MÁS QUE ESO

diecinueve

Tessa

Sentí como se acercaba a mis labios y dejaba un beso corto en ellos. — Ahora tomate la pastilla — tomo la jarra de agua para servirme en un vaso — ¿no tendrá que consultarlo con un doctor? —Mire la caja— no sé cómo mi cuerpo reaccione ha esto —suspire, el me miraba— desde el divorcio, siempre follo con protección y a estas alturas no pienso ni quiero ser padre de nuevo —su mirada cambio al otro lado de la cocina — mañana iras con una ginecóloga, le diré a Dimitri que busque a la mejor de NY — sus brazos se cruzaron sobre su pecho mientras volvió a mirarme— no...no, yo puedo ir con el ginecólogo de mi mejor amiga, ella dice que es el mejor — dije rápidamente, no quería que metiera a Dimitri en más cosas de nosotros. — Bien, como quieras —su falta de interés me hizo sentir un poco mal, me gire nuevamente en dirección a la isla de la cocina y tome la pastilla para pasármela con un poco de agua — bien ya no tienes de que preocuparte, todo lo que pudo ser un bebe se ha muerto—suspire y camine para salir de la cocina me molestaba esa actitud fría que tenía conmigo, subí para tomar mis cosas, mire las llaves de mi auto en una mesa en la entrada de la mansión las tome y me fui de ahí, había sido demasiado para un día.

Llegue a casa mis padres ya estaban durmiendo, la casa estaba en total silencio, camine hasta la cocina, mire una nota en la isla '' tu cena está en el frigorífico. Pd. Te ama mama xoxo. '' Sonreí y saque mi cena para calentarla y poder comer un poco, moría de hambre, una vez caliente acomode todo para cenar. Gemí de dolor al sentarme, sentía unos piquetitos en mi zona íntima, Michele había sido un bruto, pero vaya que lo había disfrutado, abrí mi celular para ver mis mensajes, tenía miles de Koko así que decidí llamarla para contarle todo lo que había pasado.

A la mañana siguiente, koko iba a pasar por mí, no me sentía con ánimos de manejar, cada parte de mi cuerpo dolía y sentía muchas ganas de vomitar, mis senos dolían y no tenía nada de ganas de maquillarme, vestida de una manera poco usual en mi baje a desayunar,

— Pero ¿qué le pasa a la princesa? — pregunto mi madre preocupada mientras pasaba una mano por mi frente tomando mi temperatura corporal — nada mami, solo no me siento bien, pero no debe ser nada malo — trate de tranquilizarla con una sonrisa, desayune y a los pocos minutos recibí un mensaje de koko ya había llegado por mí, me despedí de mis padres y Salí para subirme al auto.

— Luces pésimo —dijo koko viéndome— oh gracias amiga yo también te quiero —le sonreí falsamente— no parece que perdiste tu virginidad con el dios italiano — su mirada estaba al frente mientras manejaba pero sabía que se estaba burlando.

— Sabes si no fueras como mi hermana ya te hubiera jalado el cabello— subí mis piernas sobre el asiento haciéndome bolita— no quiero ir a clases —dije por ultimo — de hecho no iremos, Blady no pudo darme otro horario para tu cita, asi que vamos a la clínica, pero primero pasaremos por café tu rostro necesita cafeína.

Mire mi reloj eran las 9:00 am en punto, bajamos las dos del auto, el café me había ayudado demasiado para revivir, subimos al elevador al 4to piso y caminamos hasta el final del pasillo un área que era exclusivamente para la mujer, — tenemos cita con el Dr. Black — koko hablaba con la secretaria mientras yo veía unos folletos que había en la sala de espera, poco después se acerca a mi guiándome al consultorio, estaba demasiado nerviosa, mi primera vez con un ginecólogo y olvidaba mencionar que Koko dice que es toda una fantasía sexual.

— hola buenos días chicas —dijo un hombre alto, blanco y rubio, si estaba atractivo, pero nada comparado con miki — tú debes ser Tessa ¿no? — se acercó para besar mi mejilla yo sonreí y asentí — bien tomen asiento chicas, a que se debe tanta urgencia — Koko me miraba desesperada para que hablara, pero yo moría de la pena ¿Qué iba a decirle? — antes de que me digas, contéstame algunas preguntas para llenar tu expediente. — las primeras preguntas fueron básicas, nombre completo, edad, enfermedades, peso, estatura, hasta que llego a las más fuertes — ¿es la primera vez que visitas a un ginecólogo?