Side Effect ☆

¡Ugh!

—Diálogos

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Warning: Nostalgia.

*Ugh

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Baekhyun tomó un gran suspiro, no sabía cómo les iba a explicar, a ambos la situación, durante mucho tiempo sopesó ese momento, inclusive en sus noches de insomnio por culpa del Iris en su cuerpo, no encontró un mejor tiempo, se sentía terriblemente culpable, su precioso Minnie estaba lastimado y ahora le miraba como si fuese la persona más traicionera del mundo.

Yoochan, se siente ahogar en ese silencio repentino, él quiere creer en Baekhyun; aunque le hayan contratado para vigilar, debe haber una razón poderosa detrás. Por mucho dinero que haya de por medio, es imposible fingir preocupación y cariño genuino. Es lo que ha podido ver en sus ojos, cada vez que miraba a Minseok. Y, porque no admitirlo, últimamente como lo miraba a él.

Puede ver, como su mirada está clavada en el rostro del pelinegro, que a su vez tiene la vista en el suelo, evitándolo a toda costa. Del tiempo que lleva conociendo al pelirrosa, jamás le había visto con expresión de preocupación y tristeza.

—Será mejor que entremos. —Dijo Yoochan, mirándoles.

—A mi casa. —Sentenció Minseok.

—Los muebles están destruidos, mejor no entremos en detalles, hablaremos de eso también. —Le jaloneó la mejilla Yoochan—, vamos a la casa de Baek.

—Hablemos aquí. —Se neceó como siempre el pequeño pelinegro—, no me duele.

—No seas necio Seoki. —Se inclinó para ofrecerle la espalda—, claro que te duele, estás hasta sudando. Sube.

—Mmm... —Murmuró subiéndose y agarrándose a su cuello.

El pelirrojo se giró a ver al pelirrosa que levantó la vista y ambos conectaron, Yoochan le sonrió y le extendió una mano, ese gesto hizo que Baekhyun le mirara sorprendido, devolvió una pequeña sonrisa y le tomó de la mano y se dejó llevar por él hasta la casa, aun tomados de las manos.

Yoochan dejó a Minseok en el sofá, mientras este seguía evitando mirar al pelirrosa, Baekhyun se sentó en la mesita de centro, mirándole, como queriendo decirle todo y nada a la vez. Allí estaba otra vez ese silencio, el pelirrojo rodó los ojos, que alguien haga algo ya.

—Iré por el botiquín. —Yoochan dijo.

—Espera... —Minseok tironeó de su brazo—, no me dejes solo con Baekhyun.

—Vamos Seoki, no te va a hacer nada. —Le miró, casi divertido—, tenemos que hablar los tres.

—Bueno. —Murmuró poco convencido.

—Ahora, me devuelves mi mano, no puedo ir arriba sin ella.

—¿Puedo ir contigo?

—No. —Logró liberarse y comenzar a subir.

—Podrías traer un estuche verde que está sobre mi cama. Por favor. —Sugirió el pelirrosa.

—Sí, está bien.

Minseok se quedó mirando como el pelirrojo subía las gradas y desaparecía en la segunda planta, se sintió, realmente nervioso, tenía miedo, no quería escuchar la explicación de Baekhyun, temía que eso le doliese mucho más de lo que ya lo hacía.

—Yo nunca te haría daño, Minnie. —Baekhyun dijo, y eso le hizo pegar un pequeño brinco—, podrías al menos mirarme.

—Al menos te pagaron bien.