CONDENADAS A ESTAR JUNTAS 2: PARA SIEMPRE

6 - I won't give up

•Piper•

La ansiedad de Alex se ha incrementado los últimos días, y la comprendo totalmente, no debe ser fácil estar alejada de lo que tanto amas hacer.
Mi turno ahora es por la mañana, de 8am a 4pm, y normalmente suelo dormir bastante bien, pero estos días alguien me ha despertado varias veces para hacer el amor, y no tengo objeción alguna con eso, de hecho me encanta.
Así pienso que parecemos más una pareja normal, cosa que por muchas razones me queda claro que no lo somos.

Termino de ducharme con besos desde uno de mis hombros hasta el otro y una risa traviesa al escucharme gemir cuando siento una pequeña nalgada retumbar en mi piel.

*Alex: -Ve a vestirte, yo iré a preparar tu desayuno y almuerzo.- Aquí está mi Alex mandona.

*Piper: -Te amo...- suspiro mirándola secarse el cabello con su cuerpo desnudo frente al espejo.
No hay otras palabras que yo quisiera decir, lo único que se viene a mi mente es el enorme amor que siento por ella.

*Alex: -Yo también te amo, pero te advierto que si no te das prisa llegarás tarde...- se burla y comienza a caminar fuera del cuarto de baño.

*Piper: -Espera... ¿Vas a andar por la cocina así? ... ¿Completamente desnuda?- paso saliva porque sé que va a ser bastante difícil que yo salga de casa.

*Alex: -No, pervertida, tomaré unos pantalones de mi guardarropa...- se suelta a reír y yo asiento.
Un poco de alivio se combina con decepción en un suspiro que sale involuntario de mí.

Seco mi cabello y lo desenredo solo pasando mis dedos por los mechones rebeldes, normalmente lo hago con un peine, pero al parecer, estos días tengo prisa porque quiero alcanzar a desayunar con ella en la barra de la cocina.
La crema hidratante se siente bastante bien en mi piel, y no puedo evitar pensar en que hace unos minutos las manos de Alex eran las que me recorrían el cuerpo.
Sacudo mi cabeza burlándome de mí misma.

¿Es que ahora la incontenible eres tú, Chapman? Debes aprender a dejar de tener pensamientos sexuales por cosas tan simples que te ponen caliente.
Alex es caliente.
Alex.

Sacudo otra vez mi cabeza y comienzo a colocarme la ropa a toda velocidad para recuperar el tiempo perdido con mis alucinaciones.
Un poco de delineador y rimel es lo único que coloco de maquillaje, recojo mi cabello en un puño mal hecho tras mi cabeza y estoy lista.
Comienzo a caminar por el pasillo hacia las escaleras, y lucho con ponerme bien los tenis que parece que incluso esta mañana están reacios también.
Bajo trotando y resbalo casi cayendo sobre la alfombra al encontrarme con Tank corriendo en mi dirección.
Le tomo en brazos y acaricio su cabeza entrando por fin a la cocina.
Alex levanta la mirada hasta encontrarse con la mía y sonríe de forma malvada.
Es cierto que lleva pantalones. Solo eso y un delantal. Mierda.
Pongo a Tank en el suelo y paso saliva sintiendo mis mejillas arder; puedo incluso sentir como la sangre bombea por mi torrente sanguíneo y retumba en mis sienes.

Ahora entiendo por qué no puedo alejar los pensamientos sexuales de mi cabeza ni un instante.
Es totalmente culpa de Alex Vause.

*Piper: -Tramposa...- le digo pretendiendo sentarme en uno de los bancos altos de la barra, del que por poco y caigo por no poder despegar mis ojos de ella.

*Alex: -Te dije que tomaría unos pantalones de mi armario... Jamás dije nada de una camiseta...- se encoje de hombros.

*Piper: -Eres malvada.- le digo tomando la taza de café que me extiende.