Capítulo 46

653 62 7
                                    

Pasado

Volver a Hogwarts es siempre un alivio. Sobre todo por los banquetes. La selección no me interesa, pero por motivos obvios, este año presto atención. Aplaudo a los pocos que entran a Slytherin y no escucho a los que entran en el resto de casas. Cuando sube Daphne miro fijamente hasta que el Sombrero Seleccionador dice Slytherin y luego aplaudo a mi amiga, que sonríe cuando viene hasta nuestra mesa. Vuelvo a dejar de prestar atención hasta que llaman a Draco, que no le da tiempo ni a tener el sombrero en la cabeza porque rápidamente lo manda a Slytherin. Ni siquiera se molesta en mirarnos a May y a mí, que somos las que más aplaudimos, pero puedo ver como se pone rojo y sonrío a mi hermana. Ambas notamos que le estamos avergonzando y eso es lo que vamos a hacer en nuestra sala común. Y tenemos que apoyar a los nuestros ya que, cada vez que sale alguien seleccionado para Slytherin oigo abucheos. Sé de quien son, todavía no me he cruzado con los gemelos, pero es imposible no notarles.

—¡Potter, Harry!

Los susurros llenaron el Gran Comedor. Alexa dejó de hablar con Adrian y ambos se pusieron a mirar fijamente al niño. Y no fueron los únicos, todos nos quedamos mirando hasta que el Sombrero Seleccionador volvió a hablar:

—¡GRYFFINDOR!

La mesa de los leones estalló en gritos, entre los que se oía perfectamente a los gemelos gritar "¡Tenemos a Potter!" lo que, de alguna manera, me molestaba. Tenían al mocoso de las narices, sí, ¿pero tenían que gritarlo a los cuatro vientos? Había acabado con el mago más poderoso del momento, pero se le veía que no tenía ni idea de que estaba pasando.

—Weasley —no puedo evitar levantar la cabeza al oír el apellido Weasley, esperando que estén llamando la atención a los gemelos por lo idiotas y ruidosos que son, pero no, solo estaban llamando a otro niño pelirrojo que tenía pinta de estar a punto de vomitar.

Le seleccionan para Gryffindor, que de nuevo vuelve a montar otra fiesta por tener a otra persona más en su casa y casi no oimos como Blaise es seleccionado para nuestra casa. A diferencia de la casa de los leones, nosotros hacemos menos ruido por lo que cuando el profesor Dumbledore se levanta, todos estamos ya callados.

—¡Bienvenidos a otro año más en Hogwarts! Antes de empezar nuestro banquete me gustaría decir unas pocas palabras, y aquí están. ¡Papanatas! ¡Llorones! ¡Baratija! ¡Pellizco! ¡Muchas gracias!

Los Gryffindor vuelven a ser ruidosos y vitorean al profesor Dumbledore mientras que los demás aplaudimos hasta que la comida aparece en la mesa. No tenemos que controlar lo que comemos. May sonríe al ver aparecer todo tipo de pasteles que llevamos sin probar desde hace meses y empezamos a cenar. Se siente bien volver a casa.

***

—¡Draco! —chillo nada más entrar a la sala común. Este se gira y nos mira tanto a May como a mi, que estamos de brazos cruzados y con el ceño fruncido. Es probable que llevamos sin poner las mismas posturas años.

—¿Qué os pasa? —dice, sonriendo, pero se le borra rápidamente al ver que estamos enfadadas.

—¿Un duelo con Potter? —dice May, y suena verdaderamente amenzante—. ¿A medianoche?

—No iba a ir, solo es para que le castiguen —dice, demasiado rápido para mi gusto y frunzo el ceño. Va a acabar castigado tantas veces como yo en primer curso—. No soy tan tonto como para salir de la sala común de noche, a diferencia de Potter. Además, le he dejado una nota a Filch antes de venir, seguro que lo pillan, le castigan y le mandan de vuelta con los muggles esos que vive.

—Mantente alejado de él o escribiermos a Cissy —le digo, amenanzandole y él asiente, sabiendo que vamos en serio—. Hacemos esto por tu bien Draco, ese Potter no es de fiar, mira con quien se junta.

Primavera [Fred & George Weasley] [EN PAUSA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora