Cupido Alexby |Karmaland 4|

Capítulo 11: Hora de que tomen el control

Capítulo 11: Hora de que tomen el control.

Narra Alexby.

Aquel manto oscuro que nos envuelve a Jimmy y a mí apenas está enseñando su poderío y donde habita un silencio sepulcral, juntos, intentamos hallar las mejores palabras. Si bien he estado un poco oxidado respecto a qué escribir, aunque siendo la cuarta carta de "amor" suplantando la personalidad de otro no estuvieron tan mal, aquella atmósfera relajada me abunda de inspiración.

El escrito, en esta ocasión, debe ser redactado por Fargan y para Willy, de ese modo, tengo el presentimiento que armará más desastres.

Permanezco observando las primeras dos palabras que había escrito antes de que Mangel y Rubius invadieran mi casa y mi tiempo esta mañana; "Querido hermano" para continuar escribiendo debajo.

Me es extraño confesarte a ti, quien me ha acompañado desde mis principios en el pueblo, acerca de uno de los momentos que debería de ser el más feliz de toda mi vida, es en realidad un alboroto de confusión y caos en mi cabeza ahora mismo.

Willy, creo que yo jamás te he contado de cómo le pedí matrimonio a Dulce, y para serte honesto, tal vez sea algo que dejaré enterrado bajo los escombros de la piedra reventada por los aires de aquel soleado día. Probablemente no me esté explicando bien y de seguro te sientes más confundido que antes.

Déjame volver a empezar. Willy, yo te considero una de las personas más importantes en mi vida, por no decir del mundo. Eres con quien siento mayor afinidad y quien me entiende a la perfección.

Que hemos tenido nuestros conflictos, sí, es verdad, sin embargo, tú siempre me has demostrado lo importante que soy para ti y lo que estarías dispuesto a hacer con tal de no perderme, como aquella vez que por poco dejabas que te hiriese para que quedásemos a mano.

Willy, eres el único que logra sacarme las mejores carcajadas de todos los días. Adoro el hecho de que me prestes atención y confíes en mí para contarme cada detalle que transcurre en tu vida. Que seas sincero y me compartas tus secretos.

Pero... es demasiado ¿sabes? La dulzura que me estás otorgando, la amabilidad y la gratitud.

Estas desintegrándome lentamente. Volviéndome absolutamente loco.

Loco por ti, quiero decir, en un buen sentido. Depende de que perspectiva quieras verlo.

Willy... si supieses las dudas que me generas que incluso decidí escribirte una carta...

Para develarte que hay más de mí de lo que tú conoces, que siento más de lo que aparento.

A pesar de que finja que todo se encuentra bien, que me enorgullece mi futuro matrimonio con Dulce, que no tengo más problemas con la seguridad de mi casa, por más espantosa que se vea...

Hubiese deseado que las cosas sean diferentes. No me malinterpretes, siento que mi vida es casi perfecta, no obstante, si me preguntasen de cambiarla a otra cosa, lo haría.

Y lo primero que cambiaría es a ti. Te pondría más cerca mío, de forma que no pudieses escaparte nunca, buscaría la manera de que no hubieses conocido a Kristina y yo a Dulce, trataría de que me correspondieras.

Y tómalo a tu antojo ¿sabes? Pero no me refiero a corresponderme como amigo o hermano.

No sé por qué, no sé si se trata de esa actitud explosiva tuya, de lo genial que coincidimos y que nos guste causar caos en el pueblo, o ese bonito y tímido aspecto físico que tienes, pero algo me atrajo a ti, como si de un imán se tratase, y por más que quisiese despegarme no deseo hacerlo.