Side Effect ☆

Callin'

—Diálogos

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*Callin' (*Llamando)

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Edén estaba frente a un gran ventanal, disfrutando de una copa de vino, removía el contenido del mismo, sin ningún tipo de prisa, había una leve sonrisa sobre sus labios. Miraba hacía la calle aguardando, ponía especial atención a cada auto que pasaba por el lugar, tarareaba suavemente una canción, miró el reloj de su puño, y volvió su vista a la calle.

Su sonrisa se amplió muchísimo, cuando vio a su hijo Sehyoon bajarse de un taxi y caminar hasta la entrada de la casa. El pelinegro utilizó su llave e ingresó, ambos se encontraron cuando Seung se giró a mirarle. El hombre mayor le miró de pies a cabeza de forma despectiva, haciendo que el muchacho se sintiese mal por eso.

—Veo que has recapacitado Sehyoon. —Dijo Seung mirándole de forma seria.

—Quítale el edicto a ByeongKwan. —Sehyoon dijo, con la voz firme mirándole de forma desafiante—, te lo exijo.

—A ver... —Soltó a reír de una forma escalofriante—, ¿estas abogando por el marica con quién estás?

—No le digas así. —Apretó sus puños—, él es la persona que amo.

—¡Es otro hombre! —Le tiró la copa pero Sehyoon esquivó.

—¡¿Qué mierda importa eso?! —Gritó de forma enfadada—, el amor no tiene que ser hombre o mujer, el amor debe ser quien te haga sentir bien, quien te ame sin estúpidos prejuicios, amaría a ByeongKwan sea hombre o mujer, amo su alma, todo de él es perfecto para mí; él me hace feliz, nunca me había sentido así de vivo, como cuando estoy en sus brazos.

—Eres una desgracia para mi Sehyoon. —Resopló revolviéndose los cabellos—, intenté darte una oportunidad para que te alejaras de ese chico.

—Retírale el edicto. —Volvió a pedir.

—No. —Espetó molesto—, debes volver.

—Retíraselo. —Volvió a pedir mientras caminaba hasta él.

—Olvídate de ese muchacho Sehyoon. —Le miró molesto—, la cumbre de científicos, cambió la fecha, por cuestiones logísticas, así que te necesito para los planes que tengo.

—No volveré a hacer nada para ti. —Murmuró molesto—, te lo volveré a pedir, quítale el edicto a ByeongKwan.

—Sabes qué. —Sonrió de una manera que elevó las alertas del pelinegro—, en realidad no te necesito a ti, siempre fuiste tan débil e inútil Sehyoon, si no fuese por esa personalidad brutal que generas cuando Iris verde te es inyectado, hace mucho te hubiese eliminado de mi vida y de la faz de la tierra.

—Nunca entendí, porque me tratas así. —Sintió un nudo en la garganta—, he hecho cuanto he podido por complacerte, pero parece que por mucho que haga, jamás será suficiente para ti.

—Has acertado. —Resopló cansado—, no me importas Sehyoon, nunca me has importado, solo me interesa algo de ti...

Le miró de pies a cabeza, hizo un ademán por la cabeza, y en un momento totalmente inesperado, sintió como una sombra se le fue encima, aun a pesar del entrenamiento que tenía, el enorme sujeto, de seguramente más de uno ochenta se le fue encima, le asestó una patada al pecho con tanta fuerza que le lanzó contra el ventanal, el cual atravesó con violencia, cayó acostado sobre los vidrios al otro lado.

Tosió ahogado debido al inesperado ataque, el hombre de cabellos morados saltó como un animal enloquecido, siguiéndole para seguir peleando, Sehyoon realizó un Kip-up* levantándose a toda prisa, se cuadró enseguida, analizando el hombre delante suyo, esto sería bastante turbio, debido a la caída, tenía cortaduras en sus brazos, y sentía como algunos vidrios se habían clavado en su piel.