Capítulo 13

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Maratón 2/3
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- Hola – saludo al pecoso cuando lo veo.

- Hola Isa – se acerca y me da un beso.

- ¿Qué haces aquí? – pregunto extrañada.

- Quería ver si podíamos pasar un tiempo juntos – me sonríe y me hace sonreír, es algo contagiosa.

- Podemos ver películas en mi casa, si tu quieres claro – me comienzo a poner nerviosa por estar con él, siempre me pasa.

- Claro y si quieres pedimos algo – yo asiento en respuesta y lo dejo pasar.

Total, decidimos ver la película de Capitán América: El primer vengador, estoy recargada en el pecho de Sam y el me abraza por los hombros; huelo su encantadora colonia y me deja fascinada como todas la veces que estoy junto a él. Pasos se escuchan en la escalera y adivinen quién es, Thomas Holland señoras y señores, espero no venga a molestarnos.

Pasa a la cocina y se escucha como llena un vaso con agua, doy gracias al cielo por eso y sigo mirando la película, me gusta como Marvel las realiza digo no soy una mega fan, pero disfruto ver sus creaciones; o sea han visto a Chris Evans con sus precioso ojos azules , su cuerpo marcado, su cabello rubio y su precioso rostro.

- Que onda Sam – llega dando un trago a su bebida.

- ¿Tom?, ¿Qué haces aquí? – le mira extrañado.

- Soy inquilino de Isabela, así que aquí vivo – se sentó en las recargadas del sofá, pero a un lado de Sam.

- Wow, pues genial amigo – le sonríe y voltea a verme.

- ¿Qué haces aquí Tom? – sonrió falsamente.

- Vine por un vaso de agua – movió el vaso e hizo que le cayera a Sam en su pantalón.

- ¡Tom ten más cuidado! – tome algunas toallitas para ayudarle a Sam a secarse.

- Una disculpa viejo no era mi intención – claramente descifró el sarcasmo en sus palabras.

- No te preocupes, Isa ¿puedo pasar a tu baño? – asiento y el pecoso se va.

Ambos vemos como el chico entra al baño y tardará algunos minutos mientras logra secar un poco su pantalón, veo a Tom y casi lo quiero matar con la mirada.

- Ups creo que se mojó al verme – levanta sus hombros y ríe.

- Eres un idiota Holland – ruedo los ojos.

- Oye he logrado follar con algunos hombres – trata de deslindarse de esto – no tengo la culpa de que todos quieran conmigo.

- Me dan unas ganas de matarte – me levanto de mi lugar y camino por la sala.

- Ni lo intentes, soy inmortal – ve sus manos como si tuvieran algo interesante.

- ¿Quién es inmortal? – dice Sam detrás de nosotros.

- Dios – digo y el asiente.

- Mi abuelo – da un trago a la poca agua que quedo en el vaso.

- ¿Tú qué? – ambos volteamos a ver a Tom, ¿Qué haces idiota?

- Ay Tom que bromista – río – creo que te llaman – lo empujo a las escaleras para que vaya a su habitación.

- No lo creo – le miro con cara amenazante y este rueda los ojos – creo que tienes razón, adiós Sam.

- Adiós – contesta el pecoso.

Desaparece de nuestras vistas y vuelvo con Sam para continuar hablando sobre cosas sin importancia, después llegan mis padres y se despiden del chico al igual que yo, nos deseamos buenas noches y decimos que mañana en la Universidad nos vemos. Ayudo a mi madre a recostar a los mellizos y por fin me voy a mi recamara no sin antes desearle las buenas noches a mi familia.

- ¿Para mí no hay buenas noches?

- ¡Eres un idiota! Casi me matas del susto – toco mi pecho y respiro, de verdad que me asusto.

- Tampoco es para tanto – se sienta en mi cama.

- Oh no, vete a tu habitación ya es tarde- lo tomo del brazo y lo conduzco a la puerta.

- ¿Qué pasa Márquez? – pregunta extrañado.

- ¿Qué pasa? Lo que pasa es que cada vez que intento realizar mi vida con normalidad apareces tú – dije exaltada y sacando todo mi coraje con él.

- ¿Estás diciendo que arruinó tu vida? – asiento en respuesta y noto que se molesta – pues eso hubieras pensado antes de involucrarme en ella.

- ¿Dime cuándo te invoque esta vez? – nos miramos fijamente.

- Puedo hacer lo que sea, no por que no me invoques significa que no pueda venir a la Tierra – tensa su mandíbula.

- ¿Y qué haces en mi casa?, ¿Qué haces en mi misma escuela?, ¿Qué haces en mi vida? – cada oración golpeó su pecho con mi dedo índice.

- De una vez te digo que TÚ fuiste la que decidió involucrarme en tu vida con aquella invocación – se mantiene en su lugar.

- Tal vez nunca debí invocarte – abre y cierra su boca, y tengo toda la razón si no lo hubiera invocado todo estaría normal.

Tom no dice palabra alguna sino que solamente se da la vuelta y sale de mi habitación, maldita sea ¿por qué a mí? Quiero vivir una vida normal, quiero estar completamente enamorada de Sam y con Holland a mi lado no puedo hacerlo y simplemente quiero tener mi vida de antes.

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Me perdonan por no publicar capítulo estos días del maratón¿🥺

Tenía y tengo demasiada tarea, por eso no puede actualizar pero aquí está el capítulo y disfrutenlo!!💕

(𝑺𝒊 𝒗𝒆𝒏 𝒂𝒍𝒈𝒖𝒏𝒂 𝒇𝒂𝒍𝒕𝒂 𝒅𝒆 𝒐𝒓𝒕𝒐𝒈𝒓𝒂𝒇𝒊́𝒂 𝒊𝒈𝒏𝒐𝒓𝒆𝒏𝒍𝒂, 𝒆𝒔𝒕𝒂𝒃𝒂 𝒆𝒔𝒄𝒓𝒊𝒃𝒊𝒆𝒏𝒅𝒐 𝒆𝒏 𝒍𝒂 𝒎𝒂𝒅𝒓𝒖𝒈𝒂𝒅𝒂 𝒙𝒅)

𖤐. ❛𝐋𝐀 𝐌𝐀𝐋𝐃𝐈𝐂𝐈𝐎𝐍 𝐃𝐄𝐋 𝐏𝐋𝐀𝐂𝐄𝐑, 𝑡𝑜𝑚 ℎ𝑜𝑙𝑙𝑎𝑛𝑑Donde viven las historias. Descúbrelo ahora