CONDENADAS A ESTAR JUNTAS 2: PARA SIEMPRE

⭐ Staring - Cap. extra

•Alex•

La fila es enorme, y mi paciencia muy pequeña.
¿Cómo es que tantas personas van de compras en sábado?
Parece tonto, pero es la primera vez que Piper y yo vamos al supermercado a surtir nuestra despensa juntas, y aunque lo disfruto, como cada cosa que hago con ella, no puedo evitar estar con mi cara de poca paciencia y molestia viendo cómo un niño se tira al suelo en los pies de su madre porque ésta no ha querido comprarle una barra de chocolate.

Definitivamente no quiero bebés.

Suspiro con impaciencia y Piper parece notarlo, puesto que pasa una mano bajo mi chaqueta justo en mi cintura y besa mi mejilla tratando de tranquilizarme.
La miro con ternura, pero en sus ojos hay algo más.
Sus labios van a mi oído y da un beso que me llena de escalofríos, y su aliento cálido parece recorrer cada centímetro de mi cuerpo.

*Piper: -No sabes lo que voy a hacerte en casa, bebé...- canturrea esta última palabra con sensualidad y agitación.

Mi ceño se frunce como respuesta, quisiera inclinarla en algún lugar y darle unas cuantas nalgadas.
Sus labios succionan el lóbulo de mi oreja sin entender la mirada de seriedad que acabo de dirigirle.

*Piper: -Ese ceño fruncido sudaría, y tus mejillas estarían completamente sonrojadas mientras gimes mi nombre, Alex...- susurra.

*Alex: -Para, Pipes...- mi voz sale como un patético titubeo. -¿Qué rayos haces?- suelto el carrito y me alejo un paso.

*Piper: -Te amo, ven aquí...- parece que está muy juguetona.

*Alex: -No si harás eso otra vez...- estoy segura de que mi rostro es completamente serio e inescrutable aunque en mi interior todo está vibrando por ella, incendiándose.

*Piper: -¿Es en serio? ¿Alex Vause está cohibida?- se ríe.

Oh no, Chapman, no vas a salirte con la tuya.

Me acerco a ella sin dejar de mirarla, tal como un gato ascecha a su presa, con las garras afiladas y lamiéndose los bigotes a cada paso.
La tomo por la cintura y mis labios van a su mandíbula y sin importarme si hay más personas viéndonos al rededor, le doy unos cuantos besos hasta bajar un poco y lamer su cuello despacio ante sus brazos que desesperados tratan de alejarme.
Pego mi boca a su oído y exhalo un poco de mi aliento, puedo sentir como se estremece en mis brazos.

*Alex: -Podemos perder nuestro lugar en la fila por tus provocaciones, y te aseguro que me importaría un carajo llevarte al baño y golpear ese bonito trasero una y otra vez mientras mis dedos entran en tí frente al espejo... Te aseguro que el ceño fruncido sería el tuyo, princesa...- Pasa saliva y cuando la vuelvo a mirar sus mejillas están completamente rojas, y su mirada dulce ha cambiado para mostrarse turbia ahora.

Sé que te encantaría que hiciera todo eso, mi preciosa y caliente Pipes, y mentiría si dijera que yo no muero de ganas por hacerlo.

Después de mis acciones Pipes parece una tumba, seguramente sabe que yo realmente hablo en serio, después del incidente en el baño del bar de Stella.
La fila avanza y nosotras con ella, hasta llegar a la caja y pagar nuestras compras.
Cargamos las cosas hasta el maletero, subimos al auto y, dado que ella se ha aferrado a conducir, abre la puerta del copiloto para mí con una sonrisa bastante radiante.
Comienza a internarse por las calles de la ciudad mientras "Back in black" de AC/DC suena en el auto, y yo solo la observo de reojo.