CAPÍTULO 6: "¿Tienes novio?"

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Terminé de prepararme para ir a casa de Ryan a comenzar el proyecto, llevo mi caja completa de accesorios para hacer pulseras.

Mamá me compró los hilos,cintas, dijes,etc. Para distraerme cuando estoy sola en casa ya que ella siempre está de guardia en el hospital, es doctora.

—¿Tienes todo?—Preguntó.

—Si, toma, esta es la dirección.—Le entregué el papel que me había dado Ryan ayer, lo leyó mientras manejaba.

Nos detuvimos frente a una casa de dos pisos bastante lujosa, sus paredes eran de color verde militar y tenia una entrada con variedades de flores y arbustos, muy bonita pensé.

Al golpear la puerta–Que se me hizo difícil ya que tenía la caja en las manos–me abrió una señora de unos cuarenta y tantos, su piel blanca, ojos profundamente azules y cabello rubio, sin dudas era la mamá de Ryan, el parecido en ellos era exacto.

—¡Hola, buenas tardes! Tu debes ser Sasha ¿no?.—Preguntó regalandome una sonrisa.

—Ho-hola, si.

—Pasa, Ryan esta arriba en su cuarto esperando—Se hizo a un lado señalando las grandes escaleras en frente de mi.

Subí y me dirigí a la habitación que la señora White me indicó, golpeé la puerta y un "Adelante" me confirmó que podía pasar.

—Ho-hola.—Lo saludé al entrar.

Su cuarto era completamente azul, tenia una cama de dos plazas, un escritorio, computador y un gran armario negro.

Era un cuarto el doble de grande que el mío.

—Hola. Alex me acaba de avisar que no va a venir, tuvo un inconveniente con sus padres pero dijo que para la próxima vendrá a hacer su partd.—Habló Ryan sacando la vista de su celular.

—Ah. Bu-bueno—Contesté soltando un suspiro.

No te pongas nerviosa porque luego tartamudearás.

—¿Quieres que lo empecemos nosotros o lo hacemos otro día cuando el venga?.—Preguntó enarcando una ceja hacia mi.

—Po-por mi n-no hay problema, ¿Tú que piensas?—Terminé de formular bien la oración.

—Me da igual, no tengo nada para hacer ¿que tienes pensado? Se me olvidó preguntarte en el Colegio y ayer estuve pensando unas ideas pero primero quiero escuchar las tuyas.

—Pues, traje mis cosas para hacer pulseras—Señalé la caja—A todo el mundo le gusta y creo que venderemos muchas—Su mirada estaba fija en la mía y la bajé.

Me siento incómoda cuando hacen eso.

—Haremos eso, mi idea no es nada al lado de la tuya—Sonrió negando.

—¿Cuál era tu idea?—Pregunté mientras sacaba las cosas de la caja.

—Vender Hotdogs—Levanté la mirada al escucharlo.

—¿Hotdogs?—Fruncí el ceño.

¿De verdad iba a vender eso?

Soltó un bufido—Si, aunque es una idea estúpida solo haremos las pulseras—Se sentó frente a mi en el suelo.

—¿Sabes hacerlas?

—Acabo de ver un vídeo mientras me decías tu idea y se ve bastante fácil—Se encogió de hombros.

Después de hacer unas 30 pulseras en silencio volvió a hablar.

—¿Te puedo preguntar algo?

—Si—Contesté con la mirada en las pulseras.

Nuestras Perfectas Imperfecciones [✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora