YOAN
Mi hermosa esposa tenía siete meses de embarazo, nos enteramos por el ultrasonido de que tendríamos una niña y un niño, estaba feliz con eso y aún no lo comentábamos abiertamente hasta la fiesta de los bebés, acababa de llegar de mi trote matutino cuando, me encontré con muchos Anderson en la sala y a mi abuelo.
— Hola Yoan.
— Hola abuelos ¿Qué hacen por acá? El baby shower es en una semana ¿Están bien?
— Te estábamos esperando — me dijo mi abuela, tras darme un beso en la mejilla, hizo que me sentara con ellos —. Hay algo que queremos hablar contigo.
— No es nada malo, lo prometemos — me aseguró tío Tony.
— Muchos Anderson, no puedo evitar sentir éxtasis y un poco de nerviosismo, en fin, Jacquie sigue dormida ¿Quieren que la llame?
— Ehm, no estamos completamente seguros de que sea buena idea — mencionó tío Jackson —. Sabemos que se enterará, pero, médicamente hablando, dudo que sea aconsejable hacerla venir.
— Tiene razón — apoyó tío Tony —. El vientre de Nya creció muchísimo con las gemelas, y vaya que le costaba movilizarse durante el séptimo mes. Y también comió como si no hubiera mañana...
— Jacquie y yo estaríamos de la misma talla si no hiciera ejercicio.
— Tony pasó por lo mismo — mencionó mi abuela, pellizcándole la panza a su hermano menor.
— Deja — le dijo retorciéndose por las cosquillas.
— Tengo que estar en forma, sino, podría enamorarse de otro.
— Estarás bien, cariño, las mujeres no solemos decir esto, pero, la realidad es que, nos gustan los hombres con suficiente carne — le guiñó el ojo al abuelo.
— Oigan, no quiero vomitar mi desayuno — les dijo tío Tony.
— Mejor vamos yendo directo al grano — tío Jackson llamó mi atención —. ¿Recuerdas que habíamos hablado sobre que mis padres habían dejado varios regalos para ti? — me preguntó.
— Sí, lo recuerdo ¿Pasa algo con eso?
— Verás, ahora que oficialmente ya estás, "revivido", significa que ahora puedes tener acceso a tus herencias — me dijo tío Tony.
— Pero, eso también significa, que, tienes que venir con nosotros a, Francia — dijo mi abuela —. A Marsella, para ser más exactos.
— Wow, pensé que sería Texas, no Marsella, estuve en Francia hace unos años ¿Quién diría que tengo un piano allá? — ellos se miraron. — ¿No es un piano?
— Sólo queremos ponerte al tanto, no estás obligado a subir ahora mismo al jet, iremos cuando tú quieras — explicó tío Tony.
— Cuando nazcan mis mellizos no podré, además, doy clases de medicina en licenciatura, maestría y doctorado, no puedo disponer de mi tiempo como antes.
— Okay, sigue habiendo tiempo suficiente para que tomes lo tuyo — se estiró para ver a su hermana —. ¿Ya le había dado mi correo? — inquirió —. Porque sinceramente no me acuerdo.
— Le dimos cada forma posible para ponerse en contacto con nosotros, Jack — le recordó tío Tony.
— Quisiera solucionar ese problema ahora, creo que mi papá estará feliz de dar mis clases el día de mañana.
— No queremos apresurarte, cariño, tómate tu tiempo — me dijo mi abuela.
— No te preocupes abuela, yo vivo apresurado, tengo que dirigir clases, tesis, una empresa y todo está en mi cabeza, necesito resolverlo.
— ¿Te parece si lo dejamos pendiente para el fin de semana? — me propuso tío Tony.
ESTÁS LEYENDO
✟ ᴛʜᴇ ʟᴀꜱᴛ ʀᴏʏᴀʟ ✟
Teen FictionEstando tan cerca de descubrir su verdadera identidad, Yoan Palacios incursionará la odisea de vuelta a casa topándose con toda especie de noticias. Negado a seguir perdiendo, se sumergirá en turbias aguas con el objetivo de conseguir las respuesta...