S.E.D.T.P. [YiZhan]

Capítulo 27

Los días fueron pasando, aunque no se habían podido ver cómo habían acordado, seguían comunicados a través de mensajes y llamadas.

Nainai ofreció a Yibo el trabajo de cuidador de perros que antes realizaba su hermano Huan, no porque necesitaran el dinero, sino en forma de distracción para el castaño quién aceptó de manera inmediata.

Por su parte el mayor siguió su labor en la tienda del Señor Deng.

Al principio fue algo incómodo, mientras que el señor Deng pensaba que sólo se trataba de una pelea común de parejas, LunLun sé dirigía hacia Zhan únicamente por motivos laborales.

Decidió hacer un último intento por arreglar la situación, sentía que él era quién había fallando en la relación y quería por lo menos hacer las pases con su LunLun quién había puesto una barrera de hielo entre ellos.

-LunLun ¿Podemos hablar?-.Zhan tiraba de su manga.

-No tengo tiempo, hoy es Viernes y debo preparar los últimos pedidos-.

Mientras revisaba unos comprobantes de los proveedores de mercadería sin levantar la vista.

-Pero no me gusta que estemos así...-.

-Por el momento no puedo tratarte de otra manera, todo lo que ha pasado aún me duele y más daño me hizo la manera en que me enteré...-.

-Lo lamento tanto LunLun, Meng Ziyi no debía indagar en nuestros asuntos...-.

-Si ni fuera por ella ni siquiera me lo hubieras contando...-.

-No digas eso Deng...-.

-Es la verdad Zhan...se me hace tarde y a tí también...-

-¿Si quieres por ahora podemos intentar ser amigos?-.

-¿Amigos?...no me hagas reír Zhan...-.Se dió media vuelta para ocultar las lágrimas.

-...No compliques más las cosas Zhan, lo hubieses pensado antes de mentirme, ahora con tu permiso debo retirarme y creo que tú turno ya terminó...-.

Levantando unas cajas desapareció por uno de los pasillos de la tienda, dejando sólo al que antes era su amado conejo.

-Bueno por lo menos lo intenté...-.

Salió rápidamente de la tienda para evitar el llanto que provocó la situación.

Quería tratar de arreglar este malentendido porque trabajar así resultaba algo incómodo pero entendió que cada persona necesita su tiempo para sanar.

Estaba llegando al parque cuándo vió a lo lejos al menor sentado en una banca, no sabe porque su corazón empezó a latir de repente haciéndole olvidar aquél mal momento.

Se fue acercando lentamente y cuando éste lo vió esbozó una sonrisa radiante.

-Zhan-ge llegastes...-.Abrazándolo de manera espontánea y sorpresiva.