❝𝒇𝒂𝒍𝒍𝒊𝒏𝒈 𝒇𝒐𝒓 𝒚𝒐𝒖❞ ⁽ᶜʰᵃⁿᵇᵃᵉᵏ⁾

[ 𝟎𝟏 ; 𝟎𝟑 ]

Dos días transcurrieron rápidamente dentro de mi habitación y el baño. Perdí mi teléfono, aún así no le di mucha importancia porque era viejo e iba a comprar uno nuevo. De todos modos no quería saber nada de nadie, sólo estar solo hasta sentirme mejor y ya no tener que aferrarme al inodoro la gran parte del día. Pero la verdad era que hoy había estado mucho mejor ya que vomité dos veces a comparación de los dos días anteriores en los que fueron más de diez veces.

Un ataque nervioso. Eso pensé, aunque le dije a mi madre que algo no me había caído muy bien el día lunes y a pesar de que si fue algo lo que me hizo mal, no fue comida como actualmente cree mi mamá y mi hermana.

"Divertido y amable"

Malditas mentiras que sólo eran parte de una falsa personalidad de ese imbécil de dos metros.

"-Cierto, soy un chico y tú eres marica."

Mi estómago se siente removido, pero ya no tenía la necesidad de expulsar lo poco y nada que comía al día.

Sin previo aviso la puerta fue golpeada de una forma débil y me paré a abrirla y pude ver dos chicos con una cara extremadamente preocupada que después de un segundo de abierta la puerta, se abalanzaron sobre mi fingiendo llanto.

-¡Baekkie! -exclamaron al mismo tiempo.

-¡¿Por qué no atendías las llamadas?! -me gritó Soo a la vez que me tiraba a la cama para que me sentara y les explicara.

-¿Qué pasará con tu castigo? -interrogó Minseok -¿Y si te expulsan?

Suspiré al recordar que había dejado de lado tres días de castigo y como si quisiera lastimarme todo el tiempo, aquel recuerdo de la escena en el baño se repitió en mi mente.

-Estás bien, ¿cierto? -preguntó Kyungsoo.

Tras volver a suspirar procedí a explicarles el porqué no fui a clases durante estos tres días, pero también tuve que decirles la razón de mi ataque nervioso y temí que no me creyeran.

-No puedo creerlo -dijo Minseok ya que Kyungsoo parecía estar en shock -. Estos días comimos en su mesa y es muy diferente -frunció el ceño confundido -. Digo, él fue amable y hasta divertido.

-Pues yo no le agrado y no pienso volver a acercarme a él -dije decidido -. Y si eso significa que tengo que cumplir otro castigo o dejar la escuela, creo que no habrá de otra-

-Él me preguntó por ti todo el tiempo -habló por primera vez el pelirrojo interrumpiendome -. Dios. Ahora tiene sentido.

-Soo -llamé su atención -. Ambos tenemos castigo compartido y si yo no voy, significa que tiene que hacerlo solo.

-Es un imbécil con nuestro Baekkie -se unió Kim -. No pienso hablarle de nuevo.

-Es lo que corresponde -apoyó el de labios es forma de corazón -. Yo tampoco hablaré con él -informó mientras buscaba algo en su teléfono -, y le diré a Kai para que hable con él y lo haga recapacitar.

-Do Kyungsoo -cité su nombre.

-¿Qué? -preguntó confuso.

-No es necesario eso ni que ustedes lo ignoren -solté cansado -. Lo agradezco, pero él sólo es así conmigo y si ustedes tienen una buena relación con él, está bien para mi.

-No hablaré con Kai, entonces -decidió -. Pero no pienso hablarle a ese orejón si no es necesario.

-Yo tampoco -añadió Min -. Ah, y mañana mismo te queremos en el instituto, señor Byun.

-Claro -sonreí.

Los chicos se acomodaron en el suelo para poder jugar juntos en la única consola que tenía el único juego que poseía. Yo no era aficionado a los videojuegos pero me la habían regalado mis padres hace tres años atrás y no pude rechazarla.