CAPÍTULO EXTRA III

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SEBASTIAN

Mi suegro y su hermano estaban desparramados en el sofá cuando llegué, me senté en el otro sofá, ambos me miraron.

- Vos te ves bien hijo.

- Ni me lo diga, digirir una organización secreta es más desgastante de lo que me imaginé y eso que dirijo una pandilla por las noches.

- ¿Acostumbrado a la prótesis?

- Complicado, puedo caminar mejor pero aún no me acostumbro, ustedes también se ven bien, de hecho se ven más jóvenes que yo.

- No digas eso che, cuando vos naciste todas mis ex ya me habían querido matar, incluida mi señora esposa, tu suegra.

- Ella es una adoración señor.

- No siempre fue tan hermosa, bueno si, vos me entiendes.

- Creo.

- ¿Hailee?

- Me vuelve más loco que el presidente norteamericano, se los juro, estoy a dos dólares de poderle disparar en la cabeza, es un maldito dolor en el culo.

- Bienvenido a la jungla, mi querido hijo.

- Dios, quiero renunciar ¿No tiene otro sujeto que pueda ocupar mi lugar?

- No, Yoan no queré, no es tonto, prefiere dar clases en la universidad, es profesor de su propia esposa.

- Supe que duerme en el sofá.

- Ella no estudió y fundió el examen fatal, Yoan la reprobó y ella está molesta.

- Vaya, dormirá ahí unos buenos meses.

- Para que se le quite lo pelotudo, pues.

- Pero tuvo razón, si ella no merecía pasar la materia, él hizo bien en reprobarla.

- Eso decile vos a la chinita.

- Ni de coña, yo con la china no me meto, es la dragona de Yoan, él sabrá cómo solucionarlo.

- Yo digo que compre un sofá-cama - argumentó el tío Gideon - ¿Y vos? Boludo pandillero, ya te dije que no podés manejar a los Nighmares siendo el director de la CIA.

- Es mi equipo, funcionan mucho mejor que algunos de sus agentes.

- Ya no digas vos nada, hijo, me da jaqueca.

- Me reportaré enfermo, no puedo volver hasta que mi hija nazca sana y salva.

- Vos tranquilo, Hailee ya tuvo a Chani, ella sabe cosas ahora.

- Pero yo no, me perdí el nacimiento de mi hijo por ese hijo de puta cara de...

- Respira sobrino, respira vos.

- De acuerdo.

- Vago este.

- Me hiciste recordar Gideon, cuando Sebastian llegó a casa cuando invito a salir a Hailee por primera vez.

- Como olvidarlo, llamé a la puerta y lo primero que tuve al frente, fue a mi suegro que no era mi suegro...

- Vos ¿Quién sos?

- Sebastian, vengo por Hailee.

- ¿Vos querés ver a mi sobrina o vos querés llevarte a mi sobrina?

- Ambas, creo.

- ¡Oye! ¡Gamaliel! En la puerta tenemos un 3312 - Sebastian frunció el cejo.

✟ ᴛʜᴇ ʟᴀꜱᴛ ʀᴏʏᴀʟ ✟Donde viven las historias. Descúbrelo ahora