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Hansol se fue a su casa con un chófer que encargó Taeyong. Yo sé lo agradecí.
Mensajeé a Hansol y llegó sano y salvo. Me dijo que todos estaban durmiendo y él se estaba cayendo ya de sueño, que mañana hablaríamos
Jaemin se fue a la cama poco después. Le dio las gracias a los cocineros como todo un niño de clase alta.
Yo salí al jardín después de despedirme de Hansol.
Aún tenía las pastillas que me dio Jiwoo en mi bolsillo. ¿Que haría con ellas? Seguramente las volvería a dejar en su sitio.
El jardín trasero era precioso. Eso es lo único que podía pensar ahora. Si pensaba en todos los acontecimientos que habían pasado esta tarde en la mansión y la cafetería me pegaría un tiro o iría hasta la azotea a tirarme.
Los rosales eran iluminados por farolas de aceite muy antiguas y estéticas. Eran auténticas preciosidades. Estaban decoradas con enredaderas.
Había todo un laberinto rosa y rojo allí. Me quité mis zapatos y salí al césped suave y regado a pasar allí esas horas confusas. Las rosas eran demasiado bonitas. No sé si las veo más bonitas porque su dueño es Taeyong, pero eso poco importaba.
Acaricié el pétalo de una, era blanca. Sin querer una espina se cruzó en mi camino y acabé clavándomela.
- ¡Mierda!
- Eres un imbécil muy bonito, ¿lo sabías? - Taeyong estaba allí, en la entrada del jardín.
- ¿En qué momento hemos pasado de piropos y conocernos más a estas confianzas?
- ¿Te molesta que me comporte como lo haría cualquiera?
- Sé que tú no hablas tan despreocupado. Eres más bien serio.
- Poco me conoces. - Se adentró al jardín, descalzo.
- Estoy intentando enseñarte como soy. - Dijo de repente.
Intenté mantener mi estado zen al escuchar sus palabras.
- ¿Dejarás atrás el muro del Taeyong estirado y millonario?
- ¿Quieres que deje atrás mi dinero? - Bromeó.
Yo reí sincero.
- Aún no has decorado tu habitación.
- ¿Eso importa?
Cada pregunta y respuesta era lenta, con palabras suaves y teniendo tiempo ambos de no equivocarse en las palabras.
- ¿Por qué no eres como los demás?
- Taeyong yo acepté esta relación por Jaemin, para que tuviese una vida mejor.
- Ahora la tiene. Me tiene. Y tu también me tienes. Pareces no ver eso.
- ¿Realmente te sientes agusto conmigo y mi hermano?
- Si hubieses sido de otra forma te habría dado la patada ya. Eres diferente.
- Deja de decir que soy diferente. - Fruncí mi ceño.
- Si yo dejo mi muro de "estirado millonario" tu deja de lado tus inseguridades y tú manía de juzgar mis palabras.
- No te juzgo.
- Ambos sabemos que es mentira. - Sacó de su bolsillo una cajetilla de metal con cigarros y un mechero.
- ¿Fumas? - Me senté en uno de los bancos de por allí.
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Cold [ TaeTen ]; Completa
RomanceEn la tierra hay todo tipo de personas. Altos, bajos; ricos y pobres. Pero, por ejemplo, hay hombres y mujeres exitosos que saben lo que quieren, impulsados, disfrutan siempre de una compañía atractiva a su lado. El dinero no es un problema, por lo...