Trabajando Con El Idiota #2

26. El juego acaba de comenzar.

—¡Maricela! ¡¿Está Scott en tu baño?! ¡Porque vaya que te demoras, le voy a decir al tío Eliot! —esa fue Tara, quien esta tan impaciente por el baile, no es la gran cosa, es un baile escolar, pero bueno, irá con el chico que le gusta ¿Y qué? Ya han tenido citas. ¡Es una odiosa!

Salgo del baño con una toalla en mi cabello y otra envolviendo mi cuerpo, mis mejillas están rojas, no por el vapor, si no por el comentario de mi prima con ricitos de oro, no la odio, pero a veces quiero golpearla, sobre todo por eso, e insisto, no pasa nada con Scott y aunque sé que no está aquí para burlarse por mis mejillas rojas, ese tipo de comentarios me ponen rara, nerviosa, me cohíben. Desventajas de ser tímida, aunque me gusta este cambio, sé que en algún momento ya no me pasará lo mismo y solo me reiré.

Buscando mi ropa interior encuentro el secador, lo uso y vaya que me demoré, no me gusta usar mucho ese tipo de cosas en mi cabello, estoy intentando que crezca, pero si se maltrata ya no puede, y además de ser floja y algo tacaña no uso protector para el calor en el cabello. Termino de ponerme el vestido y busco los zapatos, me molestan los tacos formales, como en sandalias, pero me gustan en botines o botas, busque unos que no fueran tan altos, negros al igual que mi vestido, es corto con vuelos, tiene mangas largas dejando al descubierto los hombros. Me veo al espejo y... ¡vaya desastre!

—¿Ahora si podemos pasar? —pregunta Rydel a través de la puerta. Rápidamente la abro y veo a Tara con su maleta de maquillaje con las demás al lado de ella.

—Dios, se ven preciosas —Ellas agradecen y entran a mi habitación.

—Maricela, en algún momento debes aprender a maquillarte —Aconseja Tara.

—Mi pulso es un asco —Chillo mientras hago una mueca, las chicas me dan la razón, a lo que Tara y Julie proceden con el maquillaje, Ami y Rydel me peinan.

Como me gusta describir, le cuento como son sus vestidos, nuestra bella Tara tiene un vestido rosa pastel, con un elegante escote en V, su cabello tiene una trenza pequeña, como diadema con ondulaciones en su cabello y sus tacones son del color del vestido, altos, ella es mucho más bajita, pero no le digan eso. Ami lleva un vestido azul marino, corto y sencillo, con escote de corazón, lleva unos tacones blancos que combinan con el collar, blanco de flores. Su cabello está recogido en una pequeña media coleta. ¿Por qué es tan linda? A parte de tener un aura de ternura.

Julie lleva un vestido de dos partes, verde oscuro, con escote de corazón, su falda no es larga, pero tampoco tan corta, tacones negros y su cabello en simples ondas, aun así, esta chica se ve asombrosamente bella, no puedo creer que sea mi prima. Y claro, Rydel también esta bellísima, un vestido gris brillante, es muy simple, escote en V, corto, el vestido no embellece a Rydel, ella es quien embellece al vestido, debería ser modelo, su cabello liso y nada más. Y zapatos del mismo color.

—Y listo. —Anuncia Julie —mírate.

Nerviosa me veo en el espejo y me siento bonita y para nada es exagerado, me agrada.

—Muchas gracias, chicas.

—No hay de que, tienes una cita, sabemos quién es —ese baile de cejas de Tara hace que no sea necesario el rubor en mis mejillas.

—Te lanzaría esa almohada por la cabeza, pero no quiero arruinar tu cabello— mascullo entre dientes y ella se ríe, sé que no es mala, nada más que ese shipp no será, jamás.

—Sabes que te quiero, bajemos, se hace tarde. —vuelve a apurarnos y ahora está más emocionada.

Le hacemos caso, buscamos nuestros bolsos y salimos de la habitación, al bajar las escaleras puedo escuchar las conversaciones de los adultos junto a los chicos. Sobre todo, la conversación de sobreprotección de tío Asher a los londinenses.