Side Effect ☆

(2/2) SB: ¡Ámame Sehyoon!

—Diálogos

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//PASADO

/PRESENTE

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Los tres días de castigo habían pasado. Yoochan le había informado que habían expulsado a Siwon del instituto, ya que muchos estudiantes habían tomado el valor de ir a reportarlo, y estaba, para su suerte, un video donde le habían dado la paliza después de que lo tiraran por las gradas, así que estaba satisfecho. De todas formas había valido la pena la broma, y el strike era algo con lo cual podía vivir el resto de su vida, no era como si no fuese a conseguir trabajo.

Algunos chicos le agradecieron por haber tenido el valor de hacer algo, el rubio se siente feliz, al fin va a poder ir a clases sin que lo tiren por las gradas o estén molestando a sus amigos, mientras recibe los halagos de las personas, siente una mirada fija sobre él, mira a través de la multitud y se vuelve a encontrar con esos oscuros ojos negros. Sehyoon está observándole, apoyado en una columna, su rostro inexpresivo, ni siquiera parpadea, otra vez ByeongKwan siente que le falta el aliento.

—«¿Debería saludarle? Pero no sé qué decirle, ¿Qué le digo?»

Un mano en el hombro hace que regrese su atención a los chicos que están bromeando cerca suyo, pero su atención quiere estar solo en Sehyoon, cuando vuelve a mirar, este ya no está en la columna, lo busca rápidamente y lo ve alejarse por el pasillo mientras parece revolverse el cabello. No quiere ser cobarde, al menos quiere saludarlo, no es como si le fuese a decir lo que siente, solo un saludito pequeño, para poder vivir tranquilo.

Se libra de la multitud y corretea por el pasillo, para seguirle, siente el corazón desbocado, cuando el timbre del inicio de clases suena, todos se mueven para sus aulas, pero él tiene un solo objetivo, en realidad ni sabe lo que está haciendo, pero a quien le importa, cuando los pasillos estuvieron solos, se dio cuenta que le había perdido de vista.

Estaba seguro que había doblado por esa sección, pero el lugar estaba desolado, no se escuchaba un tan solo ruido, caminó lentamente intentando discernir la ruta por donde se había metido, pero ese instituto tenía tantos edificios que quizás sería mejor volver a su respectiva aula, ya tendría otra oportunidad.

Mientras regresa, siente que lo toman de la mochila y lo halan hasta un espacio entre dos edificios, bien podría pasar por un callejón, solo que este no tenía salida del otro lado. Contiene la respiración cuando mira el rostro de Kim Sehyoon muy cerca suyo, mirándole otra vez, fijamente, como queriendo decirle algo y nada a la vez.

—«Joder, respira estúpido, respira. Tranquilo corazón, no te vayas a detener ahora, joder, aléjate un poco cariño, ¿Qué no ves que me va a dar un paro cardiaco?»

Y, como si le hubiese escuchado el pelinegro se alejó pegándose a la pared contraria, el callejón no era muy ancho, así que la distancia era escasamente de un metro. Sus bellísimos ojos negros otra vez sobre los suyos, no dijo nada, no expresó nada, solo eran los dos mirándose en silencio, si no fuese porque el corazón de ByeongKwan palpitaba a toda velocidad amenazándole con salírsele por la garganta, todo estaría en paz.

—«Salúdalo, salúdalo, es tu maldita oportunidad. Oh Joder, estoy temblando. ~Respiró agitadamente, mientras apretaba los tirantes de su mochila con nerviosismo y fuerza~, «Por favor, Dios, permite que no diga nada estúpido, hazme decir algo inteligente» Me gusta mucho que me mires. «Joder, ¿En serio le he dicho eso?»

Vio una expresión en su rostro bonito, una de confusión y al mismo tiempo aceptación; le vio sonreír de lado, por primera vez apartó la mirada y se giró a ver a la salida del callejón mientras se revolvía el cabello, inquieto y tal vez nervioso. Comenzó a caminar para irse, y el rubio se sintió estúpido, ¿acaso la había regado?