9 - I don't want a miss a thing

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•Alex•

Mi cabello bien peinado y desenredando, llevo unos jeans de mezclilla y un blazer negro, tenis... Creo que debe bastar.
Analizo mi atuendo una y otra vez antes de salir de casa, y aún ahora que estoy sentada en la sala de los papás de Piper, sigo tratando de creerme que debe ser suficiente.

*Carol: -Así que peleaste por mi princesa que ahora es tuya, ¿eh Alex?- Rompe el silencio desde la cocina con Piper poniendo su cara de querer decir "lo siento" porque seguramente le contó la hazaña a su madre.

*Alex: -Digamos que la doctora Witt se estaba sobrepasando... Piper no merece faltas de respeto, así que se lo hice saber de la única manera que fue capaz de escucharme.-

*Carol: -Yo le habría pateado la cara. Que tipa tan desagradable.- hace una mueca.

*Alex: -Aún así, Pipes creía que era su amiga, pero yo siempre le dije que era una imbécil.-

*Piper: -No puedes hablar de amistades, Alex...- Y sé que se refiere a Fahri, pero no tengo intenciones de discutir eso, y menos ahora frente a su madre.

*Alex: -No es lo mismo, amor... Pero en fin... Supongo que ahora Zelda solo puede molestarme a mí.-

*Carol: -En verdad te admiro, Alex. Si yo estuviera en tu lugar, seguramente ya le habría arruinado el rostro a esa mujer.-

*Alex: -Es difícil contenerme, ¿sabe?-

*Carol: -Espero que estés siendo de ayuda con eso, Piper. Alex necesita de tí, y más si está en problemas por defenderte...-

*Alex: -No hace falta que lo diga, ella es increíble... Siempre hace que me relaje después del trabajo.- Miro a mi doctora sexy con una sonrisa que ella sabe interpretar, puesto que inmediatamente se sonroja. -Piper es mi zona segura, mi lugar feliz...- suspiro con fuerza mientras ambas me miran con ternura.

Los minutos pasan, y uno a uno, los Chapman están aquí.
Cal y Neri son los últimos en llegar, alegando que la pequeña Callie tiene resfriado y es complicado lidiar con ella.
Mantengo una conversación seria con Daniel un rato, y a decir verdad no me agrada mucho, pero estoy convencida de que Reachel es su pareja perfecta. Ambos son tan cuadrados y tan jodidamente recatados que no parece que sean familia de mi Pipes.
Hace unos minutos que me he desviado de la conversación, no sé de qué están hablando, pero Cal está comenzando a levantar la voz mientras Daniel se ríe.
El timbre suena y todo en mí se tensa.
Mis padres están aquí.
Me levanto de inmediato para abrir la puerta, y Piper se une a mí tomándome de la mano.

*Alex: -Hola...- digo con nerviosismo a penas abrimos la puerta.

*Diane: -¡Mi amor!- su voz chillona me atrapa en seguida a la vez que sus brazos también lo hacen.

*Lee: -Ustedes cada vez están más preciosas, creo que les hace bien estar juntas.- dice y sin poder soltarme aún del abrazo de mi madre, puedo ver a mi padre besar la mejilla de Piper y abrazarla.

Después de un montón de abrazos, besos y saludos, por fin estamos todos dentro, en el patio trasero de los Chapman, donde recibimos el año nuevo.
Pensar en ello me trae unos increíbles recuerdos, pero no pienso dejarme llevar por ello. Así que de inmediato me concentro en la conversación.
Piper aún cuenta a detalle como vivió la hazaña mi rescate en carretera. Sus ojos brillan y aprieta mi muslo de vez en cuando por la euforia que siente al hablar de la trepanación de emergencia que yo hice y de como las personas del hospital aún están impactadas con ello, pero lo único que yo puedo ver es el enorme amor que ella irradia por mí, y las palabras de Red vienen a mi mente, es verdad que ésta chica me ha amado demasiado, quizá más de lo que alguna otra persona me ha amado en mi vida.

CONDENADAS A ESTAR JUNTAS 2: PARA SIEMPREDonde viven las historias. Descúbrelo ahora