Juno

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Habían pasado 6 meses desde que Armitage se había ido a la supremacy, se hablaba en los pasillos por parte de los Stormtrooper sobre una nueva entrenadora de Parnasso, en su mente se imaginaba las peores situaciones, las cuales la dejaban engañada.

-Por que mi madre no está cenando con nosotros? – Acalía rompía el silencio de la mesa.

-Sabes que no está bien – le decía sin mirarla.

-Va a mejorar? – le hablaba suplicante.

Elion calló unos momentos, momentos que se volvieron eternidad al pararse de la mesa con su plato aún con comida, sin agradecer la comida, lo que salía hacerlo generalmente cuando terminaba de comer, camina hasta Acalía para besar su cabeza descubierta de su corona que generalmente utilizaba, para que lo que luego solo se escuchara fuera la puerta cerrándose.

¿Por qué todo tenía que ser tan difícil?

Nadie quería decirle a Acalía que su madre estaba grave, lo habían intentado todo, hasta lo imposible, pero ni lo imposible había resultado, todos en el reino estaban en vigilia de una muerte inminente, mientras que Acalía lloraba sola en la mesa del comedor, con algunas uvas negras cosechadas en las tierras del oeste aún en su mesa.

Su llanto ahogado tenía tantas razones, la más fuerte era que tenía que pasar esta situación sola, las mayores razones de seguir ahí se estaban muriendo de a poco, una por una enfermedad incurable y la otra por el corazón roto, al igual que el suyo al no saber nada de él, sin duda ya no lo esperaba en los balcones del palacio, ya no era tan ingenua de pensar que él volvería, solo pensaba que él ya había dejado este planeta para seguir lo que a él realmente siempre le importó, el poder.

-Acalía debe casarse – Elion estaba sentado al lado de su esposa hablándole bajito.

Juno lo miró sería, ella no estaba de acuerdo con la idea de casarse sin amarse, ellos no habían optado por esa opción cuando decidieron contraer matrimonio, y esperaba que antes de partir al encuentro con la luna, ver a su hija feliz con su marido que, si amase, pero algo la alejaba de cada noble que se acercaba a ella.

-No lo hará Elion, no sin estar enamorada, no puedo hacerle eso a mi hija.

-Lo siento querida, pero ella antes de ser nuestra hija, es la princesa de Tafnedara.

-Desde cuando cambiaste la opinión sobre nuestra hija? – se sentaba en la cama.

-Desde que me ví enfrascado en esta jaula, quiero que ella tenga más visión que nosotros y así pueda liberar y salvar Tafnedara.

-A quien amas más Elion?

-A mi familia, pero si seguimos así, jamás podremos ser completamente felices.

-Dale tiempo, aún es joven, tiene 15 años aún – Juno le tomaba una mano – sé que encontrara un buen joven que también la va a querer, será de las exigencias del consejo para poder reinar el planeta y nos podrá salvar, o por lo menos a tí.

-No digas eso, te sanarás, siempre has sido una mujer fuerte.

-Pero no ahora, hay que ser más realistas que optimistas, pero yo sé pronto – se dio un momento con un suspiro – falleceré y tendrán que salir adelante.

Elion se quitó la corona, desligándose de su nombre para ser esposo, para ser él.

-Quisiera tanto que nuestra hija sea feliz.

-Lo será, pronto lo será.

...

-La Primera Orden se siente complacida de que hayas sobrevivido, padre. – le decía mientras entraba a una pequeña sala de reuniones en la supremacy luego de salvarlo en Parnassos

-Le debo mi buena fortuna a Phasma- la apunto con su mano extendida - Phasma, te presento a mi hijo, Armitage.

Brendol se encontraba de buenas por haber sobrevivido a Parnassos, mientras que Armitage veía a los ojos a su salvación de esa maldita cárcel, no sería la primera persona que asesinaría, pero tampoco la última, todo era cuestión de tiempo y confianza.

...

- ¿Porque tengo que ver a Inkle? – Acalía se acercaba a la cama donde estaba su madre.

Juno le tomo la mano mientras la miraba con ternura, como siempre lo hacia con todos, era la mujer más amable del planeta, era perfecta.

-Por que es un buen muchacho, es parte de la corona y es muy guapo – le sonreía coqueta.

-Cabello blanco al igual que su tez, ojos negros – repetía sarcástica – todos son iguales.

-No espero que busques a alguien diferente hija, así es nuestra raza – se acomodaba en la cama para verla más de frente.

-Mamá – no solía llamarla así – a tí, antes de estar con mi padre, ¿no te interesó algo que no fuera blanco y negro?

-Te gusta alguien de fuera de nuestro planeta? – Juno se espantó un poco.

Acalía se puso un poco nerviosa, si bien ya no esperaba a Armitage que cruzara esa puerta por ella, no quitaba el hecho de que él fuera guapo, un imbécil que se había olvidado por completo de ella, pero un imbécil muy guapo, suspiraba chistando, riendo.

-No – reía – no me gusta nadie.

-Hija, como reina consorte de Tafnedara, esposa del portador de la corona de Caliopé se haya enamorado de alguien que no sea de su propio linaje – le decía seria y un poco enojada – pero como tu madre – suspiraba mientras sonreía con los labios solamente – estoy feliz de que hayas encontrado el amor.

-Madre, no me gusta nadie – Acalía trataba de hacer entender a su madre.

-Es aquel chico, ¿el hijo del General Hux? – Juno estaba dispuesta a averiguar el nombre del chico que había captado las atenciones de su difícil hija.

-Madre, yo no lo conozco – le decía mientras trataba de calmarse.

-Es muy guapo Acalía, pero sin duda tiene un carácter horrible.

-Ni te lo imaginas...

Juno se sorprendió ante tal declaración de su hija, con esas cuatro palabras le daba el nombre de portador del corazón de la joven princesa.

-Ah sí? – se reía por la ingenuidad de su hija – sabes que no puedes acercarte a él, tú padre te lo prohibió.

-No viene hace seis meses madre ni, aunque quisiera – tomo el juego de té que tenía su madre en el velador y lo llevo a una mesa cercana.

-Si averiguo que sucedió con el chico, ¿aceptarías ver a Inkle y darle una oportunidad? – su madre intentaba una de las jugadas calculadoras que la hacia una Kiliam.

-Es un trato – vio la hora puesta en el comunicador – debo irme, nos veremos luego – le sonreía despidiéndose de ella cariñosamente.

Coróin di Caliopé(Armitage Hux)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora