Hanazonoland: La búsqueda de la heredera [Vol. 2]

Capítulo 06: Contacto con el arma ancestral

Chikara agitaba su cola de un lado a otro mientras seguía al chico que había escogido por hermano, mirándolo con admiración. Creía conocerlo, si caminaba con aquella decisión, incluso frotando su hombro en señal de prepararse para el combate, nada podía salir mal.

—¿Tienes un plan ~degozaru?

—No, simplemente vamos a jugar a las atrapadas con el arma, es todo.

—¿Qué son las atrapadas ~degozaru?

—Mmm... Es como nuestro entrenamiento en la playa —explicó el chico—. Correr detrás de él hasta lograr atraparlo.

—Eso era... ¿un juego?

No le respondió. Lo miró confundida, esperando una respuesta que no llegaría. Kouta había cerrado los ojos, quedándose quieto sin hacer sonido alguno. ¿Estaría concentrándose para algo especial? ¿O simplemente trataba de dominar su miedo?

Chikara no podía saber del intercambio de palabras que éste tenía dentro de su mente:

«Bel —decía el chico—. ¿Qué pasará cuando toque el arma?»

«Solo sé lo que tú sabes —replicó la pequeña—. Aunque es muy probable que mueras unos segundos después. Solo un idiota se acercaría a esa cosa completamente desarmado, sin armadura.»

Bel tenía un buen punto. Una armadura podría haberle dado más seguridad en aquellos momentos, no le hacía ninguna gracia saber que la cosa podía salir mal y su cuerpo terminaría dividido en dos o más partes. Se prometió a sí mismo conseguir una si es que salían con vida de aquella.

«¡No pienses así! —exclamó Bel, asustada—. ¡Piensa en tu hermana! ¡Piensa en Kohane!»

«Si muero talvez regrese a mi mundo —dijo Kouta, pensativo.»

«¡No creo que funcione así! —La niña suspiró—. Como sea, no me hablas solo para eso, ¿verdad? Quieres que te ayudé con el flujo de reforce.»

«Se nota que sabes lo mismo que yo —repuso el chico—. Bloquea por completo reforce hasta que active accel. Entonces libéralo en pequeñas cantidades.»

«De manera intermitente, ¿eh? —La voz de Bel se tornó alegre—. Dalo por hecho, espero que pienses en lo mucho que puedo ayudarte la próxima vez que me llames parásito, je, je.»

***

—¡Muy bien!

El grito animado de Kouta sobresaltó un poco a Chikara. Separando ligeramente sus piernas, preparándose para correr, estaba dispuesto a intentarlo. Las harpies se alejaban poco a poco del arma, dejando de nueva cuenta el espacio que Xylon ordenaba dejar para el bravo guerrero.

—Hermano, ¿cuál es el plan ~degozaru?

—Correr en círculos.

—¿Cómo?

—¡Accel!

Sintió una corriente eléctrica recorrer desde el pecho para detenerse en las piernas, llenándolas de adrenalina. Con reforce bloqueado, no hubo problema alguno para que el hechizo de velocidad fuese un éxito.

Tardando un poco en reaccionar, negándose a creer que el chico no tuviese plan alguno, Chikara lo siguió.

—¿¡En verdad no hay plan ~degozaru!?

—Correr y esquivar —dijo Kouta— esperar una oportunidad.

El muchacho maldijo que las harpies se alejaran, dejando al arma libre para que, con la forma de los brazales que ya parecía su favorita, esperase el embate directo. ¿Por qué esperaban que ellos lograsen algo sin ayuda externa?