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Ya era Lunes, y luego de ignorar a Corbyn por estos últimos 3 días me di cuenta que lo único que queda por hacer es terminar todo con el.
    Llega la parte más difícil, la parte en la que tengo que olvidar todo lo que viví con el, la parte en la que tengo que hacerme la que nunca me importo nuestra extraña relación, la parte en la cual tengo que hacerme a un lado de su vida.

Caminaba por los pasillos nerviosa, no sabía cuando iba a encontrarme con el rubio, ni tampoco sabía que iba a decirle cuando nos veamos.
Para mi suerte, me encontré con Hanna y Destiny esperándome en mi casillero.

—¿Por que no nos has contado?— dicen a la vez.
—Lo siento, no sabía como hacerlo y prefería guardarlo para mi— abro mi casillero y agarro mis libros.
—Amber, somos tus amigas, nos puedes contar todo lo que tu quieras— dice Destiny.
—Olvídenlo chicas, ya se termino— las miro.
—¿Que pasó?— esta vez habla Hanna.
—No le importo como yo creí que lo hacía— hago una mueca y cierro mi casillero.
—Siempre dije que es un idiota— dice Des y me rio de su comentario.
—Créeme que lo es— empezamos a caminar hacia nuestra primera clase del día.

(...)

La última clase del día estaba por terminar. No vi a Corbyn en todo el día y eso me aliviaba un poco.

—Quiero que para la próxima clase traigan su escultura terminada. Adiós chicos, hasta el lunes— dice la profesora y la campana empieza a sonar indicando que las horas de clase se habían terminado. Me levanté sin apuro, hoy Louis tenía entrenamiento así que yo me tenía que volver sola. El salón se vació muy rápido y me encanta quedarme un rato aquí sola en silencio, es muy placentero.

—¿Me vas a dejar de ignorar?— siento su voz detrás de mi y me quedo helada en el lugar. ¿Por qué ahora?
Reacciono y hablo No te ignoro, Corbyn— termino de guardar mis cosas.
—Si lo haces— siento como su voz se va acercando hacia mi.
—Me tengo que ir— digo y me doy vuelta para irme pero me choco con su gran cuerpo.
—No te irás hasta que hablemos— dice y lo miro a los ojos. —¿Que pasa, Am? Estaba todo tan bien y de repente me ignoras—
—¿Has dejado a Spencer?— digo directamente.
—No, no he podido pero...—
—No quiero seguir con esto, Corbyn.— digo y siento como la angustia se forma en mi garganta.
—¿Que? ¿Por qué? Amber no...— lo interrumpo.
—Tenemos que escondernos siempre y aunque al principio me gustaba hacerlo ya no más, ya es molesto no poder presumirte y no poder gritarle al mundo que estamos enamorados.
En meses me voy de nuevo a Mexico y no quiero tener relaciones a larga distancia, es detestable tener que vivir extrañando a una persona.
Te amo demasiado Rubio, pero yo así no puedo seguir.— siento como mis lagrimas amenazan en salir entonces me apuro en irme de allí.

Los pasillos de la institución ya estaban vacíos, solo se escuchaban mis pasos apurados. Quería salir de ahí, no quería verlo más porque si lo veía mi corazón iba a volver a caer en sus malditas redes.

—Amber— escucho su voz detrás de mi. Sigo caminando hacia la salida ignorándolo.
—Amber, escúchame— muerdo mi labio inferior intentando frenar mis lagrimas. La idea de frenar y escucharlo pasó por mi mente unos segundos, pero luego el recuerdo de él con Spencer apareció haciendo que me olvide completamente de esa idea.
Caminé más rápido y al fin logré salir de el lugar.
Comencé mi camino hacia mi casa, no quería estar con nadie, solo necesitaba estar sola en mi habitación llorando como nunca lo había hecho.

Needy | Corbyn Besson Donde viven las historias. Descúbrelo ahora