirse en su papá o su mamá. —Me aprieta la mano y añade—: Yo te quiero tanto que voy a adoptarte para que seas mi hijo.

Le sonrío, pero la verdad es que no la entiendo.

—¿Vas a venir a vivir conmigo y con papá?

Niega con la cabeza y me aclara:

—No, cariño. Tu padre te quiere muchísimo, pero no puede seguir encargándose de ti. Ahora necesita que yo cuide de ti porque quiere que seas feliz. De modo que, en lugar de vivir con tu papá, vivirás conmigo y yo seré tu mamá.

Me entran ganas de llorar, pero no sé por qué. EunJi me cae muy bien, pero también quiero a papá. Me gusta la casa de EunJi, y cómo cocina y mi habitación. Quiero quedarme aquí, pero no puedo sonreír porque me duele la tripa. Me ha empezado a doler cuando ha dicho que mi papá no puede seguir encargándose de mí. ¿Se habrá enfadado conmigo? Decido no preguntárselo. Me da miedo que ella piense que quiero seguir viviendo con papá y que me lleve de vuelta con él. Lo quiero mucho, pero me aterroriza volver a vivir con él.

—¿Te hace ilusión que vaya a adoptarte? ¿Quieres vivir conmigo? —me pregunta.

Quiero vivir con ella, pero estoy triste porque tardamos muchos minutos y muchas horas en llegar hasta aquí. Eso quiere decir que estoy muy, muy lejos de Jungookie y de Hoseok.

—¿Y mis amigos? ¿Podré volver a verlos? —le respondo yo.

EunJi ladea la cabeza, me sonríe y me retira el pelo de la cara.

—Cariño, vas a hacer muchos amigos nuevos.

Sonrío a EunJi, pero sigue doliéndome la tripa. No quiero hacer nuevos amigos. Quiero a Jungookie y a Hoseok. Los echo de menos. Noto que me arden los ojos e intento no ponerme a llorar. No quiero que EunJi piense que no me alegra que me adopte. EunJi me abraza y me dice:

—Cariño, no te preocupes. Algún día volverás a ver a tus amigos. Pero ahora no podemos regresar allí, así que haremos nuevos amigos aquí, ¿de acuerdo?