"Pude Haberte Matado"

2K 135 6
                                    

Seguimos nuestra travesía por la carretera, todos íbamos en silencio, cuando llegamos a un cruce en específico Daryl y Carol se voltearon a ver.

—Por aquí fue por donde se llevaron a Beth.— dijo Daryl.

—¿A qué te refieres con que se llevaron a Beth?—Maggie se le acercó.

—Estuvimos juntos después de la prisión y luego nos rodearon y se la llevaron.

—Yo también estuve ahí, después de eso nos separamos Daryl y yo.—Carol afirmaba lo que Daryl decía.

—Tenemos que ir por ella.— todos nos miramos, después Rick habló.

—Podemos ir, después de que regresen nos vamos a Washington con Eugene y Abraham.

—No sabemos a donde la llevaron, ni cuantos son y si son realmente malos.— dijo Abraham.

—¡Pero es mi hija!— Hershel decidido habló -Si tengo que quitarme la vida por ella lo haré pero no podemos no hacer nada.

—Hershel tiene razón, debemos ir por ella.—miré al tal Abraham. —Si fuera Rosita o alguien más tú estuvieras igual de desesperado por encontrarla.

—De acuerdo, pero ya casi anochece.— tenía razón el grandote, saqué el mapa que me dio Merle.

—Rick, toma.— se lo entregué y él empezó a revisarlo.

—Estamos aquí,— señaló el mapa, Daryl, Glenn y Hershel veían a su alrededor y luego miraban de nuevo el mapa —cerca hay un pueblo, puede que encontremos algo para dormir esta noche y tal vez algo de comer.

—Lo mejor será que nos adentremos al bosque.— opinó Daryl.

—No nos arriesgaremos así, mejor sigamos hasta la desviación y entramos directo, del pueblo queda más cerca la ciudad y el hospital que vieron del sello.

Todos estuvimos de acuerdo al plan de Rick, apresuramos nuestros pasos para llegar antes del anochecer al pueblo, pero no llegamos y no quisimos avanzar más porque ya nos habíamos topado con grupos de caminantes por la carretera y a oscuras se nos dificultaría más.

Hicimos una pequeña fogata a la orilla de la autopista, Daryl y yo habíamos cazado algo para todos, no era mucho pero si bastante para tener algo en el estómago después de eso dormimos un rato, al amanecer volvimos nuestro camino hasta llegar a la carretera que nos llevaría al pueblo más cercano.

Movimos algunos carros que nos estorbaban la pasada, de alguna manera todos estábamos felices de estar juntos, pero otra parte nos dolía porque no todos regresamos completos, Daryl y Carol volvieron sin Beth, yo sin Merle, no volvió Dale, esto nos perjudicó a todos y nadie decía nada al respecto.

Llegamos al fin al pueblo, estaba vacío, por decirlo de alguna manera. No había caminantes cerca, caminamos siguiendo a Rick quien tenia el mapa. Y recuerdo este pueblo... No su nombre pero una sensación de que antes había estado aquí inundaba mis pensamientos, incluso mis sentimientos. De pronto un grito de ayuda, se oía lejana, después más cerca.

Rick nos miró y todos asentimos, corrimos hacia el grito de ayuda. Había un grupo de caminantes no muy grande, saqué mi arco y empezamos a matar desde lejos, sacaba flechas de la espalda, la acomodaba y disparaba, los demás corrieron y con cuchillos, la espada de Michonne, martillos y la ballesta de Daryl terminamos con todos. Un hombre estaba hecho un ovillo en el suelo, sus manos cubrían su nuca, temblaba aquel hombre.

—¿Estás bien?— preguntó Rick. Este hombre se paró lentamente, yo recogí mis flechas y Daryl las suyas.

—Gracias por su ayuda... Dios se los pague.— era un padre de una iglesia, el resto del grupo llegó.

—Te vez muy bien vestido, ¿tienes un refugio cerca?—volvió a preguntar Rick.

—Yo, yo tengo una iglesia cerca de aquí. Los puedo llevar, veo que tienen una bebé. Por cierto déjenme presentarme, soy el padre Gabriel.

Nos miramos, desconfiamos de este hombre pero aceptamos ir, pronto llegamos a su pequeña iglesia, nos dejó entrar y acomodar nuestras cosas, le hicimos un tendido a Judith, pronto su espalda descansó de los brazos y de su estómago porque se soltó.

—¿Carl, me puedes pasar un pañal, por favor?— le pregunté, iba quitando poco a poco la ropita para poderla cambiar.

—Toma, es el último.— me pasó un pedazo de camiseta limpia y un pañal, también talco y crema.

—Deberías decirle a tu papá, podríamos ir a buscar más y de paso más comida.

Carl se fue directo con su papá después de decirle, quité el pañal sucio, lo envolví y lo puse a un lado, después con el pedazo de camiseta empecé a limpiar su cuerpesito con cremita, al final puse el último pañal y talco, cerré bien el último y puse de nuevo la ropa en su lugar.

Judith sonreía.

—¿La puedes ver por mi? Tengo que tirar esto lejos de aquí.— Maggie me miraba, estaba sonriente.

—Por supuesto.

Saqué lo sucio al bosque, sentí que alguien me seguía, paré y observé a mi alrededor y pensé que tal vez es mi paranoia, aventé el pañal lejos junto con la camiseta sucia, regresé y juro que sentía que alguien me seguía. Mi mano automáticamente fue a mi cinturon donde estaba mi cuchillo, que casi no usaba pero no salía sin él. Caminé más sigilosamente, alerta a cualquier cosa.

Escuché pasos, saqué mi cuchillo y esperé al caminante o a alguna persona aquí. Una mano tapó mi boca, grité pero no se escuchó nada, me volteó la persona que me había tomado por sorpresa.

—¡Eres un idiota! Casi me da un infarto—con la mano en el corazón y mi respiración agitada veía con odio a Daryl que se reía.

—Lo lamento, vi que ibas sola y te seguí.

—No vuelvas a hacerlo, pude haberte matado.

—Pero no lo hiciste... —se acercó a mi.

Quitó un mechón de mi cara y lo puso detrás de mi oreja, me veía detenidamente para después besarme.

—Debemos...—trataba de hablar pero me interrumpía —Debemos regr... —sus labios no dejaban los míos. —Daryl, tenemos que regresar con los demás...— al fin pude hablar.

Me soltó y tomó mi mano.

—De acuerdo, vamos.

Regresamos a la iglesia, todos estaban acostados en rincones o en donde cupieran, todavía era de día pero según esto no tardaba en oscurecer, los días pasan más rápido que antes.

—Temprano iremos a buscar provisiones, después dividiremos el grupo en dos. Unos irán  a Washington y otros con Beth.

—No me gusta la idea de separarnos, pero si creen que es lo mejor esta bien.— opiné, porque de verdad ya estaba cansada de separarnos todo el tiempo.

—Seremos más rápidos, todos sabemos que tener una bebé con nosotros nos atrasa, entonces podría alguien más quedarse  aquí, reforzaremos alrededor de la iglesia, cuando vuelva Beth alcanzaremos a los demás en Washington.

Todos estuvimos de acuerdo, decidimos descansar esta tarde y la noche entera para mañana estar más activos, más despiertos.

Crows |Daryl&Tú|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora