⭐ A sky full of stars- Cap. extra

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•Piper•

Adoro pasar los sábados de cada semana con Alex en el departamento, pero esta vez, Cal y Neri nos han invitado a su camper en el bosque. No es que nos emocioné mucho el asunto, pero tampoco queremos ser groseras, pues mi hermano y cuñada nos aprecian bastante, sin contar que tanto Alex como yo, adoramos a nuestra pequeña sobrina Callie.
No estamos tan lejos del bosque donde ellos viven ahora, solo basta conducir entre veinte y treinta minutos aproximadamente, y desde que puse el auto en marcha, mi prometida no ha dejado de ponerse protector solar.
Sé que su pálida piel es bastante sensible, pero me es imposible no bromear al respecto.

*Piper: -¿Es que piensas que nos desviemos y vayamos a la playa?- Me río.

*Alex: -¿Qué?- Veo de reojo como me mira con confusión.

*Piper: -Creo que tienes demasiado bloqueador ya Al, te recuerdo que en un bosque hay pinos y árboles enormes...-

*Alex: -Ha-Ha...- Suspira con sarcasmo. -Cuando volvamos a casa no quiero que vayas a quejarte por tus quemaduras de sol.-

*Piper: -Amor, no vamos a hacer caminatas a través del desierto... ¿O es que piensas broncearte en topless en el techo del camper?- Suelto una risa de nuevo y termino con su paciencia.

*Alex: -Eres insoportable.- Lanza la botella de protector solar a la guantera del auto y se enfurruña volteando hacia la ventana del auto.

*Piper: -Lo siento, amor...- Pongo mi mano en su muslo y aprieto un poco, pero ella no dice nada más.

El GPS nos anuncia que ya estamos llegando, y a unos cuantos metros puedo vislumbrar el camper.
Detengo el auto y miro a Alex colocándose una gorra, aprieto los labios tratando de no reír ni decir nada más, y bajamos del auto.
Tomo la mano de Alex que incluso intenta ponerse algo reacia a mi toque, pero no se lo permito.
Ella lleva la correa de Tank cuyo entusiasmo desborda olfateando todo a su paso.
Cal está sentado frente a una fogata cocinando algo que prefiero no saber que es, y cuando nos mira se levanta entusiasmado.

*Cal: -¡Oh, ya están aquí! ¡Hola, cuñada!- Abraza a Alex con entusiasmo.

*Alex: -¿Cómo estás, Cal?-

*Piper: -Que bueno que somos hermanos y te emociona verme...- Le digo fingiendo un puchero.

*Cal: -Ven acá, rubia tonta... Claro que estoy feliz de verte...- Me abraza con fuerza y despeina mi cabello.

*Neri: -¡Hola!- Saluda bajando los escalones del camper con Callie en brazos. Vaya que ha crecido.

*Piper: -¡Neri!- La abrazo y tomo a mi sobrina en brazos. -Callie, ¡estás enorme!- Alex acaricia las mejillas de la bebé y ésta sonríe con entusiasmo.

*Alex: -¿Me extrañaste pequeña? Apuesto a que sí... Eres muy hermosa Callie...-

*Neri: -A Callie le encanta ver las fotos de año nuevo, creo que ha congeniado bastante con tu aura, Alex...-

*Alex: -Sí... Seguramente es eso... El aura...- Vuelvo a omitir mi risa y dejo que mi chica tomé a Callie en brazos y me ofrezco a ir por nuestras cosas al auto con ayuda de Neri.

Para el momento de la comida, estamos frente a un plato de salteado de setas silvestres con mantequilla orgánica, una tortilla de avena y amaranto, además de algunas espinacas.
El plato luce colorido, pero sé que Alex estará muriendo de hambre aunque coma varias raciones.
Nos sentamos al rededor de la fogata para comer, y es increíble lo adaptada que Callie está a este método de vida, incluso disfruta de la extraña combinación de alimentos que sus padres nos están ofreciendo.
Y Tank por primera vez en la historia no está rogando porque compartamos nuestra comida, y de forma voluntaria come sus croquetas.
Es viernes y normalmente a esta hora estaríamos buscando algo que ver en Netflix, ya que nuestras guardias terminaban a las 4pm esta semana. Seguramente Alex habría servido un par de copas de vino, que luego se convertirían en una botella entera que entre besos terminaríamos de vaciar en la habitación.
Pero en lugar de eso, estamos en uno de los claros del bosque con Cal, observando el cielo estrellado, que debo admitir es precioso.
En un momento desvío mi atención a la preciosa chica a mi lado, su rostro parece estar delineado por la luna, y juro que ella es el cielo estrellado más precioso que yo podría encontrar alguna vez.
Suspiro solo de mirarla, y parece que ella se da cuenta de que la estoy contemplando, puesto que me abraza a su pecho, y el calor que irradia me hace sentir en casa.
Sostengo a Tank en mis piernas, pues no quiero que vaya a extraviarse.
A pesar de que mi chica ha estado seria conmigo toda la tarde, aún por el asunto de mis bromas en cuanto al bloqueador solar, sé que no le durará eternamente.

CONDENADAS A ESTAR JUNTAS 2: PARA SIEMPREDonde viven las historias. Descúbrelo ahora