DON'T PROTECT ME.

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- ¡Mami! ¿Que es eso? - Preguntó el pequeño con sus ojitos brillosos.

- ¿El qué, pequeño? - Devolvió la mujer que lo tenía agarrado de la mano.

- Eso... - Señaló el pequeño con su dedito índice derecho.

- Un señor disfrazado de pescado. - Contestó la señora con una ceja alzada mientras veía a la botarga bailando.

- ¡Quiero ir a verlo! ¿Podemos? - Ese gesto, otra vez, ojitos suplicantes.

- ¡Si, mami! - Dijo el niño más grande de acuerdo con su hermanito. - ¡También quiero ir a verlo!

- Vayamos entonces. - Aceptó la señora con una sonrisa cálida mientras que caminaba con los dos niños pequeños sujetándolos de la mano.

La familia iba junta por lo que el señor Kim solo caminaba detrás de los tres amores de su vida mientras los miraba enternecido.

Se paró un tanto lejos de ellos para poder ver la escena mejor... Las personas podrían decir que el amor que siente por su nueva familia se acabará; pues nada es para siempre... Si ese fuera el caso entonces aprovecharía todo el tiempo que tuviera con ellos.

Se sentía demasiado bien tener una familia recién integrada formalmente pero feliz... Pronto vio cómo el más pequeño se acercaba a él para después tirar de su mano y guiarlo hacia su hermano y madre.

Al casi estar al lado de su esposa alzó al rubiesito para desoues ponerlo sobre sus brazos mientras veía a su hijo biológico jugueteando al rededor de la botarga.

Mientras los dos padres veían como el niño jugaba y corria con varias risas y gritos de diversión al rededor de aquel señor disfrazado de pescado también reían, pues, el hombre solo jugaba con el niño queriendo alcanzarlo para cargarlo.

⏳

Ya en el hotel decidieron que sería mejor bañarse antes de ir a cenar, por lo cual; los dos adultos se encargaron de meter a la tina de baño del lujoso hotel a sus hijos mientras jugueteaban con ellos en la habitación.

Al terminar de vestirlos los dejaron viendo la tele sobre la cama mientras que el señor Kim se metía a asearse.

Cuando el hombre terminó fue el turno de la mujer para meterse a la habitación y hacer lo mismo que hizo su marido.

Después de media hora la familia ya estaba totalmente lista para volver a salir a las calles del lugar.

No tardaron demasiado tiempo en encontrar un lugar para comer pues aún era temprano y habían demasiados lugares abiertos.

Al entrar comenzaron a buscar una mesa para sentarse, el lugar tenía un escenario donde había una banda tocando música para acompañar la velada de todas las personas que estaban en el lugar.

Eligieron una mesa en el centro del restaurante y tan rápido como se sentaron llegó una persona que parecía ser un mesero.

Le dijeron sus órdenes y cuando las tuvo anotadas por completo se volvió a alejar dejando así a la familia sola.

Ante la ausencia del mesero SooHan comenzó a hablar hacia los dos pequeños de la mesa.

- ¿Se están divirtiendo, bebés? - Preguntó prestando les especial atención.

- ¡Si, papi! - Exclamó el más pequeño de los dos niños. - Todo es muy bonito.