Perdida en ti

Capítulo 49 - Regreso al set

- Silencio gente- Nate dijo con firmeza, y un silencio cayó sobre el equipo reunido en el improvisado callejón que el diseñador de producción y el equipo de arte habían creado entre dos edificios en la parte trasera del complejo -Estamos rodando- Durante unos segundos, solo se pudo escuchar el débil sonido de la lluvia constante que caía en los charcos de los alrededores. Cerré los ojos, tratando de relajarme e ignorar lo que me rodeaba. Ignore la llovizna fría que empapa mi piel y mi cabello, y la humedad del pavimento mojado debajo de mí se filtra en mi ropa. Reprimiendo un escalofrío, maldije cualquier estúpido sueño de la infancia que me hizo querer actuar.

Por favor, por favor, por favor, que esta sea la última toma.

Habían pasado seis semanas desde el asalto, cinco semanas desde que salí del hospital, diez días desde que me mudé de la casa de Esme a mi casa y tres días desde el inicio de las grabaciones para la nueva temporada del 9P. Mi cuerpo se había curado bien y no había tenido ningún problema con los aspectos físicos de mi trabajo o mi horario, pero aún tenía problemas para ocultar el daño que se estaba curando lentamente mi cara.

El maquillaje tomó una hora y media más cada mañana, lo que obligó a Jules y a mí a estar en el set a las cinco de la mañana, el tiempo adicional necesario para los retoques durante las grabaciones, esto provoco problemas dentro del elenco y la tripulación.

Cuando suficientes personas se quejaron, Leonardo habló con Carlos, Carlos habló con sus escritores, y al día siguiente, la apertura de la temporada fue reescrita para crear una razón para que mi personaje tenga cicatrices.

Las nuevas escenas habían sido programadas durante la segunda semana de filmación, pero Nate, en su infinita sabiduría de director, había decidido que esta noche insólitamente fría y húmeda sería el escenario perfecto para el ambiente que quería establecer para la escena y fue por eso que, casi a la medianoche después de un día completo de filmación, me senté en un montón en un oscuro y sucio "callejón". Tenía frío, estaba mojada, y me molestaba mucho que mis planes para la noche con Valentina, que no lo había visto en dos semanas y quien finalmente regresaba a casa esta noche después de los retrasos en el lanzamiento de Lost Key, tuvo que ser cancelado.

-Escena once-C, toma cinco... ¡Acción! - Llamó alguien, y sus palabras fueron seguidas por el chasquido de una tablilla. -Listo- Nate habló de nuevo, -¡y, Acción!-

-Suelta la pistola, perra- Las palabras fueron duras y retorcidas, subrayadas por otro temblor que sufrí sin huesos -Olvídate de haber oído hablar del nombre Emiliano Álvarez-

Mis ojos se abrieron brevemente, lo suficiente como para ver la cruel burla y la cara oscura y marcada por encima de mí. El actor diurno que se había hecho con la parte de mi atacante, David o algo así, realmente era bastante... intimidante, y experimenté de nuevo, como había hecho en las tomas anteriores, un momento de inquietud cuando abrí los ojos y encontró su cara tan cerca de la mía. Luché contra la urgencia que acompaña a la huelga en defensa, recordando a mí misma que Todd Massey estaba encerrado de forma segura en la unidad de Servicio de Psiquiatría, y el hombre que estaba encima de mí no era una amenaza.

Apreté los dientes y forcé un suave gemido, inclinando mi cabeza hacia un lado y exponiendo la sangre falsa en mi mejilla a la lluvia fría. El lío pegajoso de inmediato comenzó a gotear por mi cuello y en el cuello de mi camisa, haciéndome cosquillas ligeramente.

- ¿Rita? - Llamó una voz silenciosa, y pasos agudos y rápidos resonaron cerca.

El hombre juró de manera ininteligible y me dio una sacudida más antes de dejarme caer bruscamente al pavimento mojado. Escondí una mueca y me quedé inmóvil mientras la salpicadura y el golpe de sus pasos retrocedían en la noche.