Joel
Después de haber pasado toda la tarde con Erick, en su habitación, miro mi teléfono al ver que se acerca la hora de ir a recoger su regalo.
Estoy pensando en una buena excusa para salir, la hemos pasado increíble y sería raro solo irme, pero lo tengo que hacer.
Estamos sentados sobre su cama, mirando vídeos y él no ha dejado de reír, haciéndome reír a mí también.
- Oye Erick -le hablo cuando el vídeo terminó.
- ¿Que pasa? -sigue concentrado en la pantalla de su laptop buscando más vídeos.
- Es que... Johan acaba de enviarme un mensaje, quiere que lo lleve a recoger algo, será rápido.
- Oh está bien, ¿Vas a regresar? -me pregunta mirándome al fin.
- Voy a volver, solo será rápido.
- Está bien -sonríe.
- Enseguida vuelvo niño -le devuelvo la sonrisa y me levanto para salir rápido.
Quiero volver lo más rápido que pueda así que bajo las escaleras casi corriendo, porque es una media hora de camino.
No es mentira que voy a ir con Johan, aunque también irá Chris y apenas llego a la salida veo que me están esperando en el coche, subo rápido y me pongo el cinturón mientras Johan conduce a la salida.
Después de casi una hora aún no podemos llegar, es demasiado tarde y ya tendría que estar de regreso, hay demasiado tráfico y yo estoy tan desesperado.
Siento que no hemos avanzado nada y no puedo dejar de mirar la hora en mi teléfono.
- Johan, me voy a bajar -le aviso desabrochado el cinturón.
- Joel ya casi llegamos, solo espera un poco.
- No puedo, es muy tarde y Erick me está esperando.
- Está bien, déjalo -habla Chris- te alcanzaremos allá.
Apenas me bajo, empiezo a correr lo más rápido que puedo, tengo que llegar.
Después de un par de minutos al fin veo que he llegado y está cerrado, mierda, esto es un desastre
Me inclino sobre mis rodillas, tratando de tomar aire y suspiro resignado.
- Hola, ¿Tu eres Joel? -una chica, está parada frente a mí con una pequeña bolsa en sus manos.
- Si.
- Sabía que ibas a venir, ya que pagaste esto por adelantado -estira la bolsa hacia mí.
- Muchas gracias, se me hizo tarde y pensé que tenía que esperar hasta la siguiente semana.
- No es nada, ahora tengo que irme -solo le sonrió y camino de regreso esperando ver a los chicos.
El camino de regreso es mucho más rápido, cuando llegamos solo me bajo rápido del coche y no me despido, aunque escucho que gritan algunas cosas pero no les hago caso porque estoy corriendo hacia las escaleras.
Va a ser media noche y estoy casi seguro de que Erick ya está durmiendo.
Abro lentamente la puerta y después de entrar lo veo acostado en la cama, me acuesto con cuidado a su lado y no sé si debo despertarlo o debo irme y esperar a mañana.
- ¿Joel?
- Hola -volteo a verlo y se está frotando los ojos.
- Pensé que ya no ibas a regresar.
- Perdón por tardar tanto, había demasiado tráfico.
- ¿A dónde fuiste? -se levanta para quedar sentado y yo lo imito.
- Tenía que traerte esto - saco la pequeña caja que se encuentra dentro de la bolsa y se la muestro.
- ¿Qué es?
- Tenía que comprar una igual para tí -digo mostrándole la pulsera que se encuentra dentro, igual a la que él me dió.
- J-joel -me mira y sus ojitos están brillando.
- Perdón por haber tardado tanto, perdón por haber sido un idiota ese día, perdón por todo el daño que te hice.
- Está bien Joey, no tienes que disculparte más por eso -me sonríe y ya no puedo contenerme más.
- Me gusta mucho Erick.