One Shot, Au 1; K N Y

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Oc: Hayami ( / )

[o N e]                              Bang, Bang.

La última misión del mes y podría descansar un par de días, o eso había dicho el patrón. El Tokito buscaba al demonio responsable de las múltiples muertes que en su informe de mision mencionaba.

Era una linda noche y la Luna estaba brillante en el punto más alto del cielo. Todo parecía tranquilo para el Tokito quien iba despreocupado detrás del demonio.

A contrario del cazador el demonio corría por su vida, ya estaba regenerado por completo pero el enfrentarse a un pilar solo hacia que el miedo se apoderara de su cuerpo y corriera sin cesar.

- Esto empieza a ser molesto. - Murmuró para si mismo el menta y de un pestañeo estando frente al demonio.

- ¡Por favor, te lo ruego! Perdoname la vida, solo lo hago para sobrevivir, no comeré a nadie más, pero dej-- - El sonido de una bala disparándose fue lo único se escuchó. El rostro del demonio solo reflejaba dolor y una mancha se esparcia por todos lados, su cuerpo retorcerse hasta quedarse quieto dejó en claro el fin de ese ser.

- ¿Que demonios?... - El pilar estaba sorprendido. Ese demonio murió pero su cabeza seguía unida a su cuerpo, parecía a la forma en que morían los demonios cazados por Shinobu.

- Tu... - La voz femenina de un desconocido hizo que su vista se levantara hacia su dirección - ¿Eres un cazador de demonios? - Sus ojos se agrandaron por la sorpresa de ver a un cazador con sus propios ojos. Se acercó a él emocionada y analizando cada parte de su apariencia. - Tu uniforme, ese semblante dominante y la espada que portas... ¡Eres un cazador de demonios! ¡Uno real! -

La chica rodeaba al chico y lo recorría con la vista aún con una sonrisa de emoción, el brillo en sus ojos era hermoso. Hayami repetía constantemente un "increíble" sin parar, comenzaba a incomodarle al chico y más el hecho de que comenzaba a tocarle.

Con tus manos recorríste su cabello corriendolo a un lado para ver la espalda de su uniforme (esperabas que hubiera grabado algo pero no había nada), después recorríste sus brazos tocando su decadente mosculatura y finalmente ibas a tomar su espada para verla más de cerca pero mano en tu muñeca la detuvo.

- Deja de tocarme tan a la ligera. - Dijo, su tono no parecía tan amable. - ¿Como es que mataste a ese demonio? No pude si quiera ver tus movimientos, además que no pareces un cazador, ¿Que es esa ropa tan rara que llevas? ¿Y -- -Lo imterrumpiste para que no siguiera con su interrogatorio.

- Lamento el tocarte, me emocione de ver a un cazador de demonios, es la primera vez que veo uno de verdad. Y mi ropa es normal, ¿Que tiene de malo? Es como la tuya, bueno, tal vez tengo unas cuantas modificaciones pero sigo siendo normal. - Tomaste un poco de aire para poder seguir hablando - Por último y más importante: usé esto para matar a ese demonio. -

Sacaste un revolver de la funda que estaba en en tu cintura, hiciste un movimiento con tus manos para hacer que esta girará en forma de truco, tratabas de lucirte frente a ese chico, pero este solo ponía atención al arma que poseías.

Era un revolver sencillo, parecido al de Eilesh Calles de 1814, el primer modelo en la historia. Al Tokito le parecía extraño, nunca había visto una y su contacto con militares que contaban con ese tipo de armas jamás se había presentado.

- ¿Qué es eso? - Pregunto a la chica con el arma en sus manos. Te sorprendiste, en menos de lo que puedes analizar el ya tenía el arma en sus manos, apresuraste a sostener el arma con el aún empuñandola.

- ¡Ten cuidado! Si no sabes que es menos sabrás como se usa. - Forsajeo suavemente para que le diera de nuevo su arma pero este era más fuerte que ella y solo seguía moviendo el arma para verla. Hasta que apuntó el orificio de donde salían las balas a su cara viendo a través de el. - ¡No hagas eso, es peligroso, si te disparas a ti mismo tendré que cargar con tu muerte! - Este casi jala el gatillo por mera curiosidad hasta que lo golpeaste en la cara y quitaste el arma. - ¡Idiota! Escucha lo que digo y no me ignores. -

One Shots [Kimetsu No Yaiba]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora