Needy | Corbyn Besson

048 The end

Hace una semana que había eliminado a Corbyn de mi vida, aunque todavía no lo siento fuera de esta.
Estos días intenté salir más de mi casa, estar con mis amigos, pasarla bien un momento y luego llorar toda la noche, ya era como una rutina.

Hoy me había levantado extrañando a Corbyn más que nunca y el día nublado no ayudaba en la situación. Me senté en mi cama observando la ventana de mi habitación, observé las nubes y bajé mi mirada hacia la carretera. Observé una pareja caminando de la mano riéndose y disfrutando de la compañía del otro. Un nudo se formó en mi garganta y dejé de mirar hacia afuera.

Salí de mi habitación para ir a comer mi almuerzo, aunque ya eran las siete de la tarde y debería estar cenando en vez de almorzando. Calenté mi comida en el microondas, la casa estaba muy silenciosa, Marie y Jason estaban durmiendo su siesta diaria y Louis estaba encerrado en su habitación.
El microondas empezó a sonar haciéndome saber que ya había terminado con su trabajo, saqué la comida y empecé a comer. Cuando me quede sin apetito, guarde mis sobras en la heladera y subí hacia la habitación de Louis.
Entre a su habitación y lo vi jugando a Fortnite.

—¿Que onda, hermanita?— dice sin sacar su vista de la gran pantalla.
Me acosté en su cama y mire el techo. —¿Como estas?— digo jugando con un almohadón.
—Bien, ¿tu?— dice y me mira por segundos para volver su vista a la pantalla.
—Cansada— suspiro.
—Siempre lo estás, ¿estás durmiendo bien?— noto preocupación en su voz y decido no preocuparlo.
—Si, solo que a veces me quedo hablando con Hanna hasta tarde y bueno— intento sonar lo más tranquila y sincera posible.
—Oh, ya veo— dice tranquilo.
—Bueno, me voy a dormir porque no doy
más— digo levantándome de su cama.
—Espera!— exclama y deja de jugar. Wow
—¿Que?— me mira y yo hago lo mismo.
—Necesito que vayas a comprar Coca Cola por mi—
—Louis, ya es de noche. Mañana voy— digo cansada.
—¡NO!— grita y yo lo miro extrañada. —Ve, ahora— dice más tranquilo y me da dinero.
—Agh, ok— digo y voy hacia mi habitación.

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Busco un hoodie para ponerme y me encuentro con el de Corbyn. Sonrió nostálgica y me lo pongo. Salgo de la casa y camino hacia el supermercado que estaba a unas cuadras. Compro lo que Louis me pidió y vuelvo a la casa.

Toco el timbre y espero a que me abran. Veo a Louis asomarse por su ventana y me mira.

—Ábreme, tengo tus cosas— lo miro.
—No te voy a abrir, lo siento— me tira un beso y cierra su ventana.
—¿Que?— susurro y empiezo a golpear la puerta. —Louis, ábreme— exclamo mientras sigo golpeando la puerta con más fuerza.
—Deja de jugar, Tomlinson. Ábreme, ahora— exclamo enojada y toco el timbre.
—¿No te dejan entrar?— escucho su voz detrás de mi y me doy vuelta rápido.—¿Podemos hablar?— dice y hace una mueca.
Dejo de mirarlo y vuelvo a golpear la
puerta. —¡Louis ábreme!— grito hacia la casa.
Las manos del rubio detienen las mias y me mira a los ojos. —No te va a abrir así que vas a tener que hablar conmigo porque yo no me voy a ir de aquí—
—¿Que quieres? Vete por favor— lo miro intentando no llorar.
—Te amo, Amber. Te amo como nunca ame a nadie— dice mirándome a los ojos y mis ojos se cristalizan.
—Deja de jugar conmigo, Corbyn— ruego y corro mi mirada de la suya.
—No estoy jugando contigo, Amber. Nunca quise hacerlo y nunca lo haré.— me agarra de la barbilla haciendo que lo vuelva a mirar.
—No me mientas más, por favor— digo y una lagrima se escapa de mis ojos.
—Deje a Spencer, deje toda mi vida de chico popular por ti. Porque quiero estar contigo, quiero vivir estos meses juntos a pleno, no quiero separarme nunca mas de ti, Amber. Créeme, por favor— ruega.
Suspiro y trago mi angustia. —Corbyn, yo también te amo per...— los húmedos labios del rubio me interrumpen. Sigo el beso trayéndolo más a mi mientras el me agarra de la cintura. Definitivamente, esto era lo que quería, esto era lo que mi corazón tanto busco. Los labios de Corbyn y los míos encajan como un rompecabezas y hacen magia juntos. Se movían a la perfección creando un sin fin de sentimientos. Estaba enamorada, demasiado enamorada.

El aire empezó a faltar pero ninguno de los dos quería separarse de ese beso. Preferíamos morir juntos a ser separados, pero este no era el caso. Me separé lentamente de sus labios y me quede unos segundos con los ojos cerrados relajando mi respiración. Mi corazón empezó a palpitar muy fuerte, mis labios se secaron rápidamente y mis manos deseaban acariciar el sedoso pelo del rubio. No sabía que estaba sintiendo, pero lo único que sabía era que los besos de Corbyn podían calmar eso. Lo agarré del cuello y lo volví a besar lentamente.

Nuestras bocas volvieron a hacer magia y ahí fue cuando me di cuenta que sus labios me hacían sentir necesitada.

•••

Y se terminó...
Más tarde subiré el epílogo.

Gracias por leer, votar y comentar. Gracias por darle amor a esta fanfic que significa mucho para mi. Los quiero mucho a todos ❤️ Gracias, de verdad ❤️❤️

Xoxo ❤️