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Capítulo dieciocho

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Capítulo dieciocho.
"Hoseok"

Kim TaeHyung

Mientras estaba con Jimin esquivando las cosas que nos lanzaba aquel hombre, no podía dejar de pensar en mi ángel. Quién no sabía que hacía ahora mismo, dejé de esquivar y Jimin me observó mientras buscaba con la mirada a aquella chica de la que debía estar pendiente. Y allí estaba. Tan radiante como siempre, pero no conmigo.

Ella hablaba con un chico más alto que ella, más o menos de mi misma estatura, y mientras mantenían su conversación compartían pequeñas sonrisas.

Fruncí el ceño al ver como hablaban entre ellos, mientras que Jimin me tomaba del hombro en señal de apoyo a la par que negaba con su cabeza.

—Puede darse cuenta de que la observas, mejor continuemos, TaeTae—Sonrió mi mejor amigo haciendo que me sienta mucho mejor.

Yo asentí. Y es que él tenía razón. Si Haneul se diese cuenta de que la estaba mirando sería incómodo, además de que ese chico podría darse cuenta de cómo me siento y quizás decírle a mi precioso ángel. No quería que se enterase, no ahora, no de esa manera. Me giré con Jimin y continuamos molestando al hombre, pero me percaté de la mirada del chico y de Haneul sobre nosotros. Nos estaba estudiando. Los miraba de reojo sin que ellos lo percibieran, y después Haneul se despidió de él y se acerco hacia cada uno de nosotros. Nos haló de las orejas para sacarnos del lugar y al no tener manos suficientes tuvo que realizar tres viajes para traernos a todos y poder reunirnos, a todos menos a Hoseok.

—Estuvo mal lo que hicieron, que no se repita—Habló con el entrecejo fruncido.

Haneul nos miraba a cada uno con desprecio, y es que, hace un momento habíamos arruinado el festejo de unos recién casados. Y no sólo eso, habíamos colmado la paciencia de varios de los presentes haciéndoles perder los estribos. Y el dinero, por supuesto. Habíamos roto bastantes cosas que eran frágiles y que parecían costosas.

Entonces, todos pasamos a un segundo plano, porque de repente posó su vista en un balcón que quedaba tras nosotros. Giré disimulando y ahí estaba Hoseok y dentro del lugar estaba el mismo chico de antes. Los ojos de ella brillaban levemente al ver a Hoseok, y sí, ese chico era bastante alegre y amable. Y en el transcurso del día, había pasado bastante tiempo con mi ángel. Fruncí de nuevo el ceño, a éste paso me saldría una arruga en la frente, pero era imposible no sentirme celoso respecto a Haneul y otro chico.

—Hey TaeHyung, los demás ya se van a casa, ¿vienes conmigo y Hoseok? —Preguntó la chica.

—¿Hoseok?, pero si siempre vamos los dos juntos. Solos—Respondí recalcando la última palabra.

—Sí lo sé, pero, podríamos dejar que Hoseok se una a nosotros, es un gran chico—Sonrió levantando la vista.

—Sé como es Hoseok, pero ¿tan rápido te enamoraste de él? —Pregunté con sarcasmo y una ligera molestia.

—¡No!, quiero decir—Se sonrojó—,¡enamorarse es una palabra fuerte!, es lindo, sí, pero no llego hasta allá.

—Tsk, como digas. Mejor me iré con los chicos, tal vez los alcance y ahí no tendré que hacer de violinista — Me retiré tras dedicarle una mirada.

—¡TaeHyung! —Me llamó.

No iba a voltear, pero tampoco iría con los demás, todos ellos sabían sobre mi enamoramiento hacia Haneul, pero no quería escuchar sus palabras frente a que ella prefiere a Hoseok en vez de a mí. Me sorprendí a mi mismo. No solía comentar con la expresión del típico Tsk y hace poco lo utilicé, además dos veces en un mismo día. Revolví mi cabello frustrado, ¿no podía ser más obvio?.

Le llamo por cariño, o ángel, la molesto para ser el centro de su atención, le hablo bien para poder llegar a ser cercano a ella. ¡Incluso la acompaño a su casa todos los días!. Pateé una piedrita del suelo y empecé a caminar sin rumbo. Rodé los ojos y suspiré con pesadez. En unos días iniciaríamos el viaje de la facultad, y tomarle fotos a un hombre que va a proponerle matrimonio a una mujer. No me interesa en lo absoluto, sobretodo si es quien creo que es. Suspiré por segunda y última vez y posé mi mano sobre mi pecho, en el que sentía un sentimiento de extraño. Tenía miedo. La podría perder, y no sólo por Hoseok sino también por su prometido. Era la primera vez que le tenía miedo a la pérdida. Me sentía inseguro, ¿qué había hecho mal?, ¿acaso debo tratarla con frialdad para que me ponga atención tal y cómo en las películas? ¿O debo ser la copia de Hoseok?.

O quizás obligarla a estar a mi lado.

Nunca deseé que mi madre estuviese aquí, sin embargo aquí la estoy necesitando aún sabiendo que si ella pisa la Tierra sería peligroso. Pero me urgía un consejo suyo. Quizás me diría algo como "hijo, ella debe saber lo que vales, y si no, pues déjalo y ya está" o en palabras más simples por mi terquedad "simplemente sé tu mismo, si a ella no le gusta pues bien y si no, pues también" imité su voz en mi cabeza.

Negué mentalmente, mi orgullo estaba ligeramente herido, tanto como mis esperanzas por estar con ella por los suelos. Ella misma, solita, acababa de reemplazarme con Hoseok, quería igualar las cosas, ¿qué sentiría ella si ya no le presto tanta atención y me voy un tiempo con mis amigos?¿Qué pasaría si la llamase sólo por su nombre?, ¿y si la dejo de molestar? ¿O me voy a casa con Jimin y YoonGi todos los días?
Era algo estúpido y parecía algo infantil. Pero me había cansado y a partir de ahora, todo cambiaría, ya no sería yo el único interesado. Estaba decidido. Si a ella hacía algo al respecto, todo volvería como antes y si no, adiós Haneul. Era tonta la forma en la que la dejaba. Simplemente la protegeré por el hecho de que esa sigue siendo mi tarea.

Me senté en una banquita que estaba por ahí. Ahora pensaba en mis dos hermanos, ¿estarían bien?, ¿mamá y papá también lo estarían?.
El sólo hecho de preocuparme por Haneul hizo que pensara de más, ahora me preocupa de sobremanera, es que ese clan rebelde logre tomar el poder. En ese caso, tanto el cielo como la tierra arderán en el infierno. Y ni siquiera Haneul podría evitarlo. Tendríamos que encontrar un híbrido entre un ángel y un demonio. Esa sería la única forma de establecer la igualdad. Cerré mis ojos y respiré con tranquilidad. Todo iría bien, sólo debía pensar en positivo y por supuesto continuar mi camino.

A partir del lunes me alejaré de Haneul, no del todo, para no tener un cambio brusco. Pero si lo bastante para hacerle saber lo poco que ella notase, aún cuando mis sentimientos fuesen creciendo.

(🏵️) ੈ⨾Después de todo, debía continuar con el plan. Y no debía distraerme.


Exotic ≈ K.TaehyungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora