Mi Secuestrador©

Capítulo 30

Melanie

Bien, ya han pasado unos días desde que les brindé techo a Luisa y Alicia y hasta ahora todo va bien.

Justo ahora me encuentro en casa y me estoy arreglando para ir al baby shower de Lía, aún no a querido revelar el sexo del bebé, y lo hará en la fiesta definitivamente será una gran sorpresa para todos nosotros. Ya tiene siete meses de embarazo, casi ocho, sí pronto nacerá ese gigantesco bebé y lo digo así porque tiene una pancita enorme.

Pensando las cosas un poco ¿cuales serán las verdaderas intenciones de ese par? No lo sé, es que son capaces de todo, aparte llevan una semana acá y no a pasado nada y la verdad es que eso se me hace muy sospechoso, pero dejaré de ser paranoica respecto a eso.

De otra que no se hace muchísimo tiempo es de Paulina, parece como si la tierra se la hubiese tragado. Respecto a Coral y Jayson supe que viven juntos por el mismo Alejandro pero no supe nada más. En la fiesta estarán Leonardo y Sandy; ¿si los ubican? Pues los policías ahora trabajan en la empresa de Alejandro rastreando cosas de la propia policía y los tiene bastante controlados con eso de que saben lo del Rey de las sombras. Y por supuesto también están Lucas, Rita, John y Cata que irán, creo que están incluso más emocionados que los mismos padres del bebé. Aparte espero ver a mis padres allí hace unos días no los veo. También los padres de Lía y Cata estarán allí.

–¿crees que debería vestirme menos formal?– preguntó Alejandro, se veía súper bien y apuesto pero iba demasiado formal.

–cariño, te ves muy sexy pero creo que deberías ir un poco menos formal, es demasiado– dije dejando un beso en su mejilla. Este sonrió y se metió en el armario para cambiar su atuendo.

Se suponía que no sería algo formal según su invitación, pero tampoco era casual tenía que ser elegante pero relajado, aparte teníamos que ir con camisas blancas, no entiendo lo que se le ocurre a Lía.

Con esa rara y específica descripción armé mi atuendo que era un conjunto, consistía en un top corto de mangas largas blanco con una falda negra alta con una abertura corta en el muslo, junto a unos sencillos tacones rosa claro tipo sandalia, sí últimamente los ocupo mucho. Mi cabello decidí ponerlo totalmente lacio con la plancha, estoy muy feliz porque después de tanto esfuerzo lo tengo a la altura de la cintura, tome una horquilla y arregle un lado. Una vez lista me puse un collar con un dije de diamantes rosa y unos aretes a juego que Alejandro me había obsequiado hace poco, era el juego completo del anillo de promesa ¿recuerdan? Me hice un maquillaje sencillo de los que ocupo cada que necesito maquillarme para alguna ocasión ya que casi no me maquillo, lo hice rosa para que relatara un poco más y lista.

–¿alguna vez te he dicho que me encantas? Me gusta todo de ti por Dios, pero definitivamente estoy obsesionado con tu cabello– hablo Alejandro poniéndose frente a mi, este hombre es tan guapo.

–tú me encantas más hermoso, pero en cambio a mi me obsesiona todo de ti cariño– dije besándolo, Dios es que él es tan irresistible y caliente. Ahora traía un jean ajustado de color negro, junto a una camisa blanca de mangas largas también y unas vans negras. Sobre eso traía una gabardina gris. ¿Saben? Nunca se viste así y creo que debería hacerlo más a menudo, aunque formal se ve tan irresistible, o bueno es que todo y nada se le mira bien si entienden a qué me refiero.

–¿así está mejor o es demasiado casual?– preguntó poniéndose perfume de manera sutil y tomando unos lentes de sol. ¿Les conté que siempre lleva una cadenita de oro que le había obsequiado su madre antes de que muriera?

–Dios no– me miro elevando una ceja y aclare mi garganta ¿porque diablos estoy nerviosa? –quiero decir así luces demasiado bien, estás de infarto–