Don't call me angel [ RadioDust ]

27°

Las explosiones no se hicieron desear por más tiempo, la seductora figura femenina de Cherri Bomb caminó decidida sobre el cruce entre los escombros de un territorio perdido. Con una sonrisa pícara, sostuvo dos bombas encendidas entre sus dos manos, al mismo tiempo que varios demonios rodeaban su cercanía desde sus escondites entre los escombros. Ella arrojó las bombas a un par de sus objetivos, pero un demonio trató de apuñalarla por atrás con un pedazo de vidrio roto que encontró por casualidad arrojado por ahí.

El exterminio se había realizado hace poco tiempo y todos estaban desesperados por encontrar un nuevo terreno para gobernar, fuera la medida que fuera iban a luchar como si se trataran de animales salvajes en busca de más poder y nuevos lugares donde habitar.

En ese momento, una bala le perforó el cráneo al demonio y Cherri se dio la vuelta en medio segundo. Angel caminaba con elegancia hacia la mujer, con un revolver en su mano derecha superior, mientras cargaba una ametralladora con sus dos brazos inferiores, su sonrisa coqueta la recibió porque extrañaba a esa perra la cual era su mejor amiga. La chica gritó de felicidad al verlo y se acercó a las corridas para abrazarlo con la misma emoción, hace mucho no lo veía después de todo y no tenía idea de que era de su vida en esos meses. Quería ponerse al día con él como si fueran dos colegialas luego de unas largas vacaciones.

—¡Mi bebé! ¿Estás listo para otra batalla?

—No tienes que preguntarlo.

Apenas se separaron, más demonios empezaron a rodearlos y ambos se rieron con mucha diversión y la adrenalina creciendo más y más. Se volvía un pasatiempo con los años y ya lo habían tomado como algo divertido, aniquilar demonios para cubrir todo el territorio que fuera posible. La mayoría solían ser débiles contra ellos, que llevaban décadas practicando esa clase de aniquilaciones.

—Oh, son muchos. Meh, nada difícil.

Angel apunto su metralleta hacia algunos y empezó a disparar con una puntería envidiable gracias a sus prácticas tanto en el infierno como en el plano terrenal, pero algunos demonios en forma de cuervo lanzaron graznidos de advertencia y volaron hacia el cielo. La araña reaccionó cuando se alejaron, sin tomar en cuenta que desde atrás las garras de otros dos demonios cuervo lo capturaron de su torso y lo jalaron con fuerza para llevárselo. Demonios carroñeros, quizás hasta planeaban comérselo si eso llegaba más lejos. Cherri Bomb desenfundó un cuchillo que sacó de dentro de sus grandes atributos y le cortó las piernas a esos tontos demonios que lo único que tenían de bueno eran sus reflejos y velocidad. La sangre se esparció de forma asquerosa y estos se fueron volando gritando mil groserías hacia la chica.

—¿Estás fuera de forma o qué? No te voy a salvar el trasero siempre.

Escondió el cuchillo y Angel la miró un poco indignado luego de ser salvado por ella. Observó a otros demonios de diferentes especies acercarse para atacar y no dudó en abrir fuego hacia ellos, algunos se escabulleron pero la mayoría fueron heridos por el contundente plomo de las balas de la ametralladora.

—De hecho, me duele el trasero luego de coger tanto con un daddy. Discuuulpame.

Recargó el arma y casi como reflejó, disparó de su revólver hacia atrás a otro demonio pájaro que lo estaba acechando, le destruyó la cabeza y cayó como una bolsa de mierda contra el piso. No podía dejar que sus reflejos le fallaran de nuevo. Cherri arrojó una bomba de color negro hacia la lejanía con todas sus fuerzas, ambos se inclinaron detrás de unos escombros y se taparon los oídos para no escuchar la explosión que sacudió la tierra segundos después de ser arrojada.

—Ja, ¿Juguete nuevo? No coges mucho con el mismo habitualmente al menos que te siga pagando fuerte.

—No vas a entenderlo, bebé.