Capítulo 24: Futuro incierto

588 85 42
                                    

Capítulo 24: Futuro incierto.

Narra Lolito.

Lanzo la caña hacia el mar azulado de mi casa una vez más. Llevo demasiado tiempo aquí sentado, casi tres horas diría yo, pescando, dejando pasar el día y de paso... consiguiendo libros encantados.

Pero... mi mente se haya distante en esta última instancia. Y todo por su culpa...

-Esto es culpa tuya Mangel -me encojo de hombros y atraigo mi herramienta- otro mugroso pescado ¡¿Qué acaso solo se consiguen cosas buenas bajo la casa de Vegetta?!

Arrojo la caña nuevamente, manteniendo mi vista en que la boya roja y blanca se hunda levemente.

Si supieras Mangel... lo que he pasado por ti...

Sé que nuestros caminos se alejaron hace mucho, tuvimos que cancelar nuestro compromiso, perdimos tanto...

Te fuiste del pueblo y volvías cada tanto. No me quedó otra salida más que olvidarte, dejarte atrás...

Y lo logré, por un tiempo, de veras pensé que Raulito me haría feliz, que nos amaríamos por siempre...

Después de todo, tú te fuiste y yo tenía que seguir. Pero fue inútil, le perdí a él también y a mi hija...

Tal vez sea yo el problema, tal vez me esté volviendo loco por la soledad, pero... ¿por qué es que siempre vuelvo a ti?

¿Por qué cada día que amanezco, cada tarde que oscurece, cada estrella que siento, me hace recordarte?

Incluso si hemos peleado, incluso si ya no quieras verme, incluso si has tenido tus líos con otras personas, realmente te quiero.

¿Cómo hago para que tú me correspondas como antes? Siempre fuimos la primera pareja que se formó de todo el pueblo, el ejemplo a seguir y ahora... somos la más lamentable.

Sé que te irás pronto otra vez, Mangel. No quiero que te vayas sin mí, quiero que te quedes conmigo.

No voy a permitirme perderte una vez más.

Aprieto mis puños con fuerza. No, me niego a que te alejes de mí.

Me levanto decidido. Necesito hablar con él, tiene que saberlo, escucharlo de mí.

Me acomodo la colita del cabello y agarro mi sombrero de alcalde, el cual dejé apoyado junto a mí en el pequeño puerto que construí, y comienzo a caminar hacia el pueblo.

Pasé demasiado tiempo extrañándote como para continuar ocultándome como un cobarde.

Arribo a la aldea, con los ojos bien abiertos y una chispa de esperanza y determinación. ¿Dónde puede estar?

Unas carcajadas reconocibles me fuerzan a voltear a un costado, para encontrarme con tres amigos; dos policías y a un castaño cerca de la cárcel. Sonrío, tal vez ellos podrían ayudarme.

Mientras me aproximo a los chicos, me percato de su alegría y cercanía peculiar, si yo pudiera tenerte así...

-¡Yepa! -les saludo, atrayendo su atención al instante y evitando mostrarles mis problemas. Tal como aprendí en mis años de vida.

-¡Lolo! -grita eufórico Alexby con los brazos extendidos, para aproximarse y proporcionarme un empujoncito amistoso con el codo.

-¡Buenos días alcalde! -bromea el medio búho. Cierto, sigo teniendo estas vestimentas...

Daría lo que fuera por dejar de denominarme así, todo lo que me trajo esto son complejos, enemigos y críticas.

-¡Hey! -saluda también Luzu, dejando de reír.

Cupido Alexby |Karmaland 4|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora