Cupido Alexby |Karmaland 4|

Capítulo 18: Buscando apoyo

Capítulo 18: Buscando apoyo.

Narra Alexby.

Así como habíamos hecho ayer, Mangel y yo iremos casa por casa a preguntarle a nuestros amigos para cumplir el objetivo que tenemos planeado desde ya varios días.

Nuestro primer punto de mira de hoy, descartando a Auron, a Luzu, a nosotros dos y a Fargan, desde luego, a quien le llevaremos de sorpresa o le diremos poco tiempo antes del día propuesto, sería Lolito, con el fin de quitarnos los hogares más alejados de la lista.

Apenas Mangel y yo nos juntamos en el pueblo para partir hacia la casa del pelirrojo, una conversación amistosa se hace presente, más percibo en él, sin duda alguna, un deje de nerviosismo nada común. Deduzco, instantáneamente que se debe a la persona que estamos por visitar, ya que no es secreto para nadie la historia que ellos dos tuvieron en su tiempo, y de la cual, por medio de cierta carta, de seguro salió el tema nuevamente a flote. Agacho la cabeza y decido preguntar.

-¿Todo bien Mahe? -formulo cariñoso, implementando el apodo que el chico de orejas de oso menciona habitualmente.

-¿A qué viene eso? Tan improvisado -sonríe, y yo, reconozco esa expresión suya. La manera en que evita dar una respuesta concisa para no mentir...

-Estas... inquieto -digo sin escrúpulos, posando mis manos detrás de mi espalda- y no quiero que te hagas el desentendido, está claro que es por Lolito -amenazo, aguardando por una respuesta afirmativa.

Lo primero que recibo es un suspiro pesado y seguido, un asentamiento de cabeza, atreviéndose a mirarme a los ojos.

-¿Soy tan obvio? -busca quebrar la tensión, sonriente- Tal vez si sea por eso... -rasca su nuca, desasosegado.

-¿No hablaron desde que llegaste aquí? -comienzo a cuestionarle, sabiendo que si yo no doy el primer paso, él no dirá nada.

-Eh... -coloca su mano en el mentón, pensativo- Sí, un poco, pero casi nada -le resta importancia con los hombros y yo, detesto creer que me está ocultando algo ¿Acaso se encontró con Lolito uno de estos días? ¿Habrán dicho algo? Sí es verdad que, Mangel se marchó del pueblo a vivir a otro lado dejándole al contrario con incertidumbre, pesar y, por sobre todas las cosas, terminando su relación.

No alcanzo a indagar a mayor nivel, puesto que nos topamos con las hojas y el techo rojizo que denota la "casa de abuelita", como bien le llamamos todos, del Karmaliense. Ambos comprendemos que la plática debe finalizar hasta nuevo aviso y solo nos disponemos a tocar la puerta.

Dos minutos después, ya presenciamos al dueño del hogar frente nuestro.

-¡Yepa! -canturrea emocionado por las visitas, hasta que descubre al de lentes, tornando su rostro asombrado y se silencia expectante.

-Buenos días Lolo -saludo, queriendo romper el hielo y evitar la notoria incomodidad que sostiene mi amigo.

-¡Alexby! ¡Mi comisario! ¿Algo nuevo que reportar? -recupera su energía el de mayor rango, aunque en el fondo se le nota desubicado.

-No mucho. -encojo mis hombros- El pueblo está bastante tranquilo.

-¿Han pagado los impuestos? No quiero tener que recluir a Luzu como la última vez... -niega con la cabeza y se acomoda el sombrero de la alcaldía.

-Ese es un caso perdido. -suspiro resignado- Para eso deberíamos presentar algún documento mostrando que todos lo han hecho... según se declaró en el juicio de hace tiempo -le recuerdo, agotado de tener que repetirle lo mismo múltiples veces, pero sereno, con el fin de no discutir como hacía poco había sucedido.