MÁS QUE ESO

Veinte

tessa

Ala mañana siguiente, me levante temprano me sentía mucho mejor, me aliste tenía que ir a mi prueba de sangre así que no tome el desayuno solo Salí lista para la clínica, todo esto de los hospitales me daba muchos nervios mi sangre me gustaba tenerla dentro de mi cuerpo no fuera, tenía que aprender a controlarme. Después de ahí pase por un café y me fui a la universidad...

— Este proyecto es de final de año y será en parejas, ni se emocionen yo los voy a crear —dijo el maestro de finanzas, todos protestamos, pero fue inútil — bien iré mencionándolos y por favor reúnanse con sus parejas, chloe Harres con Louise Brown— bien lo que me faltaba no me había tocado con koko, — Tessa Montalban y Stephan james — automáticamente mi vista fue a koko, ahora que iba a hacer, este tipo no trabaja y sería un dolor de culo hacer todo el proyecto sola. — bien alumnos pónganse de acuerdo para sus proyectos, ya pueden salir —

Vi como Stephen se acercaba a mí, bien por lo menos sabe quién soy y se dignaba acercarse — ¿alguna idea para el proyecto?

— no, pero podemos discutirlo mañana, tengo unas cosas que hacer hoy, este es mi numero— extendió su mano para darme un pedazo de hoja de papel con su número, cuando menos pensé ya no estaba, maldita sea, ahora si estaba jodida con el proyecto.

Me acerque a Khloe que estaba con louise una niña de nuestra clase— chicas, es más que obvio que are el proyecto sola—dije indignada— habla con el maestro, no puede ser que lo hagas tu sola y le des créditos —dijo louise — obviamente no le daré créditos —suspire— bien me voy, no tengo más que hacer, adiós chicas deséenme suerte.

'' hola soy Tessa, este es mi número, si tienes alguna idea para el proyecto, dime...'' mande el mensaje antes de comenzar a manejar a la mansión Rossetti, extrañaba mucho a mis bebecitos, al llegar deje mis cosas en la planta baja y corrí para saludar a mis bebes, al entrar a su habitación vi a Dimitri con una mujer de unos 30 años más o menos, ella saludaba a mis bebes — Tessa — los pequeños corrieron a saludarme— pensamos que nos habías abandonado —dijo Marcus yo me incline a su altura — jamás los abandonare exagerados, solo fue un día — reí, mire a Dimitri y después a la mujer, me levante y me acerque a ellos— Tessa, ella Lauren, la nueva ayudante de la casa, —por un momento me había asustado creyendo que sería la nueva niñera. — hola mucho gusto, soy Tessa — sonreí amablemente a la mujer, sentí a Dimitri raro conmigo, suponía que aún seguía molesto yo me sentía apenada— Dimitri... ¿podemos hablar? — salimos de la habitación para tener más privacidad. — me quería disculpar por lo que paso aquel día, yo enserio no soy como crees...— pare de hablar ya que él me interrumpió— y cómo quieres que piense lo contrario, si tuviste sexo con Michele y en su oficina... Eso no habla nada bien de ti —su mirada era déspota y me dolía que pensara así de mi— puede que Michele sea el dueño, pero tu jefe aquí soy yo y si no cancelo el contrato es porque los niños te han tomado mucho cariño... solo te pido que no vuelva a suceder, se ve que eres una jovencita inteligente... usa esa inteligencia para algo bueno. —con esas últimas palabras, se retiró no sin antes hablar con Lauren, quien lo siguió inmediatamente. Sentía mi corazón latir al mil por hora, era una completa idiota, arruine todo, inhale y exhale repetidas veces para después entrar a la habitación con los pequeños.— Bien pequeños, vamos a tomar la clase de inglés —estaba muy distraída y no sabía si podría concentrarme para la clase.

Como pude cumplí con el horario que tenían establecido los niños, después de la cena los ayude a darse un baño y a dormir, eran unos pequeños terremotos, baje las escaleras y me encontré con Marce la sra de la cocina — ¿te sientes bien mi niña?

— solo estoy cansada, esos pequeños son demonios bebes — reímos juntas, escuchamos como se abría la puerta principal por la hora pude imaginar que era Michele. Camine hasta el recibidor donde me encontré Michele, estaba terminando una llamada telefónica cuando me vio aparecer por el pasillo.

— Sígueme —dijo únicamente mientras caminaba a su despacho, lo seguí a paso lento, una vez ahí él se acercó a servirse una copa, su mirada era oscura y demasiado dura, parecía que estaba molesto sus ojos seguían clavados en cada movimiento que yo hacía y esto comenzaba a ponerme nerviosa, sentí mi celular vibrar y lo saque del bolsillo de mi pantalón este mismo se ilumino al detectar mi rostro y un mensaje de texto apareció en la pantalla.

'' Ya guarde tu número... te hablo más tarde'', genial a la hora que me contesta, ya que paso toda la mañana y no adelantamos nada.

— ¿Quién es? — me sobresalte al escuchar esa voz ronca tan cerca de mí, al levantar mi rostro corrobore, estaba a escasos centímetros de mi y por lo que veo vio el mensaje— un compañero de mi salón, estamos en un proyecto juntos y... — su dedo en mis labios me hizo callar— no pedí explicaciones y sinceramente no me importa... — entonces ¿para qué demonios me pregunta? —tengo que arreglar unos asuntos en Italia, no puedo llevar a los niños, comenzaran la escuela la próxima semana y no sé cuánto tiempo este fuera— dio un sorbo a su bebida— te quedaras con ellos, Dimitri estará aquí por si algo surge. — yo solo asentí, mientras procesaba todo lo que acababa de mencionar, pensé que hablaríamos sobre lo que paso entre nosotros pero al parecer no le importo en lo más mínimo.

les presento a Stephen James. ¿ que les parece? créanme, este hombre le sacara muchos corajes a Mr. Morrone.